Los consumidores españoles va tomando conciencia de la necesidad de preservar el planeta y se ha generado un cambio de mentalidad a raíz de la pandemia, pero son aún reacios a asumir los costes derivados de la mejora de la sostenibilidad. Esta tendencia se traslada al mercado en general y, en concreto, a las compras por Internet. Según el primer estudio Veepee-IESE sobre El futuro del ecommerce en España, sólo uno de cada tres (36%) compradores online está dispuesto a asumir el encarecimiento que acompaña a los productos sostenibles y al reparto de los mismos bajo criterios de respeto al medio ambiente.
Determina el citado informe que este tercio de consumidores predispuesto a pagar más, en ningún caso aceptaría incrementos superiores a un 30% sobre el valor original de los artículos comprados. Y se reduce a un 0,4% el porcentaje de los usuarios que se gastarían hasta un 50% de sobrecoste.
La problemática de los llamados costes verdes es una de las tendencias que se registran en el sector del ecommerce y que viene a determinar parte de la política comercial de las marcas. “Hay que asumir que la sostenibilidad al cien por cien es muy difícil de alcanzar y las empresas tienen que ser muy responsables y escrupulosas al usar este término”, ha manifestado el director general de Veepee en España, Albert Serrano, quien defiende que las marcas llevan a cabo iniciativas relacionadas con la reducción de la huella de carbono en pro de la sostenibilidad.
Serrano opina que los avances tecnológicos contribuirán en todos los sectores de la economía para reducir los impactos medioambientales al producir de forma distinta y más sostenible y reduciendo a la vez los costes derivados de ello.
El responsable de Veepee destaca también que el consumidor prioriza las plataformas multimarca, las entregas flexibles y los pagos simplificados a la hora de realizar sus compras por Internet y que es cada vez más exigente con la agilidad de la compra y la protección de sus datos. Según el estudio, un 62% de los usuarios muestra su preocupación sobre la seguridad de sus datos en la red.
Respecto a la compra en plataformas multimarca (marketplaces), la tendencia es a incrementarse porque el 80% de los clientes busca la mayor oferta y a un precio muy competitivo. “Por esta razón —explica Serrano— la rentabilidad de las marcas viene dada por un gran volumen de ventas o por una especialización como fórmulas para conseguir el margen comercial necesario”. Los encuestados también consideran importante poder comprar productos de diferentes categorías al mismo tiempo (49%), así como la facilidad para comparar (48%).
El consumidor prioriza las plataformas multimarca, las entregas flexibles y los pagos simplificados al realizar sus compras por Internet
En España, uno de cada cuatro consumidores digitales —independientemente de su edad— ya compra una vez a la semana y un 40% lo hace por lo menos una vez al mes. Este crecimiento y consolidación del ecommerce ha sido impulsado, en parte, por la pandemia, ya que seis de cada diez consumidores online confirman que han aumentado sus compras en el último año.
Durante la presentación del estudio, Íñigo Gallo, profesor de Dirección Comercial del IESE, ha explicado que “la edad de oro” de los consumidores online está en la franja de los 35 años a los 54 años, “porque son compradores con un nivel de poder adquisitivo alto y han incorporado la digitalización”. De hecho, el 75% de los usuarios utilizan el móvil para realizar sus compras, y un 48% el portátil. “Las adquisiciones de mayor valor se siguen realizando con dispositivos más grandes porque el usuario se siente más seguro”, ha concretado Albert Serrano.
A su vez, esta franja de edad más adulta es la que también utiliza Facebook como medio de información para sopesar sus preferencias de consumo, una red social de las más utilizadas por las marcas para la promoción de sus productos. En general, el consumidor español se deja guiar aún por los consejos de otros compradores, más que por las recomendaciones de, por ejemplo, los influencers.
Las condiciones de entrega de los pedidos también pesan en las decisiones de los compradores: la mitad no adquiere un producto si tiene costes de envío y un 40% abandona la compra antes del pago si el tiempo de entrega no está especificado. En este sentido, 1 de cada 5 consumidores online considera prioritario poder elegir la fecha de entrega y la franja horaria, mientras que 1 de cada 4 prefiere desplazarse a un punto físico para ahorrarse los costes, asegurar la entrega del pedido y ser más sostenibles.
La mitad de los compradores no adquiere un producto si tiene costes de envío y un 40% abandona la compra si el tiempo de entrega no está especificado
“Los milenials son los compradores más exigentes en cuanto a rapidez y economía de las entregas”, ha especificado Albert Serrano, pero admite que “esta tendencia podría variar en los próximos años porque al fin y al cabo lo que acaba valorándose más es la experiencia de compra en su conjunto”.
Así mismo, el 71% de los compradores online españoles quiere servicios de pago simplificados y, en su mayoría, siguen utilizando la tarjeta de crédito o débito como medio de pago. Mientras que los monederos digitales son la opción que utilizan especialmente los menores de 34 años y los compradores que adquieren productos y servicios online semanalmente.