La onceava edición de Swab, feria internacional de arte que nació en Barcelona, ofrecerá los próximos días una contundente programación –del 27 al 30 de septiembre en el Pabellón Italiano (Fira de Montjuïc). Cerca de 300 artistas consagrados junto a otros emergentes provenientes de más de 60 galerías de los cinco continentes, mostrarán sus propuestas más innovadoras en diferentes disciplinas artísticas.
Una cita imprescindible para conocer los artistas locales e internacionales que conforman el panorama actual. Y, un compromiso que se mantiene fiel a los objetivos que planteó su fundador, el coleccionista privado Joaquín Díez-Cascón, en el 2006: “Romper con la imagen hermética y elitista que a menudo rodea al mundo del arte contemporáneo y hacerlo más accesible al público general”. La feria se consolida como un evento generador de oportunidades para que artistas, galerías y curadores emergentes puedan acceder al mercado del arte.
El programa de este año se estrena con: The Desert and the Cactus, comisariado por Omar López- Chahoud, reúne seis galerías de la escena pictórica de Brooklyn. Performance, en asociación con la Diputació de Barcelona y bajo un jurado formado por Alexandra Laudo, Imma Prieto y Joan Morey, muestra el trabajo de seis artistas catalanes o residentes en Cataluña. Ephemeral, comisariado por Caterina Almirall, se afirma como una plataforma única para los artistas estrechando lazos mediante las fábricas de creación Hangar, Fabra i Coats y La Escocesa.
Y una inédita programación que incluye la participación de elBulli Fundation. Esta edición también permite el estreno de Reading, una concept store editorial en la que el arte encuentra otras formas de expresión a través de libros. Por su parte, el reconocido programa General que involucra la participación de galerías destacadas y de larga trayectoria. La propuesta On paper, un espacio para reinterpretar el lenguaje artístico del papel como técnica contemporánea. Y los programas My First Art Fair y Seed. El primero becando a tres galerías que tengan menos de dos años de vida y que nunca hayan participado de una feria de arte internacional. Y, el segundo, ofreciendo una oportunidad a galerías y colectivos de artistas abanderados de nuevas plataformas y formatos creativos.