Charlotte Perriand sobre la 'chaise longue' basculante
Charlotte Perriand sobre la 'chaise longue' basculante 'Le Corbusier' ©VG Bild-Kunst

Las mujeres del mundo del diseño pisan fuerte en Barcelona

La primera exposición de la temporada del DHub marca el camino en su apuesta hacia el diseño femenino

La nueva temporada del Disseny Hub Barcelona viene marcada por su apuesta por la reivindicación de las mujeres en su propuesta expositiva. Prueba de ello es la primera muestra de la temporada, Som aquí! Les dones en el disseny. 1900 – avui, una exposición que recupera y reivindica el papel de las mujeres diseñadoras desde el siglo pasado, con el objetivo de reescribir las historias oficiales de estas disciplinas en España.

Producida por el Vitra Design Museum de Weil am Rhein (Alemania) y ampliada por el DHub, pretende ser una muestra poco convencional e innovadora, que mezcla grandes nombres del diseño con otras propuestas menos conocidas, pasando por grupos y figuras de activistas sociales, y la huella que dejaron y siguen dejando aún a su paso, a pesar de, en muchos casos, haber estado en la sombra.

Construida a partir de objetos creados por mujeres en diferentes ámbitos del diseño —muebles, iluminación, diseño gráfico, joyería o cerámica—, conforma un estudio crítico sobre los éxitos y las condiciones de trabajo de las mujeres que se han dedicado al mundo del diseño desde el principio del movimiento moderno hasta la actualidad.

El DHub ofrece una muestra que recupera y reivindica el papel de las mujeres diseñadoras desde el siglo pasado

Lo más atractivo de esta muestra es el proyecto de investigación que han llevado a cabo las comisarias y miembros del equipo de Colecciones del Museo, Teresa Bastardes, Isabel Cendoya e Isabel Fernández del Moral. Se ha centrado en analizar las particularidades sociales y políticas de España durante el siglo XX, marcadas por la Guerra Civil y la dictadura —que supusieron la represión del papel de la mujer, así como una quiebra con la modernidad— y su reactivación durante la década de los 80 que, igualmente, quedó invisibilizada.

Durante la investigación, que supuso revisar en profundidad el fondo de la colección del museo, salieron a la luz nombres de muchas diseñadoras: unas, escondidas detrás de un equipo preeminentemente masculino o detrás de sus maridos; otras que, a pesar de haber estado trabajando durante décadas, lo habían hecho desde la discreción, y las más afortunadas, mujeres reconocidas y a las que no se les había prestado la atención suficiente.

Como suele pasar en los entornos femeninos, acercarse a esas diseñadoras y entrevistarse con ellas ha servido a las comisarias para llegar a otras diseñadoras y para localizar piezas que no pertenecían a la colección del museo. En este sentido, la investigación ha servido también para incrementar el patrimonio del fondo de este centro cultural de la ciudad, que seguro llevará consigo la producción de nuevas exposiciones tan atractivas como esta.

Durante la investigación, que supuso revisar en profundidad el fondo de la colección del museo, salieron a la luz nombres de gran cantidad de diseñadoras

Articulada en seis ámbitos, la exposición transita desde 1900 hasta nuestros días, en un recorrido cronológico que pone en contexto los diseños de estas mujeres, su evolución y su aplicación práctica, así como la relación con el entorno masculino y su influencia. Desde el origen de las banderas y las insignias sufragistas, pasando por el éxito de la comercialización de tupperware, hasta diseñadoras y arquitectas de reconocida fama mundial como Neri Oxman o Patricia Urquiola.

Serie de cristal Bölgeblick de Aino Aalto
Serie de cristal Bölgeblick de Aino Aalto. ©Vitra Design Museum; Andreas Sütterlin

Pero si merece la pena invertir un buen espacio de tiempo en nuestra visita, es en los ámbitos que más cerca nos quedan, como el que se centra en la investigación del Museu del Disseny y la historia de las 56 diseñadoras de nuestro país, con perfiles profesionales muy diferentes entre si, que fueron parte activa del cambio social. Tal es la voluntad del museo, que pretende mantener activa la investigación para reconocer a todas esas pioneras.

Aún así, hay un bloque imprescindible y de obligado tránsito que, bajo mi humilde punto de vista, justifica toda la muestra, y es el dedicado a cosas de mujeres, cosas de todo el mundo, como han querido llamarlo. En él, se analiza si el diseño está contribuyendo lo suficiente para incluir a la mujer como sujeto de sus creaciones, aportando soluciones a las necesidades femeninas, a través de una treintena de proyectos que, ya sea desde el arte o el diseño, reivindican realidades vinculadas específicamente a las mujeres y que, a menudo, también son temas considerados tabús, ocultos o banalizados.

Obra de Karine Pascual y Carmen Vargas
La obra ‘Coños’ de Karine Pascual en cerámica y Carmen Vargas en pintura.

El resultado final de este proyecto de investigación no es la exposición como tal, sino que la muestra constituye solo el inicio de la misma investigación en este ámbito. Ha empezado por la visibilización de aquellas pioneras que abrieron camino a las diseñadoras actuales, así como por darles voz y un merecido espacio en la historia del diseño, además de dar visibilidad a temas que afectan directamente las mujeres, de manera que se las tenga en cuenta.

La muestra, que podrá verse en el DHub hasta el 7 de enero de 2024, cuenta además con una serie de actividades paralelas para todos los públicos que se llevarán a cabo entre octubre y diciembre, como charlas, coloquios, conferencias, jornadas de trabajo, actividades familiares y un podcast, además de una wikimaratón, un proyecto de investigación y un proyecto comunitario.