En el tiempo de descuento, la librería Alibri, la antigua Herder, ha salvado el partido. A principios de octubre, anunció su cierre y muchos lamentaron la pérdida de un establecimiento que estaba a punto de llegar a su centenario y se había convertido en una parada obligatoria para los bibliófilos locales. Entre los afectados, se encontraban los fundadores de Bookish, una plataforma de subscripción como Netflix o Spotify pero con el foco puesto en las novedades literarias. “Es una librería histórica de Barcelona y nos entristeció la noticia”, cuenta Tomàs Casals, director de Bookish, en declaraciones a The New Barcelona Post.
Desde hacía tiempo, Bookish, centrada en el mundo digital, tenía planes de abrir una librería en Barcelona, su ciudad natal, con el objetivo de complementar la experiencia que ofrece a sus usuarios, que reciben cada mes un libro sorpresa, acompañado con guías de lectura y actividades online como clubs de lectura o encuentros con el autor, incluso algún detalle extra, como una tote o un cojín para leer en la playa. La plataforma estaba buscando ubicaciones cuando se anunció el cierre de Alibri. La conocían y empezaron a valorar si tenía sentido materializar ahí su proyecto.
La primera reunión con la propiedad, la editorial alemana Herder, llegó a principios de noviembre. En poco más de un mes, las dos partes se han conocido y han cerrado un acuerdo, superando la fecha de cierre anunciada, prevista para el pasado lunes 5 de diciembre. Este viernes, firmaron la compra, por un importe que no ha trascendido y convirtiendo a Bookish en el nuevo y único propietario de la librería. La operación incluye el mantenimiento de toda la plantilla, formada por unos 26 trabajadores, así como su fondo.
La nueva etapa de Alibri, a dos años de cumplir 100, será una simbiosis con la plataforma, una potenciará su digitalización y la otra su presencialidad, sin olvidar que ambas hacen “un trabajo similar: recomendar libros”, remarca Casals. Con todo, a partir de ahora, los suscriptores de Bookish tendrán un espacio en el que encontrar más novedades literarias o asistir en persona a actividades que hasta ahora se hacían exclusivamente online.
Para conseguirlo, se harán obras para actualizar la librería, “sin perder la esencia”, pero modernizando un espacio que se había quedado un poco atrás. “Queremos crear la mejor librería de gran formato en Barcelona, un gran centro cultural, pero también un negocio sostenible y rentable”, remarca Casals.
“Duraréis cuatro días”
Cuando los fundadores de Bookish quisieron aplicar para los libros el modelo de subscripción que se utiliza para la música o las series, el sector editorial no les auguró nada bueno. “Todo el mundo nos dijo que íbamos a durar cuatro días”, recuerda su director, “pero ha pasado todo lo contrario”. Fundada en 2017, la plataforma permitió actualizar propuestas que habían dejado de funcionar, como la de Círculo de Lectores, que cerraría poco después.
El proyecto nació de la mano de Nam Nguyen y Tomàs Casals, dos emprendedores que ya habían probado el mercado con Tiching, una plataforma online que ofrece recursos para docentes y estudiantes en España y América Latina. Creada en 2009, fue adquirida por la editorial Vicens Vives en 2014.
Bookish es el segundo proyecto de los emprendedores Nam Nguyen y Tomàs Casals
De los malos augurios iniciales, Bookish ha ido creciendo año tras año, aún más con la pandemia, una crisis que ha beneficiado a sectores como el del libro, que cerró 2020 superando las ventas prepandémicas y vivió en 2021 su mejor año de la última década. Puesta en marcha con una inversión inicial de 25.000 euros, la startup ha recibido el apoyo del Institut Català de les Empreses Culturals (ICEC) y cerró una ronda de 160.000 euros en Dozen Investments. En febrero de este año, los inversores de Dozen vendieron sus participaciones en Bookish al grupo Tansley.
Actualmente, la plataforma cuenta con unos 5.000 suscriptores. El precio de la suscripción mensual se sitúa en 24,90 euros, con gastos de envío incluidos. Trabajan con las principales editoriales, grandes y pequeñas, entre ellas Literatura Random House, Alfaguara, Lumen, Libros del Asteroide, Anagrama, Blackie Books, Impedimenta, Sexto Piso, Errata Naturae, Hoja de Lata y Gatopardo Ediciones. La plataforma escoge una novedad literaria cada mes y los usuarios pueden escoger entre diferentes modalidades, desde bestsellers y no ficción hasta narrativa independiente, pero el título que les llega es una sorpresa. Asimismo, se pueden dar de baja en cualquier momento y también pueden pausar la suscripción si se les acumulan las lecturas en la mesilla. De cara a 2023, Bookish prevé invertir en Alibri, la nueva pata del negocio, y seguir creciendo.