Hacía dos años que la dirección de Alstom y la plantilla de la fábrica de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona) esperaban la resolución de esta adjudicación. La licitación salió en verano de 2019 y presentaron la oferta en enero de 2020. Finalmente, el consejo de administración de Renfe aprobó el lunes la compra a Alstom y a Stadler de 211 trenes de gran capacidad para los servicios de Cercanías de toda España y su mantenimiento durante 15 años, por un importe de 2.445 millones de euros. El lote más grande lo ha ganado Alstom, que tendrá que producir 152 trenes de 100 metros de longitud por 1.447 millones de euros.
Según fuentes de Alstom, la fabricación de estas unidades se hará íntegramente en la planta vallesana, que se tiene que preparar para poder asumir este importante volumen de trabajo. En las instalaciones de la multinacional francesa en Santa Perpètua se hace todo el proceso de producción, desde los primeros diseños hasta la puesta en servicio, y en ella se han fabricado desde los vagones de metro de la L9 y el tranvía de Barcelona hasta trenes de Cercanías y de AVE. También cuenta con un centro de investigación y desarrollo (I+D). De hecho, hace años que apuesta por su digitalización y centraliza la impresión en 3D del grupo.
Para dar respuesta al contrato de Renfe, la empresa prevé duplicar la plantilla actual en Santa Perpètua, formada aproximadamente por unos 700 empleados directos y 300 indirectos —que trabajan en la misma fábrica—. Asimismo, la compañía prevé ampliar las instalaciones. Lo podrá hacer en los mismos terrenos donde están ubicados, que compró a Inbisa en 2015. Concretamente, la superficie total de la fábrica es de 360.000 metros cuadrados y solo 65.000 están construidos. También se tendrá que adaptar la fábrica a la nueva producción, con nuevos talleres de soldadura, cabinas de pintura, naves y vías de pruebas dinámicas, además de construir un nuevo centro de realidad virtual.
La adjudicación de Renfe de 152 trenes supone una garantía de carga de trabajo para los próximos cinco años en Santa Perpètua, acompañada con este ambicioso plan de crecimiento e inversión en la fábrica. Alstom remarca que este contrato es una gran oportunidad para posicionar a la planta y el grupo, teniendo en cuenta de que se trata de trenes de gran capacidad, unos de los principales reclamos del mercado. Estos tipos de vehículos están pensados para grandes ciudades y tienen que permitir mover muchos usuarios con tiempos de parada cortos. Ahora mismo, la fábrica vallesana ya está produciendo unidades con estas características para servicios regionales de Luxemburgo.
Donde se destinarán y cómo serán los 211 nuevos trenes de Alstom y Stadler
Renfe prevé destinar los 211 nuevos trenes fabricados por Alstom y Stadler a los grandes núcleos de Cercanías en España. Esto puede incluir el servicio de Rodalies, pero está supeditado a la firma del contrato programa entre la Generalitat, que es la titular del servicio, y Renfe, que es quien lo opera. Según el nuevo Plan de Rodalies, presentado en diciembre y elaborado por el exconseller Pere Macías, si se firma el contrato programa, se prevé la incorporación de 56 nuevos trenes antes del 2025.
Las nuevas unidades tendrán una capacidad de al menos 900 plazas cada una de ellas, un 20% más que los actuales trenes Civia, fabricados por la vasca CAF. Se minimizará el tiempo de bajada y subida de viajeros, mediante un diseño con un mínimo de diez puertas y amplios vestíbulos. Todos los vagones serán accesibles para las personas con movilidad reducida y dispondrán de conexión wifi y zonas para dejar las bicicletas y los carritos infantiles.
Los trenes que fabricarán Alstom y Stadler tendrán capacidad para 900 pasajeros y dispondrán de conexión wifi y zonas para dejar las bicicletas y los carritos infantiles
El contrato forma parte del Plan de Renovación de flota puesto en marcha por Renfe en 2019, que supondrá la renovación del 50% de los trenes de Cercanías y Regionales. El operador quiere mejorar la fiabilidad del servicio y reducir las incidencias, aumentar la eficiencia energética, cumplir con las obligaciones de accesibilidad, e incrementar la seguridad del sistema ferroviario. También pretende reducir la edad mediana del parque, sobre todo de Cercanías y Regionales, que cuentan con algunos trenes que llegan a superar los 30 años de antigüedad.
El Plan de Renovación de flota llega después de que no se licitara ninguna compra de trenes nuevos desde el año 2007. Ahora, Renfe prevé licitar más de 3.500 millones de euros en la adquisición de material rodante, generando alrededor de 52.000 nuevas ocupaciones, con la voluntad de reactivar la economía. La primera de estas adquisiciones fue ganada por CAF, para el suministro de 31 trenes de ancho métrico y seis trenes alpinos, por un importe de 258 millones de euros. En los próximos meses, Renfe tiene previsto adjudicar contratos para la adquisición de 43 trenes de Media distancia y 38 trenes de Cercanías, que irán a parar a diferentes comunidades autónomas.