Las instalaciones de Cargill en el Port de Barcelona operan desde hace 50 años.

El grupo americano Viserion invierte en el Port de Barcelona

La multinacional estadounidense compra la fábrica de molturación de soja de Cargill, que prevé ampliar para transformarla en una planta de producción de proteína vegetal alternativa

Cambia de propiedad la histórica fábrica de molturado de soja que el grupo estadounidense Cargill posee en el Port de Barcelona. Otra multinacional americana, Viserion International ha adquirido la factoría, que prevé transformar en una planta de proteínas alternativas para abastecer a este emergente sector dentro de la industria de la alimentación.

La operación se ha efectuado a través de Elian Barcelona, filial de Viserion, una compañía que es propiedad de un fondo de la gestora neoyorquina Pinnacle Asset Management centrado en los mercados globales de materias primas. Según publica Expansión, el objetivo es modernizar la planta, que ha cumplido 50 años, y ampliarla a medio plazo para completar el proceso industrial con la fabricación de proteína concentrada y texturizada, ingrediente clave para elaborar alimentos alternativos de base vegetal y pienso de alta calidad. En toda Europa sólo hay actualmente dos plantas de concentración y texturización de soja ubicadas en Países Bajos y Serbia y pertenecen al grupo ADM.

Ubicada en el Moll Álvarez de la Campa, la molturadora de Cargill  procesa más de 700.000 toneladas de haba de soja al año, procedente, sobre todo, de EEUU y Brasil, y extrae de esta leguminosa harina y aceite. Emplea a 69 personas y genera un negocio anual superior a los 400 millones de dólares. La planta da servicio al mercado catalán, español y europeo de piensos e ingredientes alimentarios. El cierre de la compra por parte de Elian se espera para el primer trimestre de 2024, una vez obtenida la aprobación regulatoria de la Autoridad Portuaria de Barcelona, ya que se trata de una concesión pública.

Esta fábrica en el Port de Barcelona se convertirá en la primera gran instalación europea de Viserion, grupo con sede en Boulder (Colorado) que factura anualmente alrededor de 4.000 millones de dólares.  Se prevé que el proyecto de ampliación, que requerirá de 25.000 metros cuadrados de superficie adicional, esté listo en 2026. Se calcula que la plantilla global superará el centenar de personas cuando arranque la producción de proteína vegetal.

“Estamos orgullosos de adquirir y hacer avanzar esta importante planta de procesamiento catalana mientras construimos un sistema alimentario más resiliente en toda Europa”, ha señalado Andrés Martín, fundador y director general de Elian Barcelona y exdirectivo de la multinacional holandesa Bunge. “La sostenibilidad es nuestro valor fundamental y creemos que este activo estratégico, junto con la escala, los recursos y la experiencia de Viserion, nos permitirá alinear mejor nuestros servicios con los consumidores y las tendencias del sistema alimentario, mejorar la seguridad alimentaria europea y resistir las interrupciones de la cadena de suministro”, ha añadido el ejectutivo, que ha agradecido el apoyo recibido por ACCIÓ, la agencia para la agencia para la competitividad de la empresa de la Generalitat de Catalunya.

“La adquisición de esta planta estratégicamente ubicada, clave para el suministro de alimentos de Catalunya, profundiza el compromiso a largo plazo de Viserion International con el mercado europeo”, ha subrayado el consejero delegado de Viserion, Aaron Wiegand. “Creemos que la incorporación de esta instalación de trituración es una muy buena oportunidad para expandir la plataforma Viserion y para acelerar su inversión continua en la crítica cadena de suministro de alimentos y piensos europea. Pinnacle da la bienvenida al grupo Elian Barcelona y espera continuar apoyando al equipo de Viserion compartiendo nuestra profunda experiencia en este sector”, ha añadido Jason Kellman, socio gerente y director de inversiones de Pinnacle.

Según Expansión, el grupo ganadero y cárnico leridano Vall Companys y Zyrcular Foods, su filial de proteína alternativa, están implicados en el proyecto de Elian en el Puerto de Barcelona, al igual que Semillas Batlle, Metalquimia, la Cooperativa de Artesa de Segre y la Universitat de Lleida.