Avión Shenzhen Airlines
El avión de Shenzhen Airlines en el Aeropuerto de El Prat. © Àlex Recolons/ACN

De puerto a puerto: conexión Shenzhen

Barcelona estrena vuelos directos con una de las grandes metrópolis chinas

Fueron 13 horas y 19 minutos. Ese es el tiempo que el Airbus A330, con matrícula B-1017, empleó para unir por primera vez Shenzhen y El Prat con un vuelo comercial regular. Con este enlace de Shenzhen Airlines, Barcelona dispone ya de un segundo destino directo con China. Desde hace unas semanas se recuperó del vuelo a Pekín, línea operada por China Airlines, accionista mayoritaria de esta compañía con base de operaciones en el aeropuerto internacional de Bao’an. Esa es una modernísima instalación aeronáutica que abrió en otoño de 1991. Los aviones empezaron a aterrizar allí dos años antes del inicio de operaciones de la compañía que ya une la capital de Catalunya con una ciudad considerada como una de las zonas económicas especiales de China.

Estas zonas se diferencian del resto de la República Popular en que el gobierno de Pekín aplica allí políticas económicas más orientadas al libre mercado, tienen más flexibilidad en asuntos gubernamentales y utilizan un sistema de gestión económica menos dirigido, diseñado claramente para ser más atractivo a sociedades locales y extranjeras.

Este era uno de los puntos que recordaba el alcalde de Shenzhen en un vídeo emitido durante la presentación institucional del vuelo en el centro de negocios de la T1 del aeropuerto. Otro vídeo, protagonizado por el alcalde de Barcelona, se emitió antes de la salida del vuelo en el aeropuerto chino. Jaume Collboni sí estuvo presente en El Prat y recordó su primer viaje a esa región cercana a Hong Kong. Lo hizo formando parte de una misión económica de Barcelona en 2016. Según reconoció el alcalde, fue en esa expedición catalana a China cuando se empezó a dar vueltas a la idea de establecer lazos aéreos directos entre las dos ciudades.

Ambas son urbes muy ligadas a la actividad marítima. Si el de Barcelona es un puerto de referencia en el Mediterráneo y Europa, el de Shenzhen es el de mayor crecimiento del mundo. De hecho, no se puede hablar de un puerto como tal, sino de las diferentes instalaciones gestionadas por la misma entidad y que se reparten a lo largo de los 260 kilómetros de la costa de esta metrópoli. Tras Shanghái y Pekín, es la tercera más poblada de China. Las actividades en sus muelles, sobre todo centradas en operaciones de buques portacontenedores, lo han aupado en los últimos años al cuarto puesto de instalaciones con mayor tráfico del mundo, únicamente superado por Shanghái, Singapur y Ningbo-Zhoushan, también en China, al que superará en breve.

Shenzhen y Barcelona son dos urbes muy ligadas a la actividad marítima. Si el de Barcelona es un puerto de referencia en el Mediterráneo y Europa, el de Shenzhen es el de mayor crecimiento del mundo.

Shenzhen Airlines

A pesar de su tamaño, pues tiene una flota de 226 aviones, la compañía que este lunes se estrenó en Barcelona es una gran desconocida fuera de China y en contados países asiáticos, pues el grueso de su operación comercial de 223 rutas y unos 800 vuelos al día se centra en destinos nacionales. Los internacionales asiáticos son escasos y únicamente van a Japón, Vietnam, Corea del Sur, y Tailandia, además de Malasia y Singapur. Hasta esta semana sus vuelos a Europa se limitaban a Londres-Heathrow, el principal aeropuerto del Reino Unido.

Por las características de la red, su flota se basa en aviones de medio alcance del tipo A320 y Boeing 737 y únicamente tiene media docena de Airbus A330. Este último es el modelo que usa para algunas líneas en las que necesita mayor capacidad, además de llegar hasta Londres y ahora a Barcelona dos veces por semana, una frecuencia que aumentará a tres vuelos a partir de febrero de 2024.

La aerolínea usa un Airbus A330 para las líneas en las que necesita mayor capacidad, como sus rutas hacia Londres y ahora Barcelona

Esa mejora de las conexiones entre Catalunya y esta parte de China supondrá un incremento del trabajo del consulado en la Avenida del Tibidabo, como reconoció su titular actual, Hu Aimin, que se mostró encantado de poder aumentar los lazos entre las ciudades, algo que compartió con Zhou Zhiwei, vicepresidente de la aerolínea, que confesó que la visita del alcalde de Shenzhen a España en marzo de este mismo año aceleró el proceso de establecimiento en Barcelona y que el aterrizaje de su aerolínea aquí ha sido un trabajo intenso durante el último cuatrimestre.

Por parte del gobierno de la Generalitat intervino Marc Sanglas; por la Cámara de Comercio, su vicepresidente, Toni Fitó y por parte del gobierno del Estado, su delegado en Catalunya, Carlos Prieto. A todos ellos les precedió Eva Valenzuela, la nueva directora del aeropuerto que este lunes se estrenaba como anfitriona en el acto público de presentación de la nueva ruta. El denominador común de todos los discursos institucionales fue el de la alegría por el crecimiento de Barcelona con una nueva línea con mucha trascendencia en lo industrial, comercial y financiero, además de reivindicar un aeropuerto con más peso en el escenario mundial.

Inauguración ruta Barcelona Shenzhen
En el centro, el delegado del Gobierno en Catalunya, Carlos Prieto; el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y la nueva directora del Aeropuerto de Barcelona, Eva Valenzuela, en la inauguración de la ruta Barcelona-Shenzhen.

Hermanamiento  

Actualmente, Barcelona está hermanada con 24 ciudades de todo el mundo. Urbes tan diferentes como La Habana, Estambul, Valparaíso, San Francisco o Atenas forman parte de esta familia. Desde 2021, Shenzhen también es hermana de la capital de Catalunya. En noviembre de 2021, la entonces alcaldesa, ​​Ada Colau, y el alcalde Qin Weizhong, firmaron el acuerdo de forma telemática. El hermanamiento, que tiene una duración de cuatro años, promueve aspectos como la colaboración en los ámbitos del comercio, las inversiones, la biotecnología, las tecnologías de la información, la sostenibilidad medioambiental y las energías renovables. El documento refrendado por ambas alcaldías elevó los de relaciones de colaboración firmados en 2002 y el siguiente en 2012, centrado en cultura, economía y transporte.

Ahora un transporte, el aéreo, en forma de Airbus A330 con 313 plazas —36 en clase Business y el resto, 277, en clase económica— unirá a estas dos ciudades hermanas de la mejor manera posible: sin escalas.