El sandbox o banco de pruebas de proyectos financieros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) servirá para analizar la viabilidad de nuevos modelos de negocio y la utilización de la tecnología en la prestación de servicios financieros. Este espacio también permitirá regular la actividad de las nuevas empresas tecnológicas fintech.
Barcelona trabaja para impulsar un hub financiero en la Bolsa de Barcelona y es en este espacio donde la Generalitat quiere que se ubique el sandbox, edificio donde la CNMV ya tiene oficinas. Foment del Treball se ha sumado a esta petición, apoyando la propuesta de ERC en el Congreso. El grupo republicano ha presentado una proposición no de ley para que la cámara adopte las disposiciones necesarias para hacer que estos servicios estén en la capital catalana.
Entre los argumentos que se incluyen en la iniciativa parlamentaria, compartidos por la patronal, ERC defiende que Barcelona mantiene la cuarta posición como ciudad europea más atractiva para las empresas fintech, solo por detrás de Londres, Berlín y París. La capital catalana también ha conseguido captar un total de 182 millones de euros de capital riesgo para este sector en los últimos años.
“Barcelona tiene la capacidad y el potencial para crear un entorno propicio y atraer el desarrollo de empresas fintech, y promover la colaboración entre talento y organizaciones que permitan acelerar el ecosistema tecnológico”, añade Foment del Treball. “La proximidad con el talento y el dinamismo de nuevas ideas e iniciativas emergentes determinará el éxito del sandbox y, por esto, la capital catalana resulta la ubicación idónea para localizar este espacio”, remarca la patronal.