Factorial se convirtió hace justo un año en un unicornio, es decir, en una startup valorada en más de 1.000 millones de euros. Alcanzó esta valoración tras cerrar una ronda de Serie C de 125 millones de euros, uniéndose a un selecto club al que ya pertenecían otras empresas emergentes nacidas en Barcelona como Glovo, Wallbox o Travelperk. Otro de sus méritos es que está considerada como una de las empresas de desarrollo de software de mayor crecimiento en Europa, ya que ha triplicado cada año su volumen de negocio desde que su plataforma para la gestión de los recursos humanos de las pymes empezó a despegar a finales de 2019.
Hoy, la compañía con sede en el Poblenou suma una plantilla de más de mil empleados, roza una cartera de 9.000 clientes y tiene presencia en nueve países. En este contexto de hipercrecimiento, Factorial acaba de cerrar su primera operación corporativa al adquirir la startup Fuell, con sede central en Madrid y oficinas en Las Palmas de Gran Canaria y Miami. Se trata también de una exitosa empresa que nació en plena pandemia y que permitirá a Factorial expandir su actividad hacia las herramientas de gestión de los gastos empresariales, redondeando así el paquete de servicios todo en uno que ofrecen a las pymes.
Fundada por Eduardo Ortiz de Lanzagorta y Edgar Álvarez, Fuell ha logrado crecimientos anuales de hasta el 250% gracias al apoyo de la aceleradora Y Combinator y de inversores como Fin Capital, FJ Labs y K Fund, un inversor que también es socio de Factorial. Fuell ha desarrollado una tecnología para la gestión de gastos que permite simplificar los trámites y ahorrar costes, ya que digitaliza los tickets y automatiza los informes o notas de gastos que deben presentar los empleados. Además, comercializa una solución para la gestión de presupuestos y simplifica los trámites relacionados con la recuperación del IVA de las facturas y de los gastos de representación. Otro de sus productos son las tarjetas de crédito corporativas.
“A través de esta adquisición estamos mucho más cerca de nuestro objetivo de convertir a Factorial en la plataforma todo en uno para la gestión de empresas, no solo trabajando nuestro producto con un equipo interno espectacular, sino también invirtiendo en soluciones únicas que ya han demostrado su viabilidad, demostrando la demanda que existe y su utilidad”, explica Jordi Romero, CEO y co-fundador de Factorial, junto a Bernat Farrero y Pau Ramon.
Según Factorial, se adquirirán todos los activos de Fuell, incluyendo la propiedad tecnológica, los clientes y el equipo. Los fundadores de la startup seguirán ejerciendo de consejeros tras la operación. “Estamos muy emocionados de ver que el viaje de Fuell sigue, uniendo fuerzas con el impresionante equipo de Factorial, mientras llega a nuevos escenarios, traspasando fronteras”, ha destacado Eduardo Ortiz de Lanzagorta, CEO y co-fundador de Fuell. “Nuestra visión —ha añadido— ha sido siempre revolucionar la gestión de gastos en las empresas. Con la experiencia y recursos de Factorial, este objetivo se conseguirá mucho más rápido”.
Según el unicornio barcelonés, esta operación es “un hito” que contribuirá a lograr el objetivo de transformar la gestión de los recursos humanos de las pequeñas y medianas empresas, es decir, todas las tareas relacionadas con las personas, desde la gestión de nóminas, a los gastos, pasando por el control de horarios, gestión de turnos, ausencias y procesos de reclutamiento. Se trata de un ámbito gigantesco, ya que hay millones de pymes en todo el mundo que todavía no se han digitalizado. El reto de Factorial es conseguir 500.000 usuarios nuevos de su software a nivel global en 2024. Además de en España, Factorial opera en Francia, Italia, Alemania, Reino Unido, Portugal, México, Brasil y Estados Unidos. La mitad de su millar de trabajadores están en su sede corporativa del distrito 22@ y el resto en las oficinas de Miami, Sao Paulo y Ciudad de México.
En función del paquete elegido, los clientes que utilizan el software as a service (SaaS) de Factorial pagan entre 5 y 10 euros por empleado.
La ronda de financiación cerrada hace un año estuvo liderada por Atomico y contó con la participación de GIC y todos los inversores anteriores de la compañía, incluyendo Tiger Global, CRV, K-Fund y Creandum.