roses vermelles en Sant Jordi
Este año, el día de Sant Jordi estrenará una supermanzana literaria. © V. Z. González

Barcelona se prepara para un Sant Jordi de récord

La ciudad llegará a las 300 paradas de libros y rosas, muchas de las cuales se concentrarán en la nueva supermanzana literaria que habrá en el Eixample. Las ganas de vivir un 23 de abril sin restricciones hacen que el sector confíe en igualar las cifras de facturación de antes de la pandemia.

La llegada de Sant Jordi siempre hace ilusión. Pero este año todo apunta a que se superarán las expectativas. No solo se dejarán atrás las restricciones y se dará un portazo a la pandemia, sino que se alcanzarán cifras récord y se estrenarán nuevos espacios, con un protagonismo especial de la supermanzana literaria que emergerá en pleno Eixample. Además, este año, el 23 de abril cae en sábado. “Tenemos por delante uno de los Sant Jordi más relevantes de la historia”, defiende el presidente de la Cambra del Llibre, Patrici Tixis.

Las ganas de disfrutar este Sant Jordi han permitido llegar a las 300 paradas de libros y rosas en Barcelona, la cifra más alta jamás alcanzada, superando a las que había hasta en la última celebración prepandémica, en un ya lejano 2019, cuando hubo 240. Según indica el secretario del Gremi de Llibreters de Catalunya, Marià Marín, la oferta conseguida este año equivaldrá a ocupar cuatro kilómetros en línea recta de puestos de libros y rosas. También será elevada la cifra de paradas con firmas de escritores, que dejarán atrás los espacios compartidos del año pasado y llegarán a los 170 puntos. Una cincuentena de puestos se dedicarán a la venta de rosas.

Buena parte de las 300 paradas que habrá en la ciudad se concentrarán en la nueva supermanzana, que irá desde la Diagonal hasta la Gran Via y estará encajada entre Balmes y Pau Claris. Un total de 140.000 metros cuadrados en los que los coches se sustituirán por libros y rosas, remarca el teniente de alcalde de Cultura, Jordi Martí. Desde las 9 de la mañana hasta las 9 de la noche, esta nueva fórmula permitirá fomentar el paseo tranquilo y seguro mientras se va de un puesto a otro, evitando también las aglomeraciones que siempre han caracterizado esta festividad. Sin la necesidad de respetar aforos máximos, toda la zona será de acceso libre, evitando los controles, y las colas, del año pasado.

La supermanzana literaria dejará sin tráfico la zona comprendida entre Diagonal, Pau Claris, Gran Via y Balmes

En Paseo de Gràcia, estarán las paradas de las librerías y las floristerías, mientras que en Rambla Catalunya habrá las de las asociaciones y entidades que no pudieron participar en 2021. También habrá rosas y libros en las calles transversales que conectarán Paseo de Gràcia con Rambla Catalunya, a excepción de València y Aragó, donde se permitirá la circulación de vehículos. Si el nuevo modelo se demuestra exitoso, tanto el sector del libro como el consistorio esperan revalidarlo en futuras ediciones.

Esta fórmula de espacios reservados para profesionales del libro y la rosa se replicará en otras partes de la ciudad, con 11 zonas más repartidas en siete distritos. En el Eixample, los puestos también se instalarán en Plaza Universitat y Paseo de Sant Joan, que recuperará su apuesta por el cómic, la novela gráfica y la literatura infantil y juvenil tras dos años de ausencia. En Ciutat Vella, el plato fuerte estará en la Plaza Reial y el Paseo Lluís Companys, mientras que en la Rambla solo habrá algunos puestos de entidades y librerías. También habrá paradas en las plazas de la Vila y Nicolás Salmerón de Gràcia, la Plaza Valdívia de Les Corts, la Rambla del Poblenou, la Plaza Orfila de Sant Andreu y la Plaza de Sarrià. A todos estos espacios habrá que sumar el centenar de paradas que las librerías instalarán frente a los establecimientos el viernes 22 y el sábado 23.

Todo este optimismo lleva al sector a confiar en que, como mínimo, se igualarán las cifras de 2019. Hace tres años, se vendieron 1,6 millones de libros y se facturaron 22 millones de euros. El año pasado, en el primer 23 de abril en pandemia, se vendió más de un millón de libros, un 75% respecto a 2019, superando las previsiones iniciales. Para Tixis, este Sant Jordi puede suponer una consolidación del incremento de los índices lectores que ha traído el coronavirus, haciendo que el libro viviese en 2021 el mejor año de la última década. Hay que tener en cuenta que algunas editoriales consiguen el 20% de su facturación anual en este día.