Nuevo proyecto de Tatxo Benet en Barcelona. Tras la inauguración de la librería Ona, el socio y directivo del grupo audiovisual Mediapro ha anunciado a TV3 su intención de abrir un museo dedicado al arte prohibido. Benet, que se ha especializado en comprar y coleccionar este tipo de obras polémicas, llevaba tiempo buscando un lugar donde poder reunir y exponer las 150 piezas que ha atesorado en los últimos diez años. Al final, ha encontrado el lugar ideal: el palacete modernista Casa Garriga Nogués, que había sido la sede de la Fundación Mapfre en Barcelona.
Según ha informado la televisión pública catalana, Taxto Benet ha llegado a un acuerdo para ubicar su colección en este edificio a partir de la primavera de 2022, cuando confía en poder abrir puertas. Obra del arquitecto Enric Sagnier, que la construyó a finales del siglo XIX para el banquero Rupert Garriga Miranda, la Casa Garriga Nogués está ubicada en la calle Diputació, entre Rambla Catalunya y Balmes. La planta baja y la planta noble del edificio quedaron vacías después de que hace dos años, en otoño de 2019, la Fundación Mapfre anunciara el traslado de su sede barcelonesa a un nuevo espacio situado en el Port Olímpic, a los pies de la Torre Mapfre, donde abrió el centro KBR, especializado en exposiciones de fotografía.
En el nuevo museo dedicado al arte prohibido, Tatxo Benet expondrá obras que han levantado polvareda, han sido vetadas e incluso han provocado la dimisión de responsables museísticos. Se trata de piezas que ponen a debate los límites de la libertad de expresión y que provocan reacciones airadas por motivos políticos, de género o religiosos. Destaca la polémica escultura de Inés Doujak en la que se representaba al rey emérito sodomizado —provocó la suspensión de una exposición del MACBA—; la colección sobre presos políticos del artista Santiago Sierra, retirada de la feria Arco; y una instalación en la que se puede ver a Sadam Husein sumergido en formol, del escultor checo David Cerny.