Una gran cortina con una cara sonriente estampada recibe al visitante del número 97 de la Rambla Catalunya. Retirar la cortina en un gesto que evoca a entrar en una carpa de circo traslada al cliente al colorido universo de la firma de moda familiar Bobo Choses, fundada en Mataró en 2019. El establecimiento ha abierto en pleno centro de Barcelona como tienda insignia de la marca, dentro de una nueva estrategia comercial que enfoca hacia el retail.
Desde el exterior, la cortina y el nombre del cartel son los únicos elementos que rompen con la estética de la anterior empresa que ocupaba el local: la histórica firma de telas, tejidos y papel pintado Gancedo, que se ha trasladado a la calle Pau Claris con un showroom. Ahora, Bobo Choses revive el local con su propuesta de moda familiar orientada a fomentar la creatividad y a promover la diversión, con una paleta de colores vivos, estampados de autor y característicos patrones. Ha devuelto a la vida el establecimiento conservando su icónica fachada de madera, que forma parte del patrimonio arquitectónico de los comercios emblemáticos de la ciudad desde 2016.
La fachada no es lo único que Bobo Choses ha conservado. Las prendas escalan por las singulares estanterías que caracterizaban a la tienda de Gancedo, diseñadas por el arquitecto Curro Inza. Bobo Choses ha optado por restaurarlas y utilizarlas ahora como soporte para presentar al visitante su producto, que tiene a Adriana Esperalba como diseñadora. Esperalba impulsó la marca hace 15 años junto a una anterior socia ante las dificultades para encontrar ropa para sus hijos que encajara con sus gustos.
La firma, que cerró 2023 con una facturación de 24,5 millones de euros, encara 2024 previendo crecer un 10%
De una firma de ropa infantil pasó a ser una propuesta de moda familiar con prendas para adultos durante la pandemia, como han explicado la diseñadora y su hermano y CEO de la empresa, Pim Esperalba, conversando con The New Barcelona Post. Fue en 2021 cuando se embarcaron a acompañar la ropa infantil con productos para adultos. Actualmente priorizan impulsar su propuesta dirigida a mujeres, con la intención de abordar después el público masculino.
Así, en un contexto en el que la ropa infantil representa dos terceras partes de las ventas de la marca, Bobo Choses apuesta por crecer sobre todo entre el público adulto, y posicionarse como una marca orientada también a este target, independientemente de que compren o no ropa infantil.
La tienda de Rambla Catalunya, que ha abierto tras una inversión de 500.000 euros para adecuar el local, es la segunda de Bobo Choses, que también dispone de un establecimiento en el Born. Este se suma al outlet del que la marca dispone en Mataró, donde también tiene ubicadas sus oficinas, curiosamente, en una antigua fábrica de la juguetería de Magia Borràs.
El establecimiento, de 250 metros cuadrados, se ha concebido no sólo como una tienda de ropa, sino como un espacio para las familias, con zonas de juego para los niños que incluyen una pantalla interactiva y una cámara cenital sobre grandes cojines en los que puedan saltar y entretenerse. En esta área, Bobo Choses ofrecerá también talleres dirigidos tanto a niños como a adultos.
Esta apertura refleja la voluntad de la empresa de orientarse al cliente final. La firma, que cerró 2023 con una facturación de 24,5 millones de euros, encara 2024 previendo crecer un 10%, según explica su CEO. Actualmente, concentra la mayor parte de sus ventas en canales multimarca, situados en más de 46 países en más de 600 puntos de venta. Este canal representa el 80% de la facturación de la empresa, mientras que el 20% recae en la venta directa a clientes, también por vía online. Bobo Choses prevé ampliar el peso de las compras de clientes también mediante esta apuesta por el retail, materializada en esta nueva tienda en el corazón de la capital catalana.