Musical 'Company' de Antonio Banderas
El musical Company, en el teatro Apolo, cuenta con el catalán Roger Berruezo como protagonista.

Los musicales de Antonio Banderas conquistan Barcelona

Los clásicos de Broadway A Chorus Line y Company, producidos por el actor desde Málaga, copan la cartelera de la capital catalana este mes de mayo

La dinamización cultural que Antonio Banderas está haciendo en Málaga, su ciudad natal, con el Teatro del Soho se está extendiendo más allá de sus fronteras. La capital catalana vive estas semanas la potencia artística de este proyecto personal y profesional con la llegada de las producciones de Banderas, haciendo del actor y director el gran protagonista de la cartelera escénica. El desembarco del malagueño en Barcelona supera el paréntesis forzado por la pandemia, que interrumpió su estreno en la ciudad con A Chorus Line, obra con la que había subido el telón en febrero de 2020 y luego pasó lo que pasó. Para sanar esa herida, el musical ha vuelto a la capital catalana y se podrá ver hasta finales de mayo en el teatro Tivolí. Y para curarla de verdad, ha venido acompañado por otro, Company, en el teatro Apolo hasta principios de junio.

Antonio Banderas ha sido el protagonista de ambos musicales cuando se hacían en Málaga, pero ha decidido concentrar su participación únicamente en el escenario del Teatro del Soho. Lo hace para dar impulso a su apuesta por la ciudad, obligando a desplazarse hasta ella si alguien le quiere ver interpretando personajes como los de Zach o Robert. Para las representaciones en Barcelona, Antonio Banderas ha confiado en Manuel Bandera y Roger Berruezo para tomarle el relevo. Ambos reconocen que les da respeto sustituirlo y sienten mucha responsabilidad. “Es un reto que no está siendo fácil. Era el personaje de Antonio, con su manera de hacer y cantar. Yo tengo otra edad, energía y cualidades”, cuenta Berruezo, actor de Maçanet de la Selva que se ha dejado ver en musicales como Què, el nou musical, Hoy no me puedo levantar, Ghost y La Bella y la Bestia, y series como Águila Roja.

Con los consejos que les ha dado el jefe, actuación a actuación van haciendo más suyos los personajes y acaban haciendo frente a experiencias similares a las que narran los protagonistas de A Chorus Line, un clásico de Broadway concebido por Michael Bennet que puso por primera vez el foco en los integrantes de un musical y les dio voz. En este musical, Zach está buscando a los integrantes para una nueva producción musical y, más allá de los castings tradicionales, quiere conocer de verdad a los aspirantes.

Manuel Bandera 'A Chorus Line'
Manuel Bandera (centro), interpretando a Zach en A Chorus Line © Nacho Arias

Manuel Bandera es quien lleva el liderazgo en el teatro Tivolí, después de pasar por Madrid, y, pensando en la trama, se acuerda de cómo fueron sus inicios en los musicales teatrales y cómo fue superando pruebas. Todo empezó con una audición para La Bella y la Bestia. Después de no encajar para el perfil de la Bestia, se centró en el de Gastón. Se lo dieron a otro compañero, pero, al cabo de un tiempo, le acabaron llamando para que le sustituyera, abriendo una nueva faceta en su carrera artística, que empezó en los teatros de Málaga, se complementó como bailarín y también le ha llevado a películas de Pedro Almodóvar y series como Amar en tiempos revueltos Acacias 38. Después de Gastón, casualmente Berruezo también interpretó este personaje, vinieron otras producciones como El ZorroCabaret y Chicago. “Ya tenía cubierta la ración de musicales”, sostiene, hasta que Banderas pensó en él para A Chorus Line. “Me ha llegado sin esperarlo”, remarca.

En el caso de Berruezo, sus inicios en el mundo de los musicales son dignos de tener un guion propio. Estaba estudiando Diseño Gráfico cuando empezó a competir en un concurso de karaoke. Llegó hasta la final y la ganó. Manu Guix estaba en el jurado y le animó a que se presentase al casting de Grease. No se hizo con ningún papel, pero vio en todo lo que había pasado una señal y decidió dejar la Massana y apuntarse a Interpretación en la escuela Coco Comín. Años después, se ha subido al escenario del Apolo interpretando a Robert y su crisis de los 40 en Company, otro clásico de Broadway escrito por Stephen Sondheim. En Málaga, había seguido al personaje de cerca, desde la piel de uno de los secundarios y haciendo de cover de Banderas, aunque nunca le tuvo que sustituir. Así, aterrizó de golpe con el papel protagonista en Barcelona, donde se están acercando amigos y familiares para verle jugar en casa. Cuando finalicen las actuaciones en la capital catalana, se irán para Madrid.

Si las comparaciones entre Barcelona y Madrid son una constante, los musicales no son una excepción. La capital catalana está viviendo un boom de este tipo de representaciones teatrales en los últimos años, como evidencia la reapertura del teatro Apolo. Berruezo señala que la cartelera barcelonesa aún no puede compararse con la madrileña, ya que sus públicos no responden de la misma manera. En Madrid, hay más tradición, pero en Barcelona queda camino por recorrer. “La gente no está acostumbrada a pagar estos precios por musicales que se hacen en su ciudad, mientras que, si viajan a Nueva York o Londres, pagan el triple”, razona. Para Bandera, en cambio, cuestiones como esta van por épocas y recuerda como venía a la capital catalana a finales de los 80 cuando era bailarín porque estaba vivía una época de efervescencia.

Company Roger Berruezo
Roger Berruezo en una escena de Company.