Obras
Operarios trabajando en unas obras. ©ACN

La Cambra confía en que 2024 acelere la ejecución de inversiones de los Next Generation

La corporación prevé que la inversión sea motor de la economía catalana y que aumente un 2% este año, después de un 2023 en el que se han incrementado las licitaciones de obra pública, ahora pendientes de ejecución

La Cambra de Comerç de Barcelona augura para este año un aumento de la inversión del 2% a nivel catalán, teniendo en cuenta tanto la inversión en el ámbito de la construcción como la productiva. Lo prevé después de un 2023 que ha registrado un aumento de la licitación de obra pública, en parte vinculada a los fondos europeos Next Generation. Así, la Cambra confía en que 2024 sea el año en el que más se perciba el impacto de estos fondos en Catalunya. 

“Esperamos que este sea el año en el que se acelere esta ejecución”, ha proclamado el presidente de la Cambra, Josep Santacreu. El organismo prevé este aumento del 2% de la inversión después de un 2023 en el que se incrementó en un 0,7%, en una situación marcada por el endurecimiento de las condiciones de financiación. En un informe sobre la coyuntura económica catalana, la Cambra concluye que la inversión se ha estancado en el ámbito de la construcción, mientras que se ha reducido la inversión productiva por el aumento de los tipos de interés. 

Esta inversión productiva engloba aspectos que aumentan la productividad de las empresas, ya sean elementos como maquinaria y equipamiento como también intangibles, como la propiedad intelectual. El organismo también recalca que la inversión productiva por persona ocupada, que va ligada al PIB por ciudadano empleado, avanza en Catalunya a menor ritmo que en otros países europeos. “Y hay que revertir esta dinámica”, ha sentenciado el presidente de la Cambra. 

La entidad sitúa la inversión como motor para el crecimiento económico de Catalunya en 2024, que prevé que sea del 1,8%

“Los fondos Next Generation son una oportunidad para hacerlo”, ha añadido, y ha resaltado que existe un desajuste temporal entre la movilización de estos fondos y su ejecución. Así lo refleja el aumento de las licitaciones públicas, que han pasado de 3.142 millones de euros en 2022 a 3.896 millones en 2023, teniendo en cuenta tanto inversión en edificación como en obra civil. 

En este contexto, la movilización de los Next Generation a través del mecanismo estatal de Recuperación y Resiliencia “no ha acelerado todavía la inversión en Catalunya”, según el director del Gabinete de Estudios de la Cambra, Joan Ramon Rovira. ¿Por qué motivo? O bien por el desajuste temporal entre la movilización de fondos y la ejecución, o bien porque estos fondos han sustituido inversiones que empresas ya tenían previsto realizar, o porque se han utilizado para compensar el impacto de los tipos de interés, ha detallado Rovira, que ha confiado que este año se haga palpable el impacto de estos fondos europeos. 

El incremento del 2% de la inversión en Catalunya que augura la Cambra se engloba en la previsión de la corporación que pronostica un crecimiento de la economía catalana del 1,8% en 2024. El organismo augura que será un año que empezará con el decrecimiento de indicadores económicos y que luego remontarán, a medida que cambien los tipos de interés y en función de la situación geopolítica. Como motores de este crecimiento del 1,8% para 2024, el informe de la Cambra sitúa precisamente la inversión pública, junto al consumo privado.

También el ámbito de las exportaciones será tractor de la economía catalana este año; aumentarán un 3% respecto a 2023, pese a que lo hace en un contexto de moderación de su crecimiento. El turismo es también un sector con “el viento a favor”, y en el cuarto trimestre del 2023 logró recuperar una variable más de la prepandemia: las pernoctaciones de turistas extranjeros se situaron ya por encima de las de 2019, algo que ya ocurría previamente con los visitantes domésticos, según Rovira.  

Josep Santacreu
El presidente de la Cambra de Barcelona, Josep Santacreu, presentando los resultados del informe.

El director del Gabinete de Estudios ha garantizado que, a medida que afloje la inflación, la economía evolucionará en positivo. Sin embargo, existen riesgos, reflejados por datos como el incremento del precio de alimentos y del transporte de contenedores marítimos, por la crisis en el Mar Rojo. Santacreu ha incluido la sequía como uno de los elementos que condicionarán esta inflación, y ha llamado a promover medidas estructurales y multifactoriales para garantizar el suministro de agua potable en el futuro: “Se ha actuado a golpe de sequía y, cuando ha pasado, lo hemos vuelto a despriorizar”. 

En este sentido, Santacreu ha avanzado que la Cambra ha creado un grupo de trabajo sobre la sequía. El presidente del organismo, que asumió el cargo en octubre, ha explicado que la entidad ha modificado las conocidas como sillas de plata, que dan entrada a empresas al pleno de la corporación a cambio de una aportación económica. El equipo de su predecesora, Mònica Roca, las modificó para pasar de 14 escaños por 75.000 euros a dos por 125.000, que están sin ocupar. Ahora, la junta de Santacreu ha reducido de nuevo la cuantía a 75.000, aunque mantiene los dos únicos asientos, por imposibilidad de ampliarlos hasta que pasen cuatro años respecto a la anterior decisión. La Cambra abrió en diciembre una convocatoria para ocupar estos dos asientos, para la que no recibió candidaturas. Ahora, pedirá a la Generalitat reabrir este proceso, en el que hay empresas interesadas, según Santacreu. 

La Cambra calcula que el impuesto del 15% a multinacionales implicará 475 millones extra para Catalunya y plantea destinarlos a inversión

El presidente de la Cambra ha valorado también el tipo mínimo del 15% en el impuesto de sociedades para grandes multinacionales, que “pretende poner fin a la competición fiscal a la baja, injusta y peligrosa entre países que buscan atraer inversiones y empresas con un tratamiento fiscal que no corresponde”. Santacreu, que ha recordado que se trata de una disposición europea que debe adaptarse en España, ha sostenido que esta medida fiscal representará para Catalunya 475 millones de euros, que propone destinar a reducir determinados impuestos o, precisamente, a incrementar las inversiones que se lleven a cabo en Catalunya.