Lorena Martínez, Oriol Itchaso y Jonás Feliu, de April Plants.

April Plants impulsa la digitalización de la venta de plantas y cierra una ronda con Esade Ban

La startup barcelonesa fundada por Jonás Feliu y seleccionada por uno de los programas de la aceleradora Lanzadera, capta 320.000 euros de la red de business angels de la escuela de negocios y da entrada como inversores a directivos de Westwing, Pepsico e Isdin

El comercio electrónico crece a pasos agigantados en todo tipo de negocios, pero el de la compra de plantas de jardín o de interior es uno de los segmentos de mercado que más retrasado va en el proceso de digitalización, ya que las ventas online en 2018 tenían un peso de sólo el 4,5%, cifra que tras la pandemia ha escalado al 12% y que en cuatro años se espera que supere el 25%.

Son diversas las startups que quieren aprovechar este potencial de crecimiento y que apuestan por digitalizar el sector y ofrecer a los amantes de las plantas una alternativa a las floristerías de barrio tradicionales o a los centros de jardinería. Es el caso de firmas como Colvin, muy orientada a las flores y plantas para regalo, Monstera o April Plants, empresa fundada en Barcelona por emprendedor Jonàs Feliu y seleccionada recientemente por la aceleradora Lanzadera, fundada por Juan Roig, presidente de Mercadona.

Con un capital inicial de 75.000 euros aportado por Feliu y por varios conocidos —ronda Friends, Family and Fools—, más un préstamo de 25.000 euros, April Plants inició su actividad en plena pandemia, en septiembre de 2020, y se ha especializado en la venta por Internet exclusivamente de plantas, tanto de interior como de exterior. Según la firma, ya cuenta con el mayor catálogo de venta de plantas online, con más de 200 tipos, frente a competidores que se han especializado en solo unas veinte referencias. El reto ahora es duplicar la variedad de plantas disponibles.

April Plants no tiene cultivos propios, se abastece directamente de los productores de plantas, ubicados, mayoritariamente en Catalunya, en el área del Maresme, lo que le ha permitido eliminar hasta cinco intermediarios. Su principal proveedor es la coopertiva Corma, por lo que la startup dispone de un almacén y centro de operaciones en Premià de Mar, aunque ahora busca en la zona una nave de mayores dimensiones para poder hacer frente a su crecimiento.

Desde su lanzamiento, la firma ha crecido un 25% mensual, multiplicando por diez su facturación en el primer año y tejiendo una cartera de 7.000 clientes. Así, en 2021, April Plants facturó 158.000 euros y su objetivo es alcanzar los dos millones de euros en 2022. Según Feliu, el precio medio de cada pedido ronda los 69 euros, ya que lo habitual es que los clientes compren de media dos plantas. Uno de los puntos fuertes de la empresa es haber logrado patentar un sistema de embalaje que permite enviar plantas a domicilio de hasta 2 metros de altura, asegurando que lleguen al cliente siempre en perfectas condiciones en un plazo de 24/48h.

Para financiar su plan de crecimiento, April Plants acaba de cerrar una ronda de financiación de 320.000 euros liderada por EsadeBan, la red de business angels de Esade. Han participado en la operación directivos de empresas como Westwing, Pepsico e Isdin. Así, a partir de ahora, Juan Sureda, consejero delegado de Westwing, se une al equipo de April Plants como inversor y asesor.

Jonás Feliu, Andrés Gómez, Ivana Cudicio y Lorena Martínez, de April Plants.

Según el fundador, los 320.000 euros levantados se destinarán a incrementar el equipo, a la estrategia de márketing y a escalar el modelo de negocio. Por ahora, la expansión se centrará en España, donde el emprendedor considera que todavía hay mucho potencial de recorrido, aunque, más adelante, evaluará dar el salto a Portugal y Francia.

Feliu, que estudio diseño industrial en Elisava y márketing en la Pompeu Fabra, decidió crear April Plants tras cursar un MBA en Esade. “Gracias a mi abuela, siempre he sido un apasionado de las plantas. Como cliente, la experiencia de compra que tenía era mala y por eso vi la oportunidad de entrar en un mercado muy poco digitalizado y que se prevé que en cuatro años ya canalice el 25% de las ventas a través del comercio online”, explica.