La Fageda, con sede en Santa Pau (Garrotxa), ha decidido potenciar su presencia en el mercado estatal al comenzar a vender sus yogures en Madrid y en Valencia. Lo hará con cuatro referencias (yogur natural, de limón, de fresa y sin lactosa) que se podrán comprar en El Corte Inglés y en los supermercados Consum.
El objetivo, dice la entidad, es “fortalecer el proyecto social” vinculado a la producción de lácteos, que atiende a personas en riesgo de exclusión. La directora general de La Fageda, Sílvia Domènech, adelanta que en paralelo a explorar nuevos mercados, lanzarán “nuevos productos que a lo largo del año estarán en las tiendas”. En 2022, la compañía ya empezó a vender yogures en Menorca y Mallorca.
La Fageda nació hace cuatro décadas, con el objetivo de mejorar la vida de personas con enfermedad mental y discapacidad intelectual. Fundada por el psicólogo Cristóbal Colón, en un inicio la entidad atendía a una quincena de personas. Hoy, esa iniciativa sin ánimo de lucro reúne ya más de 500; todas ellas, de distintos colectivos vulnerables.
Durante estas cuatro décadas, La Fageda ha impulsado diferentes actividades empresariales y servicios. En su sede de Santa Pau, por ejemplo, cuenta con una fábrica de yogures, de mermeladas y de helados. Además, desde 2019 la entidad ha incorporado nuevos colectivos en riesgo de exclusión bajo su paraguas, con el objetivo de mejorar su formación e inserción laboral.
Todo este proyecto se ha conseguido gracias a la fabricación de yogures, con una producción de más de 90 millones de unidades en 2022. Para llegar hasta aquí, fue clave el acuerdo que La Fageda firmó con su primer gran cliente, el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona hace justo 30 años. Precisamente, el pasado día 23 de enero se conmemoró el 30 aniversario de la llegada de los primeros yogures de la marca al centro hospitalario barcelonés.
Sin embargo, La Fageda no esconde que en los últimos años ha tenido que afrontar “los impactos que sacuden las dinámicas empresariales”. Sobre todo, los efectos de la pandemia y la espiral inflacionista, “que ha supuesto un aumento desmedido de los costes de producción y, por extensión, la reducción del margen y la renuncia a realizar inversiones”. Y es que, por su naturaleza, La Fageda siempre reinvierte los beneficios en el proyecto social, informa ACN.
La Fageda facturó 28 millones de euros en 2021, un 6,97% más. Ahora, la entidad da un paso más para abrirse a nuevos consumidores apostando por la gama de yogures, uno de los “pilares clave” para la “sostenibilidad” de su proyecto social. Por eso, a partir de este 2023, empieza a vender este postre láctico en Madrid y en Valencia, ampliando el mercado estatal (que el año pasado ya empezó con Mallorca y Menorca).
“El actual contexto económico nos exige ser permeables y valientes, apostando por palancas que puedan fortalecer nuestro proyecto para seguir ofreciendo oportunidades a personas que tienen la vida muy difícil”, afirma Sílvia Domènech. “Cuanto más fuertes somos en el ámbito empresarial, más sostenible es el proyecto social”, añade la directora.