Puig Vela Clásica
Los veleros en plena competición durante la décima edición de la Puig Vela Clásica. ©Nico Martínez

El Real Club Náutico de Barcelona acoge la XV edición de la Regata Puig de Vela Clásica

Unos 300 regatistas se embarcan desde este miércoles y hasta el sábado en una treintena de naves históricas procedentes de hasta nueve países distintos. Se podrá realizar un seguimiento de la competición desde el mismo club, así como desde la playa de la Barceloneta, el Port Olímpic o el Port Vell.

Los amarres están listos para soltarse. Desde este miércoles se pone en marcha la decimoquinta edición de la Regata Puig de Vela Clásica en el Real Club Náutico de Barcelona, uno de los eventos más importantes del panorama náutico español. Una treintena de embarcaciones históricas provenientes de hasta nueve países diferentes y alrededor de 300 regatistas surcarán la costa catalana hasta el sábado 16 de julio.

Desde el propio club, así como de la playa de la Barceloneta, el Port Olímpic o el Port Vell, los aficionados y curiosos podrán hacer un seguimiento de la competición, que dará el pistoletazo de salida a la una del mediodía. Según los servicios de meteorología, el clima acompañará la regata durante todo su transcurso con una brisa suave, un sol radiante, calor intenso y poco oleaje en las aguas de Barcelona.

En este tipo de acontecimientos, el viento es fundamental para establecer el tiempo de duración y el recorrido que emprenden las regatas. En ediciones anteriores, cada jornada se ha prolongado entre una hora y media y dos horas. El trayecto sigue un itinerario pentagonal, que no tiende a llegar nunca a alta mar, de forma que pueda ser contemplado con claridad desde las costas.

La competición de este año reunirá a las últimas vencedoras, las embarcaciones barcelonesas Yanira e Islander, a las cuales se sumarán de nuevo los veleros británicos Grayling, Winderking y Argyll, un yate clásico de 1948. La Regata Puig de Vela Clásica recibirá por primera vez la goleta Sunshine, un diseño elaborado por W. Fife en 1900, cuyos planos fueron encontrados en el Museo Marítimo de Escocia.

Los ganadores de las regatas no se deciden por el orden de llegada, dado que cada velero tienes unas características bien distintas. Es por este motivo que el reglamento del Comité Internacional del Mediterráneo (CMI), a través de un algoritmo matemático, calcula los parámetros de las medidas de cada embarcación y la superficie de la vela para establecer un tiempo compensado para cada participante, que dictamina al final de la semana a quién pertenece el triunfo.

La entrega del trofeo Enric Puig y la clausura de la competición contarán con la presencia de las autoridades portuarias, los responsables del Real Club Náutico, concejales del Ayuntamiento de Barcelona, el presidente y consejero delegado de la empresa organizadora Puig, Marc Puig; y, pendiente de confirmación, Grant Dalton, el regatista neozelandés que ha disputado la vuelta al mundo a vela y actual líder de la Copa América.