Fachada del Pier 01, gran dinamizador del ecosistema startup barcelonés.

Los nuevos fichajes de la junta de Barcelona Tech City

La asociación más representativa del ecosistema startup barcelonés se refuerza con la incorporación de profesionales de éxito como Josep Lluís Sanfeliu (Asabys), Ernest Quingles (Epson), Ignasi Vilajosana (Worldsensing), Enric Jové (McCann), Ana Maiques (Neuroelectrics) y Pere Vallès (Exoticca)

Barcelona Tech City ha renovado parcialmente su junta directiva con la incorporación de diez profesionales que permitirán reforzar los proyectos que lleva a cabo la entidad y “ampliar la visión de la asociación en los diferentes sectores estratégicos” del ecosistema emprendedor de la capital catalana. La nueva junta, integrada por 32 personas, mantiene a Miguel Vicente como presidente y las vicepresidencias las ocupan Lucas Carné, Dídac Lee, Miguel Planas, Carlos Blanco y Mar Alarcón. El abogado Ignasi Costas es el secretario general.

Se han incorporado a la junta Josep Lluís Sanfeliu (Asabys Partners), Ernest Quingles (Epson), Ignasi Vilajosana (Worldsensing), Enric Jové (McCann), Ana Maiques (Neuroelectrics), Pere Vallès (Exoticca), Mariona Sanz (Girbau), Carmen Ríos (Limbix), Rubén Ferriro (Grupo Viko) y Marc Murtra (Closa).

De los 32 miembros de la junta, siete, una quinta parte, son mujeres: Mariona Sanz, Carmen Ríos, Ana Maiques, Mar Alarcón, Helena Torras, Carlota Pi y Mireia Mir.

“La composición de la junta directiva pretende reflejar el talento, la experiencia y la ilusión de un grupo de emprendedores que compartimos el ADN de Barcelona Tech City. Seguiremos trabajando todos para consolidar el proyecto de Barcelona Tech City y maximizar el impacto del ecosistema digital y tecnológico en la ciudad y en la sociedad “, destacó Miguel Vicente. Barcelona Tech City, que dirige Miquel Martí, suma ya más de mil socios que representan a 1.200 empresas y cuenta con el apoyo de más de 70 grandes empresas y corporaciones.

El objetivo de la entidad, fundada en 2013 por un grupo de emprendedores, es posicionar Barcelona como un hub tecnológico internacional y promover la transformación del modelo económico de la ciudad. Actualmente, su principal proyecto es el Urban Tech Campus, un plan para crear varios hubs en la ciudad con empresas emergentes especializadas en diversos segmentos de negocio con un fuerte potencial transformador y de crecimiento en los próximos años.