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¿Como están cambiando nuestras vidas las Fintech?

La innovación tecnológica del siglo XXI ha llegado al mundo de las finanzas -y también a Barcelona- a través de las Fintech, facilitando servicios y productos financieros con una mejor calidad-precio

A lo largo de la última década los bancos tradicionales han visto aparecer nuevos competidores con maneras diferentes de hacer las cosas. Competidores que ofrecen productos como el pago Contactless desde el teléfono móvil, el acceso a dinero en efectivo desde cualquier parte del mundo sin comisiones, plataformas de financiación participativa -también denominadas crowdfunding-, entidades de dinero electrónico -las famosas criptomonedas- y un largo etcétera. Hemos visto durante estos años, pues, la transformación del mundo de la banca con nuevos actores, diferentes de la banca tradicional. Pero, ¿cómo afecta todo esto a nuestra sociedad, y de rebote a nuestra ciudad.

En una ciudad donde la innovación y las start-ups están a la orden del día, las Fintech todavía tienen más a aportar, ya que estas empresas se basan en la innovación y el uso de las nuevas tecnologías. Su presencia mejora los servicios financieros para el consumidor común, democratizando el mundo de las finanzas y en suma proporcionando a toda la sociedad un acceso más sencillo y rápido. Además, la aparición de estos nuevos productos se extiende a las empresas tradicionales, y aumenta la presión para seguir creciendo e innovando con una mayor eficiencia y transparencia.

Desde la Generalitat de Catalunya se propone el objetivo de crear un clúster financiero en Cataluña y en Barcelona, ​​con efecto multiplicador en la economía, para desarrollar un ecosistema de innovación financiero.

Tal y como ya se previó en PwC Global Fintech Survey de 2016, estos modelos de negocio sobre todo se basan actualmente en la banca dirigida a particulares y los sistemas de pago. Es por ello que desde la Generalitat de Catalunya se propone el objetivo de crear un clúster financiero en Cataluña y en Barcelona. Un clúster que tendría un efecto multiplicador en la economía, aprovechando la oportunidad de desarrollar un ecosistema de innovación financiero, así como la especialización y diferenciación en asset management, venture capital, corporate finance y sistemas de pagos.

De hecho, en Cataluña las actividades financieras generan un valor añadido bruto de 7.470 millones de euros. Representa un 3.6% de la economía catalana, en comparación al 5.7% de 2009. Este descenso pone en primer plano los nuevos proyectos Fintech que están surgiendo en la capital, como Pier01-Barcelona Tech City, el establecimiento de N26 o BCN10, entre otros. De hecho, el ecosistema financiero catalán está compuesto de 98.000 trabajadores y de 450 empresas, de las cuales 50 son Fintech. Es así como este modelo de negocio “marca Barcelona” -y cada vez más “marca Cataluña” – funciona como palanca para atracción activa de empresas y de talento internacional.

Por tanto, el sector Fintech en Barcelona es de gran relevancia, con un ecosistema en constante crecimiento. De hecho, de acuerdo con el informe de la Comisión Europea, Startups City Hubs in Europe -realizado por la fundación Mind the Bridge- hay aproximadamente 50 núcleos de innovación en la Unión Europea. En los Top StartupsCity Hubs se incluyen Barcelona y Madrid.

En la ciudad Condal destacan empresas Fintech como Kantox, Verse, Goin, Coverfy o NoviCap, entre otras, que cuentan con grandes cantidades de financiación. En el caso de Kantox, acumula ya un total de 21M€ desde su creación, mientras que Verse suma más de 30M€ en financiación. Además, el 2018 se fundó el primer neobank creado en la ciudad: BCN10. Un banco 100% digital que llegó a recibir más de 1M€ de financiación, y que se encuentra en pleno crecimiento.

Adicionalmente, Cataluña está llevando a cabo iniciativas para atraer empresas Fintech. Sin ir más lejos, Acció firmó contratos de patrocinio con 7 plataformas de crowdlending, crowequity e invoice trading, para incentivar el uso de financiaciones alternativas y complementarias a las de la banca. Así, en 2017 aumentaron de manera notoria, concretamente un 94% en el caso de crowdequity, un 42% en crowdlending y, finalmente, un 32% en invoice trading.

ACCIÓ ha llevado a cabo iniciativas como la creación de un portal llamado Barcelona & Catalonia Startup Hub, conectando las empresas Fintech con grandes emprendedores e inversores de todo el mundo.

Según ACCIÓ -la agencia pública para la competitividad de la empresa catalana- Barcelona es el principal hub de startups del sur de Europa y el quinto del continente, y es la cuarta ciudad que más inversión ha recibido por detrás de Londres, Berlín y París. Por otro lado, ACCIÓ también ha llevado a cabo una iniciativa para fomentar este tipo de empresas, con la creación de un portal llamado Barcelona & Catalonia Startup Hub, conectando así las empresas Fintech con grandes emprendedores e inversores de todo el mundo.

En Barcelona también encontramos la asociación Barcelona Tech City sin ánimo de lucro, formada por emprendedores locales que cuentan con más de 800 empresas y tienen como objetivo promover internacionalmente la marca tecnológica de Barcelona, ​​atraer inversores, contribuir a la creación de un entorno propicio para este tipo de empresas, poner en contacto el talento con las empresas internacionales y colaborar con otras organizaciones para acelerar el ecosistema tecnológico. Uno de los proyectos más importantes de esta asociación, que avanzábamos anteriormente, es el PIER01 -considerado el HUB tecnológico internacional más importante de Europa- que reúne a más de 100 empresas Fintech, con el objetivo de fomentar la colaboración entre ellas e incentivar la innovación.

Dentro del PIER01, destacan proyectos como el Payment Innovation Hub, un proyecto de CaixaBank, Global Payments Inc., Visa, Samsung y Arval que promueve la investigación y el desarrollo en el ámbito de las nuevas tecnologías y formas de pago, con el fin de adaptarse a las nuevas demandas de los consumidores. Llevan a cabo líneas de investigación que engloban áreas como la biometría, y nuevas tecnologías como el Blockchain o el Machine Learning.