Paquets
Furgoneta llena de paquetes de compras por internet. © Claudio Schwarz/Unsplash

Microplataformas para distribuir paquetes como solución a la congestión urbana

El aumento que está registrando el comercio electrónico afecta la movilidad de las ciudades. Descentralizar la distribución a través de pequeños puntos repartidos por la ciudad se plantea como una manera de reducir este impacto, como también puede contribuir a ello la instalación de taquillas en estaciones o párkings para recoger los paquetes.

Si antes de la pandemia el comercio electrónico ya invadía las calles con furgonetas, el confinamiento exageró el crecimiento que estaba registrando la compra en línea. Cuando las restricciones para evitar los contagios se empezaron a relajar, con idas y venidas, la tendencia se ha mantenido. Más allá de la afectación que grandes plataformas como Amazon tienen sobre el comercio local, las compras por internet tienen un impacto muy claro en la movilidad en las ciudades. Ante esta nueva realidad, están surgiendo varias aproximaciones que quieren reducir las consecuencias negativas que tiene esta actividad, no solo sobre la congestión, sino también sobre la contaminación.

Una de las soluciones que se plantea consiste en la creación de microplataformas logísticas, que permitan descentralizar el reparto desde varios puntos de la ciudad, haciendo llegar los paquetes por la noche y evitando que las furgonetas hagan los repartos durante el día y sustituyéndolas por vehículos eléctricos y más pequeños, como patinetes, bicicletas o triciclos. En Barcelona, hay una en la Estación de França, gestionada por Vanapedal. Con triciclos eléctricos, los repartidores de esta compañía pueden distribuir paquetes en su área de influencia. En este caso toma más sentido, teniendo en cuenta que las calles del centro de la capital catalana son estrechos y sinuosos, y estos triciclos pueden circular con más facilidad que los vehículos más grandes.

En funcionamiento desde hace casi diez años, esta microplataforma se tiene que replicar en otros puntos de Barcelona. La concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Rosa Alarcón, señala que prevén instalar una por distrito antes de 2024. Una de las vías para conseguirlo consiste en impulsar nuevos centros de distribución de mercancías gestionados por agentes privados. Para hacerlo, el consistorio acaba de abrir una línea de subvención de 250.000 euros. Ahora mismo, ya se han presentado unas cuántas propuestas. Se calcula que, como mínimo, se crearán cinco plataformas con estas ayudas.

A pesar de los beneficios que generan, estas plataformas no son muy conocidas por el tejido económico de la ciudad, según un estudio del Racc. Concretamente, el 98% de los comerciantes barceloneses no las conocen. Una vez explicado en que consisten, un 61% cree que es un sistema más sostenible que el actual. Más allá de la extensión de las microplataformas, el Ayuntamiento está fomentando el uso de vehículos más sostenibles, sean eléctricos o bicicletas, y controlando el horario de reparto, evitando que sea en las horas punta y desplazando una parte de los trayectos a la noche.

Aparcamientos como hubs de distribución

Un espacio desde el cual el Ayuntamiento también quiere que se centralicen entregas de comercio electrónico es a través de los aparcamientos. Una empresa que desde hace tiempo está desarrollando este modelo de reparto es Geever. Creada en 2018, esta compañía barcelonesa plantea un modelo de entrega de última milla desde la proximidad. En concreto, su operativa empieza en las instalaciones que tiene en la Zona Franca, donde clasifica los paquetes a partir de las 22.00 horas. Una vez superada esta fase, los paquetes entran en la ciudad y llegan a los párkings, antes de las 5 de la madrugada, para evitar coincidir con las horas punta. Cuando los paquetes ya están en los aparcamientos, los repartidores de Geever se desplazan a pie o en pequeños vehículos eléctricos por su zona de influencia, que tiene un radio de unos 750 metros.

Este modelo permite disminuir en un 90% los kilómetros que hacen las furgonetas —solo van de la Zona Franca a los aparcamientos—, y en un 75% las emisiones. Su proximidad también supone reducir en un 10% las entregas fallidas.

Empresas como Geever quieren distribuir la última milla desde los aparcamientos, una opción que también quiere potenciar el Ayuntamiento

Desde su creación, Geever colabora con Saba para convertir sus aparcamientos en pequeños hubs urbanos desde donde repartir la última milla. Recientemente, Saba ha entrado en el capital de Geever, pasando a controlar el 51%. La operación permitirá la expansión de este modelo de reparto, con la previsión de duplicar este 2021 la cifra de entregas que registró el año pasado, que se situó en más de 250.000 entregas. Por otro lado, se reforzará la presencia de Geever en Barcelona. Actualmente, su red de puntos de distribución está formada por 17 aparcamientos de Saba, Bimsa y B:SM, y 22 trasteros. Su objetivo es llegar a los 60 puntos y que todos sean párkings.

Geever
Los repartidores de Geever reparten en un radio de influencia de 750 metros.

Recogida de paquetes en taquillas

Esta apuesta de Saba por Geever se enmarca en su estrategia de hacer que los párkings, su principal activo, evolucionen del mismo modo que lo está haciendo la movilidad. Para el director de Movilidad de Saba, Joan Viaplana, los aparcamientos se tienen que convertir en hubs de servicios: no solo tiene que ser un espacio donde se deje el coche, sino que también tienen que servir para distribuir la última milla, aparcar la bicicleta, cargar el coche eléctrico, coger un coche, una moto o un patinete de alquiler, o recoger pedidos de Amazon en lockers. Hoy por hoy, estos nuevos usos solo ocupan la primera planta de los aparcamientos de Saba, pero Viaplana está seguro de que irán ganando más terreno en el medio plazo, como también se irán incorporando nuevas modalidades, como podría ser la distribución de productos frescos para los supermercados de la zona.

Hoy por hoy, estos nuevos usos solo ocupan la primera planta de los aparcamientos de Saba, pero Viaplana está seguro que irán ganando más terreno

El uso de taquillas para recoger paquetes no es exclusivo de los párkings. En las estaciones de Rodalies y Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) también se han colocado lockers para ir a buscar paquetes de Correos o Amazon. Como las microplataformas de distribución, este mecanismo permite evitar que un repartidor vaya dando vueltas en furgoneta hasta que encuentra al destinatario en casa, reduciendo la congestión, la contaminación y las entregas fallidas. En estas taquillas, los repartidores dejan los paquetes y los compradores los pasan a buscar cuando les va bien, sin tener que quedarse en casa esperando que suene el timbre.

Aparcament Saba
Los aparcamientos de Saba están evolucionando para incorporar nuevos servicios de movilidad.