Sede del Col·legi d'Enginyers Industrials de Catalunya, en la Via Laietana de Barcelona.

Los ingenieros industriales apremian a encarar los retos de futuro con 300 propuestas

El colectivo reivindica su participación en los espacios de decisión y pide a la administración más agilidad, valentía y pragmatismo para asegurar un progreso sostenible en ámbitos como la emergencia climática, la energía y la salud. Alertan de que en Catalunya faltarán más de 50.000 ingenieros en una década.

El futuro es tecnológico, y las decisiones entorno a éste no pueden dejarse al marge de profesionales de base tecnológica. Con esta premisa, la Associació d’Enginyers Industrials de Catalunya ha recogido en un informe 300 medidas para avanzar hacia un progreso económico, industrial y sostenible. Bajo el nombre Enginyeria, motor de progrés, el documento analiza las medidas que se deben emprender en seis ámbitos distintos, que incluyen la emergencia climática, la transformación digital, la salud, la industria innovadora y 4.0, la energía y una sociedad justa.

Para todos ellos, el documento reivindica la participación de los ingenieros en espacios público-privados de análisis, estudio y decisión. “No podemos solucionar asuntos de base tecnológica con personas que no tienen esta base tecnológica”, ha remarcado el decano del Col·legi d’Enginyers Industrials de Catalunya, Narcís Armengol.

Y es que lo que parece una obviedad, no ocurre actualmente en la administración pública, ha subrayado Armengol en la presentación del documento, junto a la presidenta de la asociación, Maria Salamero, y a la coordinadora del consejo de redacción del informe, Matilde Villarroya, que ha destacado que se trata de un pragmático “documento de acción”.

Proponen la posibilidad de prolongar el calendario de cierre de las centrales nucleares si no se desarrollan energías renovables al ritmo requerido

Favorecer la obtención de nuevos combustibles sintéticos a partir del reciclaje químico de residuos; traspasar parte del transporte de mercancías desde las carreteras a la distribución ferroviaria; potenciar el ecosistema de startups, fomentar la ciberseguridad; impulsar la transformación digital del sistema de transporte; promover soluciones tecnológicas para una población envejecida, y estudiar la posibilidad de desplegar de forma acotada una Renta Básica Universal para evaluar su viabilidad, son algunas de las medidas que recoge el informe. En la mayoría de estos ámbitos, “la tecnología no es excusa para no resolverlos”; la tecnología ya existe, y es una cuestión de decisión, según Armengol. Así, ha pedido a la administración “firmeza, pragmatismo y valentía” ante estos retos.

¿Prolongar la energía nuclear?

Entre las propuestas del informe, destaca otra: evaluar la posibilidad de prolongar el calendario de cierre de las centrales nucleares. Propone valorar que sigan operando más allá de 2035 en el caso de que las energías renovables no se desarrollen al ritmo requerido, como consideran que está ocurriendo.

“Sabemos que tenemos que cerrar las nucleares, pero por el camino hay unos deberes que no estamos haciendo. No podemos decir que las cerraremos si no hacemos los deberes con las renovables”, ha avisado el decano. ¿La alternativa? Utilizar gas para suplir la energía que se dejará de producir al cerrar las nucleares, algo que impediría cumplir los objetivos medioambientales.

Uso eficiente del agua

Coincidiendo con la actual situación de sequía, el documento incorpora propuestas referentes al agua. Figura entre ellas la necesidad de implementar medidas de ahorro y promover el uso eficiente del agua en el sector agrícola, con ayudas y una fiscalidad adecuada por parte de la administración pública.

El colectivo de ingenieros pretende generar un “espacio permanente de tecnología, industria, liderazgo y acción”

El consumo que realizan los ciudadanos desde sus hogares es anecdótico comparado con el uso de agua para los campos y el sector agrícola. “Pese a eso, seguimos inundando los campos en lugar de utilizar tecnologías” que permiten un uso más eficiente del agua, ha señalado Salamero, que ha urgido a implementar medidas en este sentido.

Interpelación al ámbito político

El documento, elaborado en el marco del 160 aniversario de la asociación, no se limita a recoger estas medidas y propuestas, sino que las traslada a representantes del ámbito político y empresarial. Lo ha hecho en un encuentro en la Escola Industrial con unas 130 personas, entre ellas representantes del Parlament y de sus grupos políticos. Con un objetivo: posicionar al colectivo de ingenieros como un actor clave en estas decisiones de futuro, y poner el foco en las medidas que ve necesarias para garantizar un progreso sostenible. Además, tienen la pretensión de generar un “espacio permanente de tecnología, industria, liderazgo y acción”. En este sentido, plantean dar cuenta y continuidad de este documento de forma anual, para hacer un seguimiento y actualización de las propuestas y orientar e impulsar políticas necesarias para el futuro.

La presidenta de la Associació d’Enginyers Industrials de Catalunya, Maria Salamero, y el decano del Col·legi d’Enginyers Industrials de Catalunya, Narcís Armengol.

“Hay que avanzar con agilidad, energía y determinación, tomando decisiones valientes y sistémicas, que vayan mucho más allá de los ciclos políticos”, ha añadido Salamero. La presidenta de la asociación, que representa a 10.000 ingenieros industriales, ha pedido las administraciones pasar a la acción con determinación.

Todas estas medidas dependerán de disponer de suficientes ingenieros cualificados, y en Catalunya faltarán 50.000 en una década

Así, el colectivo aspira a que este sea “un documento de referencia” para administración y profesionales de cara a un futuro en el que los ingenieros quieren ser parte activa de la solución y aportar sus conocimientos y punto de vista, junto a otros ámbitos y ramos profesionales. “El futuro es multidisciplinar, pero nuestro papel es importante”, ha añadido Villarroya.

Todas estas medidas dependerán de un factor tan determinante como evidente: disponer de suficientes ingenieros cualificados. En España, faltarán más de 200.000 en una década, cifra que en Catalunya se traduce en 50.000. “Sin estos perfiles, la evolución hacia un progreso económico, industrial y sostenible no será posible”, ha advertido Salamero. Ante esta situación, propone una receta con dos ingredientes principales: posicionar a estas profesiones como atractivas, y poner a referentes de la ingeniería al frente de espacios visibles de gestión y toma de decisiones.

Fachada de la sede del Col·legi d’Enginyers Industrials de Catalunya, en la Via Laietana.