Toni Gabaldón Samuel Sánchez
Los investigadores Toni Gabaldón (IRB Barcelona) y Samuel Sánchez (IBEC).

La investigación más allá de la covid: cómo Barcelona busca nuevas soluciones para el cáncer y la malaria

La convocatoria de subvenciones para la investigación biomédica CaixaResearch de Investigación 2021 selecciona un total de 30 proyectos que estudian aquellas enfermedades que más muertes causan en el mundo. De estos, nueve están liderados por centros de investigación catalanes.

A pesar de que la pandemia se lleva desde hace muchos meses el foco mediático, las otras patologías que antes recibían más atención continúan matando. El cáncer y las enfermedades cardiovasculares siguen suponiendo una de las principales causas de muerte en los países ricos. Es por eso que la convocatoria CaixaResearch de Investigación en Salud 2021 ha mantenido su foco habitual: las enfermedades infecciosas —hay muchas más que no son el coronavirus— y las neurodegenerativas, además de las oncológicas y las cardiovasculares.

“Fue una decisión estratégica y consciente no modificar la convocatoria y mantener el nivel de financiación destinada a estas patologías, que continúan siendo tan importantes o más que la covid”, explica el director del departamento de Investigación e Innovación de la Fundación La Caixa, Ignasi López. De hecho, de todos los proyectos seleccionados este año, ninguno se centra en el SARS-COV-2, para el que la entidad ya dedicó una convocatoria exclusiva dotada de 1,8 millones de euros en mayo de 2020.

En esta edición, CaixaResearch de Investigación en Salud ha escogido 30 proyectos de España y Portugal, con un presupuesto total de 22,1 millones de euros. De estos, nueve están liderados por centros de investigación catalanes. Para López, esta cifra constata el liderazgo de Catalunya, y especialmente de Barcelona, en la investigación biomédica, y añade, que del total de 105 proyectos seleccionados desde que esta línea de ayudas se puso en marcha en 2018, 40 provenían de centros de investigación catalanes.

Para López, esta cifra constata el liderazgo de Catalunya, y especialmente de Barcelona, en la investigación biomédica, y añade, que del total de 105 proyectos seleccionados desde que esta línea de ayudas se puso en marcha en 2018, 40 provenían de centros de investigación catalanes

Esta convocatoria es una de las mejor dotadas para investigación en el campo de la salud, tanto en España como en Portugal, por encima de las ayudas que da el Gobierno y solo por debajo de las que se promueven desde Europa. En concreto, financia los proyectos con cantidades que pueden llegar hasta el millón de euros.

Algunas de las investigaciones que han recibido apoyo de la Fundación La Caixa en esta convocatoria han sido las que están lideradas por investigadores como Samuel Sánchez, del Institut de Bioenginyeria de Catalunya (IBEC), que estudia una manera más eficiente de curar el cáncer de vejiga; Toni Gabaldón, del Institut de Recerca Biomèdica (IRB Barcelona), que busca nuevos tratamientos para la candidiasis y otras infecciones fúngicas, y Hernando A. del Portillo, del Institut de Salut Global de Barcelona (ISGlobal), que quiere descubrir cómo la malaria que predomina en países como Tailandia se hace más difícil de erradicar porque queda oculta en la médula ósea. En Catalunya, también se han beneficiado de esta convocatoria el Centre de Regulació Genòmica (CRG), el Institut d’Investigacions Biomèdiques August Pi i Sunyer (Idibaps), la Universitat de Barcelona-Fundació Bosch i Gimpera, y el Institut de Química Avançada de Catalunya (IQAC-CSIC).

Nanorobots para tratar el cáncer de vejiga

El cáncer de vejiga es el quinto más frecuente en España y es uno de los más caros de curar porque el tumor reaparece en el 70% de los casos. El problema es que los tratamientos existentes pierden efectividad porque es muy difícil hacer llegar el fármaco a las células tumorales. Samuel Sánchez propone solucionarlo con nanorobots que lleguen de forma autopropulsada, a través de la energía química que genera la urea que hay a la vejiga, que funciona como combustible.

Samuel Sánchez propone solucionarlo con nanorobots que lleguen de forma autopropulsada, a través de la energía química que genera la urea que hay a la vejiga, que funciona como combustible

Con los recursos obtenidos mediante la convocatoria de CaixaResearch de Investigación en Salud 2021, de más de 997.000 euros, Sánchez podrá probar este mecanismo en ratones, a la espera de poder demostrar que los nanorobots se dirigen a las células enfermas y paran el tumor. El investigador calcula que esta fase de la investigación durará unos tres años y, después, si todo sale bien, se podría estudiar en personas.

Cómo se esconde la malaria en la médula ósea

Hay personas que desarrollan formas graves de malaria, a pesar de que presentan niveles bajos de este parásito en sangre. Una de las hipótesis que el investigador Hernando A. del Portillo cree que puede explicarlo es que el patógeno se esconde. Concretamente, en la médula ósea y el bazo, gracias a unas nanovesículas que lo atraen. Con los recursos obtenidos, de más de 996.000 euros, Del Portillo creará unas pequeñas maquetas que imitarán estos posibles escondrijos, para estudiar durante tres años cómo llega hasta ahí este parásito y cómo se puede impedir que quede oculto, hecho que dificulta poderlo erradicar.

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El investigador Hernando A. del Portillo.

Nuevos fármacos para las candidiasis

El 80% de las mujeres tendrá candidiasis vaginal en algún momento de su vida, un tipo de infección muy molesta y difícil de diagnosticar. En la mayoría de los casos no supone un gran riesgo, pero cuando se infectan personas con un sistema inmunitario débil su mortalidad llega a ser del 50%. El principal reto que plantea es que no hay muchos medicamentos para curarla y, además, se trata de una enfermedad que genera mucha resistencia a los tratamientos.

El 80% de las mujeres tendrá candidiasis vaginal en algún momento de su vida, un tipo de infección muy molesta y difícil de diagnosticar

El investigador Toni Gabaldón ha recibido una subvención de casi 500.000 euros por parte de la Fundación La Caixa que le tiene que permitir, precisamente, estudiar por qué esta infección se adapta tan rápidamente a los medicamentos existentes, con el objetivo de detectar cómo consigue sobrevivir y encontrar algún punto débil en este proceso, y probar nuevas drogas a partir de este análisis. Además, los únicos tratamientos actuales que hay para tratar la candidiasis son los que sirven para el resto infecciones fúngicas y, por lo tanto, si Gabaldón y su equipo hacen algún descubrimiento, esta solución también podría servir para otras enfermedades.