En una sociedad cada vez más sedentaria, sobre todo en el entorno laboral, algunos estudios han señalado que se pueden desarrollar hasta 35 enfermedades crónicas y patologías asociadas al sedentarismo, entre las que se incluyen trastornos musculoesqueléticos, cardiopatías, diabetes tipo 2, trombosis, inflamación sistémica y algunos tipos de cáncer.
Para combatir estos efectos negativos el emprendedor Toni Estellé, propietario del holding Ecommerce Addventures —que posee la marca Pummba— y ex fundador de Marmota –startup adquirida por Flex en 2021—, y el empresario Guillem Hernández han creado la compañía Eleva. El negocio se dedica al diseño, fabricación y comercialización online de escritorios regulables en altura y modulares, con estructura metálica y tablero de madera.
Este proyecto, iniciado el pasado mes de julio con una inversión de 250.000 euros, también cuenta con el apoyo de otros emprendedores, entre los cuales Victor Font, Josep Casas y Hugo Cortada.
A través del portal elevadesk.com, la compañía ha iniciado la comercialización en España, dirigida a particulares, pero también a empresas y cadenas de coworking, instituciones o entidades. “Reforzaremos la venta B&B y completaremos la gamma actual de mesas, con complementos como cajoneras o soportes para portátiles y sillas”, manifiesta Guillem Hernández y explica que han recibido pedidos de ayuntamientos, escuelas y varias empresas. Comenta, también, que a falta de contar con tiendas físicas o un showroom, “instalaremos los escritorios en zonas comunitarias de locales de coworking para que los usuarios puedan usarlos y comprobar sus ventajas”.
Inicialmente, la firma dispone de dos partners La firma austríaca Logic Data que le surte de las estructuras metálicas, a las que se incorpora un motor eléctrico que permiten elevar y bajar las mesas a una velocidad de entre 25 mm/s o 38 mm/s y conseguir una altura de hasta el metro y medio des del suelo. El otro socio es el fabricante de muebles Bustper, de La Sènia, que les proporciona los tableros de madera. Por el momento, los escritorios de la marca Eleva se encuentran con anchos de entre 120 y 180 centímetros, a un precio de venta de entre 300 y 500 euros. También se admiten pedidos a medida.
Toni Estellé y Guillem Hernández apuntan a una demanda creciente de este tipo de producto, en el ámbito doméstico por el teletrabajo y en las empresas por los nuevos hábitos de trabajo y la irrupción del hotdesking. De ahí las previsiones de finalizar el primer año de actividad con una facturación de medio millón de euros y más de 2.000 mesas vendidas, “y no descartamos alcanzar los cinco millones de euros en dos años”, concreta Hernández. La expansión “se centrará en Portugal y Francia”, ya que es un producto voluminoso y pesado para su transporte.