El equipo fundador de Flappin, con Pol Clavell, consejero delegado, a la izquierda.

La plataforma de viajes sorpresa Flappin crecerá con una ronda de 800.000 euros

La 'startup' con sede en Barcelona prevé duplicar sus ventas este año. Ya opera en España, Italia y Portugal y acelerará su expansión con el lanzamiento de su plataforma en nuevos países europeos

Viajes sorpresa, escapadas sorpresa, un verano sorpresa, experiencias sorpresa, cenas sorpresa… todo es una incógnita para el cliente en el modelo de negocio de Flappin’, una traveltech fundada en Barcelona a finales de 2021 y que acaba de abrir su segunda ronda de financiación con el objetivo de acelerar su crecimiento.

La startup, que tiene como consejero delegado a Pol Clavell, uno de los cuatro socios fundadores, busca levantar 800.000 euros que prevé destinar a incrementar sus servicios, a impulsar su internacionalización y a mejorar su producto y la eficiencia de sus operaciones en un 90% mediante la aplicación de sistemas de inteligencia artificial y machine learning.

Con una plantilla de trece personas, Flappin’ ya opera en España, Italia y Portugal y prevé desembarcar en nuevos países cuando capte estos recursos financieros. “Estamos muy contentos con el rápido crecimiento de la compañía y de la buenísima acogida obtenida entre el público. Esta nueva ronda llega en momento clave, ya que nos hace más fuertes de cara a cumplir con nuestros objetivos: escalabilidad y mejora del producto. Además, también nos posibilita seguir aportando valor al sector profesional de la industria a través de la digitalización, y brindar experiencias únicas y emocionantes a nuestros usuarios, permitiéndoles volar más alto, romper barreras y descubrir nuevas aventuras”, afirma Pol Clavell.

La compañía, que prevé contratar a cuatro personas más en breve, confía en duplicar sus ventas este año y alcanzar una facturación de 2,2 millones de euros.

Los creadores de Flappin’ pusieron en marcha la empresa con el objetivo de unificar en una única plataforma los distintos verticales del negocio del ocio sorpresa que existían hasta el momento. Es decir, se apostó por no comercializar únicamente vuelos y viajes sorpresa, sino también cenas en restaurantes, escapadas locales o experiencias vinculadas con el wellness, el deporte y la aventura.  La idea es simplificar al máximo las cosas al usuario, para que no tenga que preocuparse de nada, solo de hacer la maleta, olvidándose de reservar vuelos, buscar hotel o de elegir un restaurante.

“Esta solución ha llegado para revolucionar las nuevas formas de viajar del consumidor moderno, sin dejar de lado la calidad, la personalización y la flexibilidad a la hora de reservar. Bajo el lema vive más y planifica menos, la compañía ya cuenta con más de 8.000 noches y experiencias reservadas”, destaca la empresa.