El turismo ha sido uno de los sectores más afectados por la crisis del coronavirus y la ciudad de Barcelona ha sido un claro ejemplo sobre cómo esta crisis ha paralizado la llegada de visitantes internacionales, dejando un centro desierto y con persianas bajadas. Ahora que se empieza a dar por controlada la covid, aunque se atisben repuntes, Turisme de Barcelona ha querido celebrar la vuelta a la normalidad con los diferentes agentes del sector.
Administraciones y empresas han participado este miércoles en la Nit del Turisme de Barcelona. Es la primera vez que se celebra este evento, creado con la voluntad de insuflar ánimos al sector y que ha conseguido congregar a unas 500 personas en la Llotja de Mar.
“Esta es una fiesta que nos merecemos”, ha defendido el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni. Junto con el presidente de Turisme de Barcelona, Eduard Torres, y la presidenta de la Cámara de Comercio de Barcelona, Mònica Roca, Collboni ha expuesto que esta crisis supone una oportunidad para redefinir el modelo turístico de la ciudad y virar hacia uno que aporte más valor añadido.
“Es necesario que todos nos creamos que Barcelona tiene activos de primer orden para hacerlo”, ha remarcado la directora general de Turisme de Barcelona, Marian Muro, a lo que Torres ha añadido que los fondos Next Generation pueden jugar un papel importante para digitalizar el sector y hacerlo más sostenible. “Las cartas que tiene Barcelona son las mejores”, ha concluido.
Entre los asistentes a esta primera Nit del Turisme de Barcelona, se encontraban el presidente del Gremi d’Hotels de Barcelona, Jordi Clos; el empresario Joan Gaspart; la presidenta del grupo municipal de Junts en el Ayuntamiento de Barcelona, Elsa Artadi; el presidente del Port de Barcelona, Damià Calvet, y el presidente de Amics de la Rambla, Fermín Villar.