Cada vez es más habitual abandonar el modelo de compra para pasar a los servicios de alquiler o pago de cuotas fijas. Lo estamos viendo en el sector automovilístico, donde los rentings e incluso las compañías de movilidad compartida como Ubeeqo se están abriendo paso en las grandes ciudades. A esta revolución se suman ahora en Barcelona las bicicletas de uso diario. La compañía holandesa Swapfiets, nacida en 2014, ha abierto una tienda en la capital catalana que ofrece un servicio de alquiler de bicicletas a largo plazo para el uso urbano.
La empresa, que alquila unas bicicletas que tienen unas características ruedas de color azul, ha elegido Barcelona como su punto de partida en el mercado español. Swapfiets cuenta con más de 220.000 usuarios en los Países Bajos, Alemania, Bélgica, Dinamarca, Francia, Italia y Reino Unido. Ahora, además de llegar a Barcelona se expande también a Viena (Austria) y a las ciudades francesas de Lyon, Nantes, Estrasburgo y Toulouse.
Swapfiets ofrece diferentes tarifas mensuales, dependiendo del modelo de bicicleta y dentro del precio se incluye el servicio de reparación, en caso de que sea necesario. Se puede alquilar una bicicleta clásica de estilo holandés por 16,90 euros al mes o un modelo de gama más alta con siete velocidades por 19,90 euros al mes. En unos meses tendrán también disponibles bicicletas eléctricas, que se podrán alquilar por 75 euros mensuales.
“Con nuestro concepto innovador, cerramos la brecha entre poseer y alquilar una bicicleta y combinamos lo mejor de ambos sistemas. Ofrecemos Swapfiets a cualquiera que quiera una bicicleta que siempre funcione. Swapfiets es para personas a las que les gusta usar la bicicleta a menudo, o incluso cada día, pero no quieren preocuparse de la compra, el mantenimiento o las reparaciones. Además, creemos que las ciudades son más habitables con soluciones como la nuestra, que ayuda a reducir el tráfico, además ser más sostenibles que otras empresas de venta, ya que al tratarse de un modelo de suscripción reduce también la generación de residuos “, destaca Richard Burger, uno de los tres fundadores de Swapfiets.
La nueva tienda de la marca en Barcelona, ubicada en la calle Balmes 61, ocupará a entre 10 y 20 personas, incluidos los mecánicos que realizarán las reparaciones a domicilio. El objetivo es llegar a los 1.000 clientes en su primer año en la ciudad.
“Estamos encantados de la apertura de esta nueva empresa holandesa en Barcelona. Encaja perfectamente con la filosofía de ciudad sostenible y de movilidad amable que tiene Barcelona y estamos seguros de que contribuirá a una movilidad más sostenible que es la que quiere tener Barcelona en el futuro”, comenta el director de Promoción de la Ciudad del Ayuntamiento de Barcelona, Mario Rubert.
El nombre de Swapfiets responde a las palabras swap (intercambio) y fiets (bicicleta en holandés). La suscripción se puede cancelar cada mes y, en caso de reparación, si no se puede resolver en diez minutos, el usuario tiene derecho a recibir una bicicleta nueva de forma inmediata.