Galderma
El consejero delegado de Galderma, Flemming Ørnskov.

La multinacional dermatológica Galderma crecerá hasta los 150 trabajadores en Barcelona

La farmacéutica suiza, propietaria de marcas como Cetaphil y Epiduo, se ha instalado en la Avenida Diagonal, con unas oficinas de 1.500 metros cuadrados

La multinacional suiza Galderma se refuerza en Barcelona. La empresa, dedicada a productos prémium de estética inyectable, dermocosmética y dermatología terapéutica, ubicó su primer centro de capitación global en la ciudad a principios de 2023. Inmersa en una ambiciosa etapa de crecimiento, la farmacéutica se ha instalado en la capital catalana para dar apoyo a los equipos globales de áreas como la investigación y el desarrollo (I+D), la comercial, las finanzas, los recursos humanos, las TIC, la legal o la cadena de suministro, con el objetivo de ejecutar sus planes de expansión internacional.

Empezaron con una plantilla muy reducida en Barcelona, de tan solo cuatro trabajadores, y a finales de su primer ejercicio en la ciudad habían llegado a los 70. Un año y medio después, el equipo ya se sitúa en los más de 110 empleados, con la previsión de crecer hasta los 150 de cara a diciembre. Actualmente, la mitad de la plantilla son locales, con la presencia de trabajadores provenientes de 22 países en la otra mitad.

Ya asentada en Barcelona, la farmacéutica propietaria de marcas como Cetaphil y Epiduo acaba de inaugurar sus nuevas oficinas. Están ubicadas en el edificio que Colonial tiene en el número 532 de la Avenida Diagonal, donde ocupa 1.500 metros cuadrados repartidos en dos plantas. La inversión para poner en marcha el nuevo centro no se ha comunicado.

“Este es un hito gigante para nosotros”, ha remarcado su consejero delegado de Galderma, Flemming Ørnskov, acompañado por el responsable del centro, Raphael Camargo. Barcelona fue escogida entre cuatro ciudades europeas más, según ha indicado Ørnskov, quien se acercó a compañías locales como Puig o multinacionales que han abierto centros mundiales aquí como AstraZeneca. Según Acció, quien asesoró a la farmacéutica en su aterrizaje, hay más de 9.200 multinacionales en Catalunya.

A favor de Barcelona, jugó, sobre todo, la disponibilidad de talento y de centros educativos de alto nivel, pero también el clima y sus playas, ha reconocido Ørnskov, sin dejar de hacer menciones constantes a los diferentes equipos de futbol de la zona. Eran factores importantes para contratar a nuevos empleados, pero también para recolocar a plantilla actual en un lugar que fuera atractivo. “Esta es una ubicación estratégica. No solo ha sido la decisión correcta, sino que ha sido la mejor”, ha defendido.

Fundada en 1981, Galderma se creó como una joint venture entre L’Oréal y Nestlé. En 2014, cuando nació Nestlé Skin Health, la empresa se convirtió en subsidiaria de propiedad total de Nestlé. Cinco años después, fue adquirida por un consorcio de inversores institucionales liderado por el fondo sueco EQT. Desde el pasado marzo, la farmacéutica cotiza en el SIX Swiss Exchange de Suiza.

Con sede central en Zug, la multinacional cuenta con una plantilla de más de 6.500 profesionales. Está presente en 100 países, con fábricas en Canadá, Suecia, Francia y Brasil, desde donde se producen más de 300 millones de unidades anualmente. El consejero delegado de Galderma no descarta abrir centros de producción en España, donde también tiene oficinas en Madrid, con un centenar de trabajadores. En India tienen un centro global centrado en funciones financieras y de recursos humanos. Su cartera de líneas cuenta con marcas como Differin, Epiduo, Loceryl, Sculptra o Restylane. Tratan enfermedades como el acné, la rosácea o la queratosis.