Los estudiantes quieren venir a Barcelona, y los inversores lo saben. Ya sea por la oferta formativa, el clima, el ocio o la cultura, la capital catalana está en el radar de los universitarios, lo que se ha traducido en una creciente apuesta por las residencias de estudiantes, que en 2024 ha movilizado una inversión que ha escalado hasta el récord de los 276 millones de euros.
Esta inversión que ha captado la ciudad a lo largo de 2024 ha representado más del doble de los 130 millones del año anterior. Según datos de CBRE, la capital catalana ha asumido el 28% de la inversión a nivel estatal, en un 2024 que arrancó con toda la inversión concentrada en Barcelona: hasta junio, la inversión fue de 219 millones, toda la que se produjo en este periodo en toda España.
Esta inversión se materializa en camas: actualmente, la ciudad cuenta con 16.000 plazas en sus residencias de estudiantes. Esta cifra no ha dejado de aumentar en los últimos cursos, y ha sumado más de 3.000 plazas nuevas en los últimos dos años. De cara a este año y a 2026, la ciudad prevé ganar 3.700 camas más, un 36% del total de las previstas a nivel estatal en los próximos años.
“Barcelona es un referente académico, y debe dar respuesta a la cantidad de estudiantes que quiere venir a la ciudad y necesita alojamiento”, ha destacado la responsable de Living Capital Markets en Barcelona de CBRE, Olga Beltran. El segmento, además, viene de un parque de residencias antiguas a las que han ido ganando terreno “edificios de primer nivel con servicios e instalaciones de calidad”, subraya Beltran.
Las promociones que han destacado durante 2024 se enmarcan precisamente en esta categoría de residencias. La compra de dos residencias que suman 624 camas por parte d Morgan Stanley al Grupo Vita y el acuerdo entre DeA Capital, Partner Group y Camplus para abrir una residencia en el 22@ han sido algunas de las operaciones que han destacado durante el año. Los proyectos de más envergadura que se están desarrollando en Barcelona se ubican en zonas diversas: en la Meridiana, con una nueva residencia de Micampus de 540 camas y, en el otro extremo, en la calle Riera Blanca de la Bordeta, con otras 540 plazas de Livensa, como repasan fuentes de JLL. Pero los grandes proyectos no se quedan en Barcelona, sino que van más allá. En Cerdanyola y junto al Sincrotró Alba, Urbania está impulsando una residencia de 600 camas y, en Esplugues de Llobregat, se está levantando una de 520 de la plataforma de estudiantes de Hines, Aparto, como recuerda Beltran.
Esta residencia de la filial de Hines se ubicará en una de las dos torres que presidirán la entrada a Barcelona por la Diagonal, en el barrio de Finestrelles, como destaca la cluster general manager de Aparto Barcelona, Beatriz Catoira. El nuevo centro, que abrirá previsiblemente en 2026, operará con un modelo híbrido que combinará la residencia con un uso hotelero, vinculado sobre todo a congresos y al ámbito hospitalario, ya que está ubicado junto a Sant Joan de Déu. Además de este proyecto en Esplugues, la plataforma de Hines dispone de dos residencias en la capital catalana, ambas ubicadas en el entorno del 22@ y con precios que oscilan entre los 1.000 y los 1.700 euros mensuales.

Aparto cuenta con 740 camas en su residencia de Pallars, y con 350 en la de la calle Cristóbal de Moura, que abrió en 2024 con una ocupación del 100%. Sus residencias, como explica Catoira, se llenan de estudiantes que se trasladan a Barcelona tanto para estudiar todo el curso como para estudiar en la ciudad durante un semestre o en programas de verano, vinculados habitualmente al aprendizaje de idiomas. Entre sus estudiantes, destacan por cantidad los estadounidenses, que llegan a Barcelona atraídos por “el buen clima, la rica oferta cultural y su conexión con el resto de países europeos”, y es que a menudo utilizan la ciudad como pista de salida para viajar y conocer otras destinaciones de Europa.
Pero las razones que despiertan el interés de los estudiantes internacionales no se quedan ahí. La red de universidades y su ecosistema innovador posicionan a Barcelona como “hub educativo” a nivel global, según Diana Filipescu, profesora asociada de Toulouse Business School (TBS), que opera en Barcelona desde 1995. El desarrollo de infraestructuras educativas y tecnológicas “refuerzan el atractivo de Catalunya como destino educativo de alta calidad”, ha resaltado la experta del centro, que en 2022 estrenó sede en el 22@.

El creciente interés de los universitarios por estudiar en Barcelona genera a su vez interés de los inversores, también en el plano internacional, que ha desembocado en este boom de las residencias en la ciudad. Además, los precios para alojarse han aumentado en los últimos años por la alta demanda y la aún escasa oferta, por lo que este tipo de activo proporciona una elevada rentabilidad a los inversores, por encima de otros mercados, como el residencial y el de oficinas.
Este auge del sector no es exclusivo de Barcelona, sino que se enmarca en una tendencia creciente en la inversión en residencias a nivel internacional. En los próximos años, este mercado moverá en Europa una inversión de 22.000 millones para crear 220.000 nuevas camas, según un informe de The Class Foundation y Savills. Barcelona está llamada a tener un papel destacado en esta previsión, y es que Reino Unido y España lideran el interés inversor en este ámbito en Europa, según el estudio.
Sin embargo, este interés inversor en el panorama educativo trasciende el segmento de las residencias en Barcelona, donde se ubican algunos de los colegios internacionales mejor valorados de los rankings a nivel estatal. Entre ellas, figuran escuelas reconocidas internacionalmente, como The British School of Barcelona que, con más de 2.000 alumnos de 70 nacionalidades en tres campus, acaba de recibir las máximas calificaciones de la inspección del Reino Unido que evalúa la calidad de los colegios británicos ubicados en el extranjero. El interés por estos colegios internacionales se traduce también en inversión, como la de 2,5 euros que lleva a cabo Highlands School Barcelona, y que se enmarca en un contexto en el que la capital catalana se posiciona como hub educativo de alcance internacional.