Geever
Repartidora de Geever.

Geever duplicará su presencia en Barcelona con la entrada de Saba

La empresa propone un nuevo modelo de reparto urbano, utilizando los párkings como espacios desde donde distribuir más sosteniblemente los paquetes. Además de expandir su operativa en la capital catalana, contempla replicar su modelo en otras ciudades del área metropolitana.

A finales de abril, se anunció que Saba, especializada en la gestión de aparcamientos, entraba en el capital de Geever, empresa dedicada al reparto en la última milla. Las dos empresas hace años que colaboran, pero Saba ha querido dar un paso adelante con esta alianza en su estrategia de ofrecer nuevos servicios en los párkings, que ya incluyen sharing, movilidad unipersonal, recarga de vehículos eléctricos y lockers para recoger pedidos.

Este viernes se han concretado los términos de este acuerdo. En el nuevo accionariado, Saba ha alcanzado el 51% de Geever; la empresa de logística Districenter, el 41%, y el consejero delegado de Geever, Pere Roca, el 8%. Asimismo, el nuevo consejo de administración de Geever incorpora al presidente de Saba, Salvador Alemany, como presidente.

El acuerdo ha supuesto una ampliación de capital inicial de 1,3 millones de euros, que se complementará con más aportaciones futuras. La primera inyección de capital tiene que servir para la expansión que Geever prevé conseguir en el corto plazo. La compañía espera duplicar este 2021 la cifra de pedidos que registró el año pasado, con 251.222 entregas, que supusieron una facturación de 480.000 euros. Entre sus clientes actuales, están Mango, Nespresso, CaixaBank y la empresa de transporte A tu hora express, que trabaja para Amazon, Zalando y Zara.

Asimismo, se reforzará la presencia de Geever en Barcelona. Actualmente, su red de puntos de distribución está formada por 17 aparcamientos de Saba, Bimsa y B:SM, y 22 trasteros. Su objetivo es llegar a los 60 puntos y que todos sean párkings. En los planes de futuro de la empresa, está expandirse a más capitales, como Madrid, Valencia y Sevilla, pero también en el área metropolitana de Barcelona y segundas ciudades de Catalunya. Una de las características que tendrán que tener estas ubicaciones será la presencia de más de un aparcamiento de Saba.

Aparcamientos considerados como pequeños hubs urbanos

El auge del comercio electrónico, intensificado con la pandemia, ha llenado las ciudades de furgonetas que reparten paquetes a cualquier hora del día. Ante esta situación, empresas como la barcelonesa Geever quieren impulsar otro modelo de reparto, que permita reducir la congestión y sea más sostenible. El rasgo diferencial de Geever es la incorporación de los aparcamientos como pequeños hubs urbanos desde donde repartir en la última milla.

Concretamente, su operativa empieza en las instalaciones que tiene en la Zona Franca, donde clasifica los paquetes a partir de las 22.00 horas. Una vez superada esta fase, los paquetes entran en la ciudad y llegan a los párkings, antes de las 5 de la madrugada, para evitar coincidir con las horas punta. Cuando los paquetes ya están en los aparcamientos, los repartidores de Geever se desplazan a pie o en pequeños vehículos eléctricos por su zona de influencia, que tiene un radio de unos 750 metros.

Este modelo permite disminuir en un 90% los kilómetros que hacen las fugonetas —solo van de la Zona Franca a los aparcamientos—, y en un 75% las emisiones. Su proximidad también supone reducir en un 10% las entregas fallidas, es decir, aquellas en las cuales el repartidor no encuentra al destinatario en casa. Estos viajes infructíferos llegan solo en Barcelona y Madrid hasta los nueve millones.

Aparcament Saba
Aparcamiento de Saba con espacio habilitado Geever.

Los repartidores están contratados

A diferencia de otras plataformas de reparto, Geever tiene en plantilla a sus repartidores, que forman el grueso de su equipo, actualmente integrado por unos sesenta trabajadores. Los planes de expansión que tiene previsto la compañía incluyen incorporar a más personal. En la presentación del acuerdo, Roca ha señalado que también quieren contratar personas con discapacidad para el reparto, tal y como hacen otras empresas como la barcelonesa Apunts.