Sycai Medical mira a Estados Unidos. La startup tecnológica ha cerrado su segunda ronda de inversión por tres millones de euros. Los recursos captados le servirán para hacer llegar más lejos su software médico para localizar lesiones en el abdomen, por ahora centrado en el páncreas, con uno de los cánceres más mortales por su tardía detección.
La compañía ha sumado a inversores como LUMO Labs y Namarel Ventures, además de revalidar el apoyo de Ship2B Ventures, a través de su fondo BSocial Impact Fund —apoyado por Banco Sabadell, el Fondo Europeo de Inversiones y Axis— y Athos Capital. “Esta ronda marca un hito importante en un momento muy estratégico en la evolución de la startup. Actualmente, estamos pasando de ser una organización centrada en el producto a una organización centrada en el negocio”, resume la consejera delegada y cofundadora de Sycai, Sara Toledano.
Todo empezó en 2020, en plena pandemia. Por aquel entonces la empresa se llamaba Sycai Technologies y había empezado a desarrollar su tecnología para sectores como la energía y la agricultura. El origen se encontraba en el doctorado por la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) de uno de los cofundadores, Javier García. Ante tantas iniciativas que buscaban cómo prevenir el contagio de covid, la compañía se puso a reunirse con médicos para ver cómo les podían ayudar con su dispositivo de visión artificial y macrodatos, y lo aplicaron a radiografías del tórax para detectar la enfermedad.
Pero, entre tanta reunión, vía Teams, tal y como remarca una de sus cofundadoras, Júlia Rodríguez Comas, vieron que su tecnología podía ser más útil en otro campo. Con los profesionales sanitarios, se dieron cuenta de que las lesiones en el abdomen eran muy difíciles de detectar, un problema para los radiólogos pero también para los digestólogos. Fue en ese momento cuando Sycai Technologies pasó a llamarse Sycai Medical.
El primer prototipo de su software lo tuvieron listo en septiembre de 2020. Poco a poco, se ha ido mejorando el algoritmo, alimentado con miles de TAC para poder localizar lesiones en esta zona del cuerpo en la que hay muchos órganos, están apretados y se solapan. Los primeros TAC los consiguieron de centros como el Hospital de Mataró, Sant Pau o Vall d’Hebron. También se han nutrido de repositorios públicos.
Una de las innovaciones que presenta la solución de Sycai es que se integra en los sistemas hospitalarios y revisa todas las pruebas de imagen médica que se hagan, tanto si se está buscando una lesión en el abdomen o por otro motivo, por lo que se facilita su detección. Por ejemplo, se revisa también el TAC de un paciente en el seguimiento oncológico de un cáncer de próstata. Asimismo, el software es capaz de ver lesiones malignas, pero también benignas y premalignas, aportando una visión global y alertando con margen.
La ronda también les servirá para extender su software a órganos como el riñón y el hígado
El ensayo clínico de su dispositivo tecnológico se hizo en el Parc Taulí de Sabadell entre 2022 y 2023. Se dedicaron a analizar TAC hechos con anterioridad para ver cómo funcionaba su software. El foco se puso en el páncreas, con un cáncer muy mortal porque no provoca síntomas hasta que ya es demasiado tarde, con una supervivencia media de cinco meses. Estudiaron los historiales de más de 400 pacientes y se concluyó que el dispositivo de Sycai hacía buenos pronósticos, además de que era fácil de utilizar.
Con los resultados encima de la mesa, obtuvo la aprobación para su comercialización en hospitales europeos a mediados del año pasado. Desde entonces, ha llegado a algunos hospitales de España e Italia, con el objetivo ahora de ampliar el número de centros y mercados en los que se está presente en Europa. Los recursos captados por la ronda también les tienen que servir para extender el uso de su software a más órganos presentes en la parte superior del abdomen, como el riñón y el hígado.
La plantilla de Sycai Medical se sitúa en los 12 trabajadores. La previsión es crecer hasta la veintena de cara a 2026, especialmente, con perfiles centrados en tareas comerciales y de expansión. Hasta ahora, había captado unos dos millones de euros, provenientes tanto de su primera ronda (780.000 euros) como de fondos públicos y privados. Incubada por Barcelona Activa, la startup está ubicada en una de sus sedes en el 22@.