Interior del Parking Pizza Marimon.
Interior del Parking Pizza en el Passatge Marimon. © Lekuonastudio

Los dueños de Parking Pizza se apuntan al entrecot para compartir

Corren tiempos veganos, pero el matrimonio de Marcos Armenteras y Berta Bernat se ha atrevido a abrir Sótano Parking, un steak bar donde sólo se sirve una pieza de entrecot de 500 gramos para dos personas a 35 euros. Los dueños de Parking Pizza y Parking Pita han inaugurado un tercer local en el Passatge de Marimon que combina en la planta superior un Parking Pizza, el tercero después de los que tienen en la calle Londres y en el Passeig Sant Joan, con el steak bar.

Si hacemos un recorrido por sus diferentes restaurantes vemos que todos tienen en común un sello de austeridad y elegancia. Cada proyecto empieza cuando encuentran un espacio que les enamora. El local es el motor. En colaboración con Lekuonastudio y el arquitecto Antonio Spalletta han revolucionado la fórmula de los restaurantes de toda la vida.

Marcos Armenteras tiene muy clara la filosofía de sus “párkings”: “El restaurante puro y duro ya no es lo que era. A nosotros nos gustan los conceptos. Abrimos todos los días y no se puede reservar. El take away y delivery nos funcionan muy bien. Hoy en día la gente ya ha espabilado y no tiene problemas en encargar la comida a domicilio”.  Saben a lo que se dedican. Berta Bernat estudió hostelería en Sitges y Marcos lleva treinta años en restauración: “Nos conocimos en el sector”.

Todos los locales son de alquiler.  Su primera aventura fue en noviembre de 2015 en la calle Londres: “Estuvimos dos años cogiendo ideas y nos lanzamos a un local muy pequeño. Queríamos huir de restaurante y abrimos un bar de pizzas. Vimos que había un vacío en el tema pizzerías. Abrimos un sitio simpático con una carta reducida”.

Un lustro después creen que la oferta está en plena transformación: “Desde que abrimos Londres ha cambiado mucho el panorama de la restauración en Barcelona. Ahora hay más gente que hace cosas así”. El siguiente paso fue en el Passeig Sant Joan, donde reconvirtieron un párking privado de coches en el lugar más cool del paseo. “Cuando entramos había veinte coches, pero nos dimos cuenta de que tenía muchas posibilidades”.

Párking suena cien por cien a coche. ¿Por qué decidieron bautizarlo así? “Cuando entramos en el local de la calle Londres parecía un garaje y le llamamos párking porque no nos gustaba la palabra garaje”.

Las inversiones han ido en aumento. “En Londres invertimos 250.000 euros; en Passeig Sant Joan, 750.000 euros, y en el Passatge Marimon, 800.000 euros”. La pandemia ha sido un batacazo para todo el sector, pero creen que están subsistiendo “mejor que otros”.

Público objetivo

“Por ejemplo, el público del Passeig Sant Joan es mayoritariamente gente joven, pero depende del día de la semana va variando. En la pandemia mucha gente mayor se hartó de cocinar en casa y nos encargó la comida”, añade Marcos, que conoce muy bien el gusto de los barceloneses.

Cocineros en el interior del Parking Pizza
Foto de archivo de cocineros en el interior del Parking Pizza de Passeig Sant Joan. © Lekuonastudio.

Empezaron con las pizzas porque vieron que había un vacío. “La mayoría de pizzerías eran muy poco apetecibles y decidimos abrir un bar de pizzas simpático con una carta reducida. Nos ayudó una persona que sabía mucho de pizzas; sabíamos lo que queríamos. Ofrecemos calidad. Lo primero era elegir una buena masa e ingredientes”. ¿Alguna pizza que triunfe? “La de butifarra con brócoli y queso, la de trufa y la margarita…”. Los hornos que tienen en sus párkings son espectaculares y siempre ocupan un lugar privilegiado. No son partidarios de barras, pero sí de mesas largas para compartir.

Las pizzas que triunfan en Parking Pizza son las de butifarra con brócoli y queso, la de trufa y la margarita

El entrecot es un paso más en su modelo de negocio que abre la oportunidad de comer una carne de calidad a buen precio. “Hemos elegido una fórmula de compartir una pieza cortada y servida con diferentes acompañamientos bien trabajados: cebolla frita, patatas fritas, espinacas con crema, zanahoria asada, ensalada o huevos con parmentier y trufa”. Bajamos al sótano a ver cómo se cocinan las carnes a la parrilla: “La carne está siempre en su punto, la jefa de cocina Gloria Márquez controla que esta carne de lomo bajo que viene de Alemania llegue a la mesa con todo su sabor”.

Abrieron Sótano Parking hace pocos meses y todavía no pueden hacer una valoración. Ellos diseñan las cartas, las recetas son suyas y no pasan por alto ni un detalle de sus locales monoconcepto. Si queremos descubrir su mimada decoración y su carta antes de acudir a algunos de sus comedores podemos espiar su día a día gracias a su impecable Instagram. ¡Ojo! Acaban de colgar una foto de un Sticky Toffee delicioso.

Mesa en el Parking Pizza del Passatge Marimon
Mesa en el Parking Pizza del Passatge Marimon. © Lekuonastudio