Cada nueva apertura en el centro de Barcelona es una buena noticia en un contexto de pandemia y de cierre de negocios. El paisaje urbano de locales con la persiana bajada y el cartel de se alquila es ya habitual, algo impensable hasta hace muy poco, cuando existía una dura batalla entre las grandes marcas para ubicarse en calles estratégicas como el Passeig de Gràcia, Rambla Catalunya o el Portal de l’Àngel. Se calcula, que la tasa de disponibilidad en estos ejes prime podría alcanzar ya el 30%.
En este contexto, Sephora ha anunciado su intención de abrir un tienda emblemática en el número 37 del Passeig de Gràcia, junto a la tienda de Loewe, en un local que en el pasado había ocupado el restaurante Tenorio. El nuevo establecimiento de Sephora tendrá una superficie de 850 metros cuadrados (entre planta baja y sótano) y su alquiler ha sido intermediado por la consultora inmobiliaria ARetail.
El objetivo de Sephora es inaugurar la tienda en febrero, una vez finalicen las obras de reforma. La cadena francesa de perfumería y cosmética selectiva reforzará así su implantación en el centro de la capital catalana, ya que también cuenta con locales en Rambla Catalunya y en en el centro comercial El Triangle de Plaça Catalunya. Sephora pertenece al grupo de lujo LVMH y opera en España desde 1998 en alianza con El Corte Inglés, con quien creó una empresa conjunta para su expansión en el país.
En paralelo, según ha avanzado Idealista News, la consultora Ascana acaba de intermediar una nueva apertura de la mítica firma de joyería Tiffany en la milla de oro barcelonesa. La icónica marca, famosa por la película Desayuno con Diamantes, se ubicará en un local de 400 metros cuadrados en el número 61 de Passeig de Gràcia, en la esquina con la calle Valencia. Se trata de un inmueble que hasta hace unos meses estaba ocupado por una oficina de CaixaBank. Tiffany ya contaba desde 2010 con una joyería en el paseo barcelonés situada en los locales comerciales que hay en el Hotel Mandarin.
Las aperturas de Sephora y Tiffany se suman a la reciente inauguración de la cadena Week Day, propiedad del grupo H&M, en la confluencia entre Passeig de Gràcia y Consell de Cent. En la emblemática arteria comercial barcelonesa también han abierto puertas recientemente Moncler, Balenciaga, Nylstar, Golden Goose y Messika. Ahora, el movimiento más esperado en la zona es la apertura de la macrotienda de Nike, uno de los proyectos más destacados en Europa de la multinacional estadounidense de calzado y ropa deportiva. La nueva flaghship de Nike, que está prácticamente terminada, tendrá una superficie de 2.000 metros cuadrados y será operada por el grupo italiano Percassi, que es el dueño de la cadena Kiko Milano, según la web especializada Modaes. Nike abrirá en los bajos de un edificio que había albergado la sede de Banco Popular en Catalunya y que fue adquirido por la inmobiliaria Hines. Todas las plantas del inmueble serán ocupadas por la empresa estadounidense de espacios de trabajo compartido o flexibles WeWork.
Armani se traslada
Otro de los movimientos previstos en el Passeig de Gràcia es el traslado de la tienda de Armani. Dejará su histórica ubicación en el número 6 para establecerse en la esquina con la calle Aragó, donde acaba de cerrar la tienda de Desigual. Las reubicaciones copan ahora la mayoría de grandes operaciones que se firman en el centro de la ciudad. Un buen ejemplo de ello es el reciente traslado de la boutique de Nespresso, que ha dejado el antiguo Bulevard Rosa para reinaugurar en Rambla Catalunya con Aragó.
El 1 de diciembre también cerró el local de Bimba y Lola, ubicado junto al que ocupaba Nespresso. La marca ha decidido concentrarse en la tienda que posee en Rambla Catalunya. Ahora, en la parte del antiguo Bulevard Rosa que da al Passeig de Gràcia sólo queda una pequeña tienda de Oro Gold, marca que ya tiene en marcha la reforma de otro local en el lado opuesto de la calle, donde hace unas semanas cerró Timberland. En este tramo central, además de Desigual, Nespresso y Bimba y Lola también han bajado la persiana Liu·Jo y Lacoste. Otros cierres que ha habido en el paseo coincidiendo con la pandemia son los de la zapatería Lotusse (junto a la Gran Via) y una de las dos tiendas que tenía Oysho (Inditex).