Método Acuarela Emocional
Mònica Planas, creadora del método Acuarela Emocional.

Pintar las emociones, nace un método terapéutico para bajar el ritmo y reconectar

Mònica Planas es ilustradora, diseñadora y creadora del método Acuarela Emocional. En 2007 le diagnosticaron una enfermedad cerebral y, a través de la acuarela, ha conseguido externalizar sus emociones y paliar algunos de los síntomas de la enfermedad.

En 2007, Mònica vio como su vida cambiaba por completo, le detectaron una Malformación Arteriovenosa (MAV) en la parte derecha del cerebro. Los síntomas derivados de esta malformación son varios pero, según dice, los que más la afectan son las convulsiones, la parálisis en la parte izquierda del cuerpo y las dificultades motrices.

Desde que empezó a notar los primeros síntomas, ahora hace 13 años, se ha quedado más de una vez en silla de ruedas, ha tenido que aprender a andar de nuevo y su vida nunca ha vuelto a ser igual. “Mi vida ha cambiado, pero no en un sentido negativo, es simplemente diferente. Me he tenido que adaptar a las exigencias que me pone el cuerpo, pero también me he redescubierto a mí misma”, dice Mònica.

Poco a poco aprendió a convivir con esta enfermedad, en un inicio decidió hacer actividades relajantes para frenar los síntomas, como yoga o reiki. A pesar de que esto funcionaba, las recaídas eran frecuentes. No fue hasta que frenó su ritmo de vida cuando notó una mejora sustancial en su día a día. “Hasta que no dejé de trabajar para multinacionales y reduje mi nivel de estrés no noté una mejora real. Al principio lo que hacía era reservarme un día a la semana para hacer yoga o algo parecido, pero seguía teniendo una vida estresante y, a pesar de que esto me ayudaba, no acababa de ir bien. Ahora voy al ritmo que mi cuerpo me pide”, comenta. Poco a poco, ha ido entendiendo cómo funciona esta enfermedad, y ha visto que lo más importante es estar en calma con uno mismo.

Hasta que no dejé de trabajar para multinacionales y reduje mi nivel de estrés no noté una mejora real

Desde que era pequeña siempre ha estado interesada en las artes creativas, su abuela pintaba con acuarela y ella siguió su ejemplo. Estudió diseño y trabajó en este sector hasta que decidió dejarlo para cuidar de sí misma. Pero su pasión siempre ha sido la acuarela. Ahora, más que una pasión, se ha convertido en un método que le ayuda a paliar los efectos de la enfermedad que sufre. “La acuarela es muy potente, porque al trabajar con agua va muy bien para dejar fluir las emociones”, dice Mònica.

Método Acuarela Emocional
La pandemia ha incrementado sensiblemente la demanda de terapias de apoyo psicológico.

Al principio pintaba por gusto, por pasión, pero vio que esta actividad le ayudaba a liberarse y a sentirse más tranquila y, consecuentemente, los síntomas se reducían. Las recaídas, según dice, ahora son mucho más suaves y siempre van acompañadas de momentos de más tensión en el día a día. Con sus conocimientos de diseño y acuarela y su experiencia a la hora de tratar con la parte emocional de la enfermedad, ha creado el Método Acuarela Emocional, con el fin de ayudar a todas aquellas personas que quieran aprender a expresar sus emociones y conectar con uno mismo. “Ahora que lanzaré el nuevo curso de Acuarela Emocional estoy más nerviosa y sí que noto algunos síntomas, a pesar de que son leves”, apunta.

En las sesiones que ofrece, Mònica enseña a dejar fluir las emociones y a pintar sin ningún tipo de limitación. Cómo ella misma explica, “la acuarela va muy bien porque al pintar sin seguir ningún patrón ni dibujo previo puedes hacer lo que te salga de dentro, esto es muy importante y es lo que trato de enseñar en el curso, a soltarse y a no ponerse ninguna barrera“.

Método Acuarela Emocional
El método de Mónica ayuda a dejar fluir las emociones a través de la pintura.

Mediante este curso de acuarela emocional, Mònica quiere ayudar a todos los que necesiten aprender a externalizar las emociones. “A veces nos cuesta mucho sacar aquello que sentimos, todas las emociones son correctas y no tenemos que sentir miedo a externalizarlas, a mí la acuarela me ha ayudado en este aspecto y ahora quiero ayudar a más personas. Hay emociones, como el miedo, que están mal vistas, pero todas son normales y no podemos hacer como si no estuvieran”, comenta.

Hace tiempo que da clases de acuarela, en su casa para grupos reducidos o en espacios más grandes para grupos más amplios. Pero no ha sido hasta ahora que se ha decidido a lanzar el curso oficialmente. La experiencia que ha ido adquiriendo y los buenos resultados que ha notado en las diferentes alumnas que ha tenido le han motivado a dar este paso. “Hasta ahora nunca me había atrevido a lanzar un curso oficialmente, pero muchísima gente me escribía por redes sociales pidiendo consejo o ayuda, y vi que era el momento adecuado para hacerlo”, afirma.

A veces nos cuesta mucho sacar aquello que sentimos, todas las emociones son correctas y no tenemos que sentir miedo a externalizarlas, a mí la acuarela me ha ayudado con esto y ahora quiero ayudar a más personas

El lanzamiento del curso este febrero se ha avanzado unos días debido a la gran cantidad de gente que busca ayuda. La crisis social y económica que acompaña la pandemia de la Covid está dejando secuelas psicológicas graves, y muchas personas está buscando nuevas vías para relajarse e intentar sentirse mejor. En este contexto, en últimos meses Mònica ha recibido una enorme cantidad de mensajes y, finalmente, ha decidido que lo mejor que podía hacer era poner en marcha el curso lo antes posible.