Si ya cuesta que los barceloneses se muevan por el centro de la ciudad en una temporada turística que cada vez se alarga más, aún es más difícil que se animen a pasear por su frente marítimo. De ahí que pocos conozcan su puerto y solo piensen en él cuando se les mencionen los cruceros que llegan en verano. Con la voluntad de abrirse a los vecinos, el Port de Barcelona organizará el próximo mes de mayo las primeras jornadas de puertas abiertas, mostrando sus espacios más recónditos, llenos de actividad económica cada día y con mil medidas de seguridad que impiden unas visitas más cotidianas.
Durante tres días, desde el viernes 24 de mayo hasta el domingo 26 de mayo, se organizarán rutas guiadas por aquellos lugares que suelen estar cerrados al público, como la Zona de Actividades Logísticas (ZAL), la terminal BEST y el faro de la Farola, antigua playa de L’Hospitalet de Llobregat. Desde el muelle de Barcelona, el barrio de la Marina del Prat Vermell y el Prat de Llobregat, saldrán autobuses que recorrerán el interior del puerto y acabarán en el Portal de la Pau, el punto neurálgico del resto de actividades que se organizarán durante las puertas abiertas.
“Queremos hacer más ciudad. El Port Vell es la parte más conocida pero solo representa 80 hectáreas de las 1.150 hectáreas que tenemos”, defiende el presidente del Port de Barcelona, Lluís Salvadó. “Las jornadas nacen con la visión clara de hacernos sentir orgullo de nuestro puerto. Lo tienen en muchas ciudades del mundo, como en puertos del norte de Europa, y queremos que también pase aquí”, ha agregado el director del Port Vell, David Pino.
Después de adentrarse en las instalaciones del puerto, en el Portal de la Pau, se organizarán una veintena de charlas que detallarán cuestiones que algunos se preguntarán después de verlo in situ, como el funcionamiento de una terminal de contenedores. Todo ello, se amenizará por la noche con habaneras, gegants y talleres de rumba. También habrá talleres y actividades para los más pequeños, como pintacaras y cuentacuentos, incluso se montará un espacio de juegos con mucha presencia pirata, desde pasacalles, una taberna y un barco hasta espectáculos de fuego.
No solo habrá visitas en autobús, que será turístico en el caso de las que saldrán del muelle de Barcelona, sino que también se podrá subir a una de las típicas Golondrinas para ver el puerto, algo que muchos hace años que no hacen y que esta vez podrán hacerlo de manera gratuita. Además, se organizarán rutas a pie en las que se descubrirá la historia del muelle de la Fusta y la popular Barceloneta, con algunas de ellas teatralizadas para darle más vidilla.
Para acabar de redondear el plan, en el Portal de la Pau, habrá un mercado marinero con 15 tiendas gastronómicas, en el que se podrán comprar y probar productos de proximidad. “Estas actividades están pensadas para los locales, no para los turistas, queremos dar a conocer nuestro puerto a la gente de aquí”, ha remarcado Pino. Como no podía ser de otra manera, habrá un concurso de selfies para asegurar que los participantes se patean bien las instalaciones.
Todas las actividades que se organizarán durante las jornadas de puertas abiertas serán gratuitas, pero habrá que reservar con antelación para las rutas guiadas en autobús, barco o a pie a través de la página web, con el pago de un euro para garantizar la asistencia y que no se retornará. También se han sumado a la iniciativa actores de la zona, con puertas abiertas en el Museu Marítim de Barcelona y el Museu d’Història de Catalunya, una ruta guiada por la Rambla de la mano de Amics de la Rambla y una regata de RC Sailing.
Con un total de 240 visitas programadas, el puerto prevé atraer a unos 16.000 vecinos de Barcelona y El Prat de Llobregat en esta primera edición, con el objetivo de adaptar la oferta en futuras ediciones según lo que detecten este mayo. “La gente que esté interesada que se apunte rápido, hay plazas, pero no tantas. Es la primera vez que lo hacemos y no sabemos cómo saldrá, como nos pasó con la primera edición del Nadal al Port, solo teníamos una plaza pequeña y ahora ocupamos todo el muelle de la Fusta. En estas primeras jornadas abiertas, tenemos que organizarlas de forma coherente, si vemos que es un éxito, las haremos más grandes la próxima vez”, ha expuesto Pino. El presupuesto total de la iniciativa se sitúa en los 120.000 euros.