Las entidades que luchan contra la pobreza y trabajan para paliar las situaciones de exclusión social en Catalunya se encuentran desbordadas y alertan del empeoramiento de la crisis social este otoño. “Son tiempos de gran dureza social. Con una inflación desbocada y un continuo incremento de los costes energéticos, nos enfrentamos a una situación insostenible para miles de hogares“. Así de contundente se expresa la presidenta de la Mesa de entidades del Tercer Sector Social, Francina Alsina, quien advierte “de un endurecimiento” de esta situación que supondrá que en los próximos meses “se incorporen nuevas personas a la bolsa de pobreza y exclusión social en Catalunya”.
Según Alsina, actualmente, uno de cada cuatro catalanes, el 26% de la población, se encuentra ya en una situación de pobreza y exclusión, según el Idescat. Este colectivo se ve “golpeado especialmente” por esta crisis inflacionaria y energética, que se suma a las consecuencias provocadas por la pandemia. “Durante los dos años de la covid, el 30% de las personas que pidieron ayuda a las entidades sociales nunca lo habían hecho antes. Vemos cómo la población se empobrece a marchas forzadas”, constata.
Este incremento de la demanda, sumada al encadenamiento de crisis, ha puesto al límite a las entidades sociales, que se enfrentan a una disminución de sus ingresos y a un incremento de los gastos que las coloca en una situación financiera muy difícil . Ante esta realidad, la Fundación Bancaria La Caixa, ha decidido incrementar las ayudas directas que cada año concede a las entidades sociales de Catalunya para financiar sus programas de actuación y contribuir así a hacer frente a ese esfuerzo extraordinario que están llevando a término en estas sucesivas crisis.
“Queremos estar más cerca que nunca de las entidades y personas en situación de vulnerabilidad e impulsar el máximo de proyectos que impacten en quienes más lo necesitan”, explica Marc Simón, subdirector general de la Fundación La Caixa. Según Simón, una de las personas más apreciadas dentro del Tercer Sector por su sensibilidad y proximidad, La Caixa quiere ser “un aliado estratégico natural” para ayudar a hacer frente a este sobreesfuerzo y por eso este año “se intensificará la colaboración con el tercer sector, ampliando la dotación y facilitando el acceso a las ayudas”.
Concretamente, la Convocatoria del Programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales en Catalunya aumentará su dotación un 42%, con un total de 10,5 millones de euros. El objetivo es llegar a más entidades y a más personas beneficiarias. En 2021 se destinaron un total de 7,4 millones, repartidos entre 292 proyectos que beneficiaron a 110.131 personas. En total, entre 1999 y 2021, este programa de la Fundación La Caixa ha permitido impulsar 4.370 proyectos liderados por las entidades sociales catalanas, con una aportación acumulada de 94 millones de euros y 888.672 personas atendidas. En el conjunto de España, la inversión efectuada durante este período ha sido de 383 millones, con 19.000 proyectos y 8,7 millones de beneficiarios.
Debe tenerse en cuenta que esta línea de ayudas es complementaria a los programas propios que lleva a cabo la Fundación La Caixa y que ejecuta también a través de múltiples entidades sociales. Así, si se suma el Programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales a las líneas de actuación propias (como el programa Incorpora, CaixaProinfancia o el dedicado a las personas mayores) la cantidad total que La Caixa destinará este año a las entidades sociales en Catalunya supera los 50 millones de euros, según Simón.
Simplificación del procedimiento de solicitud
Los proyectos para recibir ayudas deben presentarse del 4 al 27 de octubre. Como novedad, se simplifica el formulario de presentación para facilitar la participación de las entidades y se pueden presentar también proyectos que ya hayan recibido ayudas en anteriores convocatorias siempre que pueda justificarse, como mínimo, la ejecución del 50% de las cantidades recibidas con anterioridad.
También se incrementan los importes máximos que pueden solicitarse: la cifra crece de 40.000 a 50.000 euros en la modalidad más básica, mientras que por proyectos de mayor envergadura se pueden pedir ayudas a partir de 50.000 euros y hasta 100.000 euros. La Caixa priorizará los programas que estén vinculados a seis líneas de acción: personas mayores y retos derivados del envejecimiento; personas con discapacidad o trastorno mental; humanización de la salud; lucha contra la pobreza y la exclusión social; inserción sociolaboral; e interculturalidad y acción social.
Mediante el hólding inversor Criteria, la Fundación Bancaria La Caixa, presidida por Isidro Fainé, es propietaria del 30% de CaixaBank y del 26,71% de Naturgy, entre otras muchas participaciones que le generan unos dividendos económicos que permiten financiar su presupuesto anual más de 500 millones de euros destinado a sus programas sociales, culturales, científicos y de investigación y salud.
