El Ayuntamiento de Barcelona ha comprado este año 13 edificios de viviendas y otros 13 pisos repartidos por la ciudad que incorporarán 382 viviendas al parque municipal de alquiler, con una inversión cercana a los 60 millones de euros. La mitad de los pisos, unos 198, se encuentran en el distrito de Nou Barris, debido a la adquisición de la promoción de cuatro edificios de Torre Baró, perteneciente a Regesa.
Desde 2015, el Ayuntamiento de Barcelona ha ampliado el parque público a través de la compra de 1.228 viviendas, con una inversión acumulada de 129 millones de euros.
Según cálculos del consistorio, la ampliación de la oferta de vivienda social beneficiará a un millar de personas a las que se podrá ofrecer una renta baja accesible.
Dejando a un lado la operación cerrada en Torre Baró, este año, el ayuntamiento ha intensificado la compra de viviendas en barrios céntricos donde la disponibilidad de suelo para construir es escasa. Ha ocurrido especialmente en el distrito del Eixample y, en menor medida pero de manera significativa, en la Vila de Gràcia, un barrio especialmente denso y con poca presencia de vivienda pública.
El Ayuntamiento realiza las compras mediante el derecho de tanteo y retracto que obliga a qué todas las operaciones de compraventa de inmuebles entre privados se comuniquen a la administración pública, lo que permite detectar oportunidades de adquisición con precios por debajo de la media. Así, de los 60 millones de euros invertidos en 2021, la inversión media por vivienda ha sido de unos 156.600 euros, un importe que incluye las estimaciones de rehabilitación necesarias en cada finca.
Respecto al precio de mercado, la horquilla de reducción en relación a las medias del sector inmobiliario varía según el caso. El Ayuntamiento ha informado que en las adquisiciones realizadas durante el último cuatrimestre, el mayor ahorro porcentual ha correspondido a la compra y rehabilitación de un inmueble en la calle Camprodon que, con una inversión de 1,34 millones de euros, ha supuesto una reducción del 39% respecto al precio de mercado.
El resto de inversiones y las correspondientes estimaciones de rehabilitación han sido la de la calle Diputació, de 10,9 millones de euros, con un ahorro del 32%; la de la calle Fonthonrada, de 2,8 millones, con un ahorro del 33%; y la de la calle Torrent de les Flors, de 10,9 millones y un ahorro del 18%.
En la mayoría de casos, según fuentes municipales, no harán falta grandes rehabilitaciones, a excepción de la promoción de 38 viviendas en Horta-Guinardó, en las calles Mont-ral y Letamendi, unos trabajos que llevará a cabo una fundación de vivienda social, después de la inclusión de esta finca en el convenio de promoción de vivienda social y asequible con las entidades del sector de la vivienda social y cooperativa.
La inversión media por vivienda ha sido de unos 156.600 euros
También se han cerrado operaciones en el Eixample, donde se han adquirido cinco fincas de 99 viviendas en las calles Calàbria, Floridablanca, Borrell, Balmes y Diputació. En Gràcia han sido 17 pisos, en las calles de Camprodon y Torrent de les Flors, en este último caso se trata de una finca de obra nueva en la que no será necesaria ninguna intervención técnica. En Sants-Montjuïc se han comprado otras 11 viviendas en la calle Fonthornada.
A estas hay que sumar otras 13 viviendas vacías, compradas de manera individual en diferentes puntos de la ciudad: Raval (2 pisos), Sants, Porta, Turó de la Peira, Les Roquetes, Prosperitat, Trinitat Nova, Ciutat Meridiana (4), Besòs y Maresme.