Dos años después de la compra del Corte Inglés de Portal de l’Àngel por parte de Redevco Iberian Ventures, ha llegado el momento. El gran almacén cierra definitivamente este sábado para reconvertirse en oficinas y nuevas tiendas. El antiguo Can Jorba tendrá así una nueva vida de uso mixto y comercial, con un proyecto de la joint venture entre Redevco y el grupo Ares que representa una inversión total estimada de cerca de 200 millones de euros, teniendo en cuenta la compra y la reforma del inmueble.
Con el proyecto, los 18.000 metros cuadrados del emblemático edificio se transformarán en una “ubicación privilegiada de uso mixto y altamente sostenible”, según los promotores, propietarios también de activos en capitales europeas, incluido el Mercado de San Miguel de Madrid. Las nueve plantas del inmueble dejarán atrás los artículos centrados sobre todo en moda deportiva, e iniciarán su reforma para posicionarse como edificio de oficinas de primera categoría. El sótano, la planta baja y el primer piso albergarán propuestas comerciales, y las oficinas se concentrarán en los niveles superiores.
En su proyecto para reconvertir el edificio en un inmueble comercial y de oficinas de clase A, los promotores apuestan por prácticas sostenibles y priorizarán materiales naturales elaborados por proveedores locales. Las terrazas del edificio incorporarán plantas locales, y la cubierta también contará con vegetación y zonas verdes, así como con paneles solares. Además, el edificio se marca como objetivo lograr un consumo de agua cero, con sistemas de reciclaje de aguas grises para el riego, recolección de agua de lluvia y restauración de sistemas de aguas naturales.
La transformación del edificio del Corte Inglés en oficinas y más espacio para el retail llega después de la reciente inauguración de otro de sus antiguos almacenes: el de Francesc Macià, que cerró en 2021 tras venderlo en 2019 por 151 millones de euros. El inmueble reabrió en marzo como Edificio Aura, con más de 14.000 metros cuadrados de oficinas de alta calidad. Pese a su venta, El Corte Inglés se ha resistido a abandonar esta ubicación en una de las zonas más prime de la capital catalana, y ha abierto un supermercado de 2.400 metros cuadrados a pie de calle.
La oferta comercial hasta ahora disponible en el gran almacén de Portal de l’Àngel se trasladará al de Plaza Catalunya. El edificio, a 200 metros de distancia, está inmerso en una reforma que reordenará su oferta comercial. En 2013, la compañía también se desprendió del edificio que tenía en el otro extremo de Plaza Catalunya, antigua ubicación del Banco Central ahora habitada por un gran Primark, la flagship store de la marca en la capital catalana.
Los promotores prevén incluir zonas verdes y paneles solares en la cubierta
El cierre de las puertas del almacén, que implicará la reubicación de más de un centenar de empleados, pondrá fin a una etapa como Corte Inglés de más de dos décadas, y representará su despedida de Portal de l’Àngel, posicionada como la segunda calle más cara de la capital catalana, por detrás de Paseo de Gràcia, y la tercera a nivel estatal, con la madrileña Serrano en segunda posición.
Pero no sólo eso: será la primera vez en la que el edificio dejará de ser en su totalidad un gran almacén en casi un siglo de historia. De Can Jorba, inaugurado en 1926, pasó a pertenecer a Galerías Preciados en los 60, antes de llegar a manos de su entonces principal competidor, El Corte Inglés, a mediados de los 90. Ahora, el edificio recibirá a los últimos clientes y registrará las últimas ventas como grandes almacenes, cerrando una etapa de 26 años y abriéndose a una nueva.