Los hermanos Maria y Xavier Padrosa, propietarios de los restaurantes Telefèric. ©Alex Froloff

Telefèric ultima una nueva apertura en Los Ángeles y celebra su aniversario en Barcelona

El restaurante de la Plaza Letamendi ofrece este mes de octubre un menú especial a 35 euros que permite degustar sus diez platos más representativos, uno por cada año de trayectoria

Marca Barcelona en Estados Unidos. Telefèric, el grupo de restauración de los hermanos Maria y Xavier Padrosa, continua su expansión en California, estado al que llegaron en 2015 con la apertura de un primer restaurante en la ciudad de Walnut Creek, cerca de San Francisco, al que siguió en 2019 un segundo establecimiento en Palo Alto, situado junto a la Universidad de Stanford. Ambos locales se convirtieron en poco tiempo en uno de los lugares predilectos de los residentes en Silicon Valley y en la Bahía de San Francisco, atraídos por sus tapas, sus paellas, sus sangrías tipo cocktail y otras especialidades como el pulpo a la gallega y las torrijas.

Este éxito animó a los propietarios a abrir también un Telefèric Barcelona en Santa Mónica en 2021 y ahora se dará un nuevo paso con la apertura de un cuarto restaurante estadounidense en la ciudad de Los Ángeles en febrero de 2023. Así, la familia Padrosa explotará ya seis Telefèric, porque a los cuatro de California hay que sumar el restaurante original, situado en Sant Cugat del Vallès, y el ubicado en la Plaza Letamendi de Barcelona. Ambos están de enhorabuena: celebran el 30º y el 10º aniversario, respectivamente.

Todo empezó en 1992, cuando, en paralelo a la euforia olímpica, Soledad Urabayen, de origen navarro y marchante de obras de arte, y su marido, Ramón Padrosa, se animaron a abrir un restaurante de pinchos en Sant Cugat. Fueron pioneros en trasladar al área metropolitana esta especialidad de Navarra y el País Vasco, con una barra con más de 90 variedades de pinchos y cazuelitas que se renuevan constantemente. Treinta años después, el Telefèric de Sant Cugat sigue en plena forma y bajo la supervisión de Soledad, que prepara una reforma y puesta al día del local para el próximo año.

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El restaurante acaba de renovar su interiorismo y luce cuadros de Miró y Tàpies.  ©Alex Froloff

Sus hijos, Xavier y Maria Padrosa, decidieron hace diez años dar el salto a Barcelona, aunque el restaurante de Letamendi no se especializó en pinchos al estilo norteño, sino en una cocina de mercado que tiene como puntos fuertes de la carta las tapas y los arroces. De lunes a viernes al mediodía, Telefèric ofrece, además, un menú a 13,50 euros (más suplemento en algunos platos) que le convierte en una opción imbatible en esa zona del Eixample.

Para celebrar el décimo aniversario en la capital catalana, los hermanos Padrosa han ideado el Menú de la Memoria, una propuesta que se puede disfrutar únicamente las noches de este mes de octubre —siempre bajo reserva— y que incluye diez platos representativos de cada uno de los últimos diez años. Concretamente, los comensales podrán degustar ocho tapas y raciones, más un postre y el coctel icónico de la casa, la Sangría Barceloneta. Y todo ello por 35 euros; o 45 euros si se acompaña con un maridaje de vinos.

¿Y qué incluye el menú? La gracia está en poder recuperar tapas que en su día fueron muy exitosas, pero que actualmente ya no están en la carta de Telefèric, como el salmón ahumado aromatizado con cremoso de yogur, aceite de trufa y miel —que representa al año de apertura, en 2012—; o el hit de 2013: una espectacular tosta con foie caramelizado a la plancha con confitura de arándanos. El menú continúa con los buñuelos de queso de Mahón con ralladura de lima y miel —que siguen en la carta— y con el ravioli de pato Pekín con salsa de foie, una creación que la chef del restaurante, Aziza El Bachiri, está estudiando seriamente volver a incorporar al recetario.

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Aziza El Bachiri es la chef del restaurante Telefèric de la Plaza Letamendi. ©Alex Froloff

Otro plato que también está en carta por ser uno de los preferidos de la clientela es el canelón de rabo de toro con bechamel de trompetas de la muerte. El menú avanza con unos tiernos cortes de solomillo en llamas, y toca la cima con dos creaciones de alto nivel: el taco de atún con guacamole, mayonesa de chipotle y cebolla crujiente —que fue la tapa ganadora en 2019 y 2020 en la feria gastronómica Tast a la Rambla— y el brioche de tartar de salmón marinado con ralladura de lima, mayonesa de sriracha y avellana caramelizada, que fue la segunda tapa más vendida en la edición del Tast a la Rambla de 2021.

El cóctel de sangría, elaborado con cava, limonada infusionada con romero, puré de cereza y cítricos, es indicativo de 2014, el año en el que los Padrosa internacionalizan Telefèric con la apertura en San Francisco. Finalmente, el postre es triple, ya que incluye la famosa torrija caramelizada con helado de leche merengada de la casa, un mini cheesecake con algodón de azúcar y tarta de zanahoria con helado de vainilla y toffee. 

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El brioche de tartar de salmón marinado de Telefèric. ©Alex Froloff

Quienes acudan a disfrutar de este menú de celebración podrán descubrir también la nueva decoración del local, que acaba de ser reformado, algo que ocurre con cierta frecuencia, ya que Maria Padrosa es interiorista. Y ojo con los cuadros que lucen en las paredes, con originales de Miró y Tàpies, lo que enlaza con la otra pasión de la familia junto a la gastronomía, el arte.

Paellas a domicilio

En el Telefèric de Letamendi nació durante la pandemia una prometedora nueva línea de negocio del grupo: el servicio a domicilio de paellas recién hechas, actividad que se explota bajo la marca Al Grano! y en alianza con Glovo, aunque el pedido también se puede recoger en el propio restaurante con un descuento del 10%. A diferencia de otros deliverys que sirven arroces en distintos tipos de recipientes, Al Grano! lo hace en paellas de verdad —con posibilidad de devolución— que se tapan con una caja de cartón especialmente diseñada para evitar que el arroz de pase y llegue al punto a la mesa del cliente en poco más de media hora. Pueden pedirse las mismas especialidades que se sirven en el restaurante, como el arroz del senyoret con gambas peladas o un arroz de butifarra, rossinyols y cebolleta caramelizada, u otras creaciones como la paella de pies de cerdo y gamba roja, con la singularidad de que no hace falta pedir paella para dos, puede ser sólo para uno, con precios que oscilan entre los 16,50 y los 19,90 euros por ración.