En 2016 Codorníu culminó un ambicioso proyecto para demostrar que las grandes empresas también podían elaborar los mejores cavas del mercado. Los entonces líderes de la compañía, Mar Raventós y Javier Pagés, eligieron una galería de arte barcelonesa para presentar Ars Collecta, una colección de cavas premium firmados por el enólogo Bruno Colomer, quien cinco años después sigue al frente de una iniciativa que ha contribuido a revalorizar al sector del cava y a nutrir la categoría de los Cavas de Paraje Calificado, considerados como el top de gama del sector.
Ars Collecta nació como una colección de cinco cavas que se elaboran de forma artesanal en el Celler Jaume, unas instalaciones preparadas para hacer pequeñas producciones y que Codorníu habilitó dentro de su complejo productivo de Sant Sadurní d’Anoia, que incluye la histórica masía de la familia Raventós y los edificios modernistas obra de Josep Puig i Cadafalch.
De los cinco espumosos Ars Collecta, cuatro eran nuevos y uno ya era un clásico de la casa, el cava Jaume de Codorníu, que en aquel momento era el de más alta calidad de la bodega. De los otros cuatro, había tres monovarietales procedentes de las mejores viñas de tres zonas geográficas y climáticas bien diferenciadas dentro de la región cava en Catalunya. La Fideuera (100% Xarel·lo del Penedès), El Tros Nou (100% Pinot Noir procedente de la Serra de Prades-Conca de Barberà) y La Pleta (100% Chardonnay del Segrià-Costers de Segre).
Esta colección inicial Ars Collecta se completaba con el Ars Collecta 456, fruto de la suma, es decir, del coupage de las tres uvas utilizadas para la elaboración de los cavas La Fideura, La Pleta y El Tros Nou. Con el nombre de 456 se quería rendir homenaje al número de vendimias realizadas por Codorníu a lo largo de su larga historia. Aquel 456 era fruto de la vendimia de 2007. Al cabo de dos años, Codorníu sacó al mercado el Ars Collecta 457, de la añada 2008.
Ahora, la marca propiedad del fondo de inversión estadounidense Carlyle acaba de iniciar la comercilització del Ars Collecta 459, fruto de la vendimia de 2010, es decir con más de diez años de crianza. Según Codorníu, el 459 “es un cava excepcional” con una producción limitada de sólo 2.904 botellas que se venderán a un precio de 175 euros la unidad. “Nació como el cava más valioso de la historia y lo sigue siendo”, destaca la bodega. El gran reserva 459 contiene en un 10% de Xarel·lo de la finca La Fideura, un 45% de Chardonnay de La Pleta, y un 45% de Pinot Noir de la finca El Tros Nou.
Según Codorniu, desde 2016 las ventas de la colección Ars Collecta han crecido un 68%. Estos cavas han recibido 118 premios y reconocimientos a su calidad. En los últimos años la colección se ha ampliado también de cinco a ocho cavas, ya que ahora Ars Collecta también incluye un cava Blanc de Blancs, un Blanc de Noirs y el rosado Grand Rosé. Los tres monovarietales La Fideuera, El Tros Nou y La Pleta están certificados como Cavas de Paraje Calificado al proceder de un paraje excepcional, de viñedos con más de diez años de antigüedad, vendimias manuales y fermentación mínima en botella de 36 meses. Cada botella se vende a 90 euros. Sólo hay 15 cavas que tienen esta categoría. El 459 no puede formar parte de este grupo al no proceder de un único paraje sino de tres.