El Gran Teatre del Liceu ha cerrado la temporada 2020-21, marcada por las complicaciones vividas derivadas de las restricciones por la pandemia de la Covid-19, con “equilibrio presupuestario”, la asistencia de 123.500 espectadores, el 91% de las entradas vendidas, y 133 funciones representadas, el 79% de todas las obras programadas inicialmente.
El teatro de la Rambla se vio obligado a suspender 36 funciones de las 166 previstas en el programa, un 21%, si bien el público pudo seguir disfrutando de las voces de grandes nombres internacionales como Sondra Radvanovsky, Piotr Beczala, Anna Netrebko, Gustavo Dudamel, Lisette Oropesa, Pretty Yende, Ermonela Jaho, Katie Mitchell, Nadine Sierra o Javier Camarena.
El Patronato de la Fundació del Gran Teatre del Liceu, presidido por Salvador Alemany, destaca en el balance de la pasada temporada la aceptación que han tenido obras como la ópera contemporánea Lessons in Love and Violence, dirigida por el maestro Pons y con dirección de escena de Katie Mitchell, que supuso el estreno en España de la obra; y el debut de la barcelonesa Serena Sáenz en el Liceu, con la ópera Lucia di Lammermoor.
A nivel económico, el interés que ha seguido despertando la temporada operística y de danza y conciertos se ha traducido en un “equilibrio presupuestario”, con unos ingresos ordinarios de 38,4 millones de euros y un gasto total de 38,3 millones, según ha informado el coliseo barcelonés. Los responsables de la institución cultural achacan el balance de la temporada “al compromiso de las administraciones públicas y al apoyo de mecenas y abonados”.
Las empresas y los benefactores han mantenido sus aportaciones en 6,3 millones de euros, cifra que para el teatro demuestra la “confianza y el apoyo” que estos agentes depositan en la cultura y el proyecto artístico del Liceu. Asimismo, las administraciones públicas han realizado unas aportaciones ordinarias de 22,6 millones de euros y unas extraordinarias de 2,2 millones. Desde la institución también se diseñó un plan de medidas de ahorro que se aplicó en todas las partidas del presupuesto general.
Los ingresos ordinarios se situaron en 5,5 millones por debajo de la previsión, ya que el presupuesto inicial estimaba un aforo del 50% hasta noviembre de 2020, y después progresivamente un incremento del aforo hasta llegar a junio de 2021 con un 100% de ocupación de la sala. Previsiones que debido a la evolución de la pandemia no se hicieron realidad. Así pues, el 55% del total de las funciones representadas mantuvieron un aforo limitado a un máximo de 1.000 personas, un 20% pudieron representarse con un aforo ampliado al 70%, un 9% se realizaron con un aforo del 50% en el inicio de la temporada y un 5% con sólo 500 butacas a la venta.
El Gran Teatre del Liceu, que en la presente temporada conmemora el 175 aniversario de su fundación, valora el hecho de que ha podido “mantener las puertas abiertas, levantar la voz para generar cultura segura y mantener una excelente programación artística”.
La institución musical espera cerrar la presente temporada con éxito y está a punto de presentar la programación 2022-2023, de la mano de su actual director artístico Víctor Garcia de Gomar. Recuerda también que, dentro de los distintos actos previstos para conmemorar 175 años de su inauguración, ultima la celebración de un acto el próximo 4 de abril, coincidiendo con la fecha de la efeméride. Este año también se rememoran 35 años de la creación de la asociación privada Amics del Liceu.
El Liceu, que celebra 175 años de su fundación, estudia el proyecto Liceu Mar, una segunda sede para la institución cultural
Entre los proyectos impulsados más recientemente, el Patronato de la institución destaca la puesta en marcha de Liceu+, la nueva plataforma audiovisual que pone al alcance del público en general todos los contenidos audiovisuales del Liceu para hacer más accesible la ópera y complementar la experiencia de las representaciones en vivo a través de contenidos específicos.
En su balance de la temporada, el Patronato también destaca que el Gran Teatre del Liceu, desde septiembre de 2019, “empezó un nuevo proyecto artístico donde el Liceu se repiensa para, teniendo la ópera como sujeto principal, aspirar a convertirse en un centro de las artes y la reflexión”. Dentro de esta línea, el teatro de La Rambla anunció recientemente que estudiará la viabilidad de llevar a cabo el proyecto Liceu Mar, un espacio polivalente y abierto a la ciudadanía, para ampliar sus capacidades actuales y que se ubicaría en el espacio que ocupaba el antiguo Imax Port Vell.
