Empezar el año con una tienda y terminarlo con siete. Duplicar el tamaño de la plantilla en doce meses. Incrementar la facturación un 130% en 2023, hasta alcanzar los 26 millones de euros. Pasar de vender solo sudaderas a vestir a sus clientes de la cabeza a los pies. Crear un podcast de éxito que ya acumula 200.000 visitas y por el que no dejan de pasar personajes famosos. Lanzar una colección de prendas con Playboy que ha lucido la mismísima Madonna. Superar los 800.000 seguidores tanto en Instagram como en TikTok.
Estos son solo algunos de los hitos logrados en 2023 por Nude Project, la marca de ropa urbana fundada en 2019 en Barcelona por Bruno Casanovas y Álex Benlloch, dos jovencísimos estudiantes de márketing que, sin necesidad de levantar una sola ronda de financiación, han sabido construir en muy poco tiempo una historia de éxito, con cerca de 500.000 prendas vendidas el pasado año y un tíquet medio por pedido de 77 euros.
Una acertada estrategia de comunicación en las redes sociales con la que han conectado con el público más joven ha sido la base que ha permitido a Nude Project convertirse en una de las marcas españolas de moda de mayor crecimiento, pero también su lema By artists, for artist, con el que han tenido la habilidad de asociarse a iconos del mundo de la música como el rapero argentino Trueno y Rauw Alejandro. Madonna, Bad Gyal, Quevedo, Paco León, Bizarrap, Peso Pluma, Aitana o Ester Expósito son otros personajes famosos que se han vestido y fotografiado con sus prendas, contribuyendo a viralizar la marca, que se apoya también en otras originales estrategias como el Nude Tour —eventos, fiestas y apertura de tiendas efímeras que realizan en distintas ciudades— o el lanzamiento de su propia marca de cerveza, La Desnuda.
Casanovas y Benlloch empezaron a liderar este túrmix de diseño, ideas originales y crecimiento acelerado con solo 19 años desde su habitación, pero hoy, cinco años después, lo hacen desde unas modernas oficinas en el distrito 22@ que quieren convertir “en la mejor agencia creativa de España”. Sólo en 2023, han fichado a 65 personas, lo que supone duplicar la plantilla, hoy integrada por 130 jóvenes de poco más de 20 años, aunque los fundadores destacan su voluntad de apostar a partir de ahora por incorporar también talento de un perfil más sénior para reforzar la empresa en determinadas áreas.
El fuerte incremento del número de empleados responde al hecho de que 2023 fue de vértigo para Nude Project. La marca empezó el año con una sola tienda física, ubicada en la calle Fuencarral de Madrid, pero lo cerró con siete establecimientos —dos de ellos ubicados fuera de España—, a los que se sumó un octavo local el pasado mes de enero, inaugurado en Bilbao. Así, la empresa tiene ahora presencia en Madrid, Valencia, Barcelona, La Roca Village, Málaga, Milán, Lisboa y Bilbao. Todas las tiendas son propias y, antes del verano, la red crecerá con un nuevo establecimiento en Ibiza, aunque este año el foco estará puesto en implantarse en nuevas ciudades de Italia y Portugal. “Nos daba mucho miedo salir fuera; no sabíamos cómo se iba a recibir la marca”, explican los fundadores, que se sienten “superorgullosos” del trabajo hecho.
“El reto ha sido increíble. Italia es un mercado muy difícil y estamos muy contentos de cómo estamos funcionando en Milán”, afirma Álex Benlloch, que se ocupa de la vertiente más financiera de la compañía, mientras que Casanovas lidera la parte creativa. Los emprendedores prefieren no aventurarse a decir cuántas tiendas prevén abrir en 2024, pero avanzan que en esta vertiente retail seguirán una estrategia de “mancha de aceite”, profundizando en los tres países donde ya están presentes.
La rápida apertura de estas siete nuevas tiendas ha provocado un cambio radical en la fuente de ingresos de Nude Project. Así, la marca ha pasado de ser 100% online a obtener el 38% de la facturación del canal retail, con unas ventas totales que alcanzaron los 26 millones de euros el pasado año, un 130% más en relación a los 11 millones ingresados en 2022. “Es una cifra que abruma”, admite Casanovas, que prefiere no realizar estimaciones de ventas para este año. Sí que manifiesta su voluntad de mantener en el futuro este mix de ventas del 40%-60% a favor del online, un reparto que considera sano porque “las ventas por Internet, de donde venimos, no tienen techo”, afirma.
Actualmente, Nude Project ya vende sus prendas en más de cien países, aunque España sigue siendo su principal mercado, al generar el 60% de la facturación. Portugal se sitúa en segunda posición, seguido de Alemania, Italia, Estados Unidos y Holanda. “Queremos ser una marca con proyección internacional; da vértigo, pero poco a poco, con una estrategia pico y pala, lo estamos consiguiendo”, afirma Casanovas.
La web de Nude Project casi colapsó durante la campaña del último Black Friday, cuando se superaron todas las expectativas. Se produjeron más de 2.000 rupturas de stock, lo que impidió poder mandar a los clientes las prendas que habían comprado porque no estaban disponibles. Los emprendedores supieron convertir este problema informático, que afectó al 2% de los pedidos, en una herramienta de fidelización o de engagement con la marca: no solo devolvieron el dinero a los afectados, sino que les mandaron una carta reconociendo el error y les regalaron una prenda a cada uno, lo que supuso un coste de 50.000 euros para la compañía. “Con esta acción queremos demostrar que estamos aquí a largo plazo. Para nosotros es una prioridad cuidar y ganar la confianza del cliente. Somos una marca que quiere persistir”, destaca Benlloch.
Otro de los motores del crecimiento de Nude Project en 2023 ha sido la diversificación de producto, ya que en el último trimestre la marca lanzó colecciones de siete nuevas familias de producto que van más allá de sus camisetas y sudaderas. “Ahora somos una firma full look“, destaca Bruno Casanovas, en referencia a que Nude Project también vende pantalones, abrigos, jerséis de punto, camisas, polos, ropa interior, bañadores y complementos, como gorras y bolsos. El reto para 2024 es el lanzamiento de las primeras colecciones de zapatos, avanzan los emprendedores, que empezarán con la comercialización de tres modelos de sneakers unisex. Las prendas de la marca se fabrican, básicamente, en Portugal, Turquía y China, aunque la firma también tiene algunos proveedores en Catalunya para las reposiciones ultrarápidas.
Según Casanovas y Benlloch, que poseen el 100% del capital, Nude Project “ha sido rentable desde el primer año”, lo que les ha permitido reinvertir los beneficios en financiar el crecimiento. “No nos hemos repartido ningún dividendo, lo hemos reinvertido todo”, aseguran. En este sentido, añaden que no les ha hecho falta levantar hasta ahora ninguna ronda de financiación. “Hoy por hoy, no lo tenemos previsto, pero no descartamos nada si encontramos el socio ideal”, destacan.
