Barcelona refuerza su liderazgo médico en oncología. El Hospital Clínic ha recibido la designación preliminar como Centro Integral de Cáncer (CIC), un modelo de excelencia para un abordaje del cáncer que unifica asistencia, investigación y formación. Para aumentar la supervivencia, la Comisión Europea (CE) ha puesto como objetivo avanzar hacia esta nueva estructura organizativa multidisciplinar, con la que se quiere atender el 90% de pacientes de cara al 2030.
El Clínic se convierte así en el segundo centro de Barcelona en ser designado con esta categoría y de los primeros de España, después de que el Hospital Vall d’Hebron obtuviera la acreditación por parte de la Organización de Institutos Europeos del Cáncer (OECI) a mediados de 2023. “Es muy bueno para el país contar con centros integrales de cáncer”, sostiene el doctor Aleix Prat, quien dirigirá el Clínic Barcelona Comprehensive Cancer Center. El hospital del Eixample calcula recibir la autorización definitiva a finales de año.
Para el paciente, la nueva organización se traducirá en una atención más personalizada y constante durante todo el proceso de la enfermedad. El Clínic unirá bajo un mismo paraguas todas las fases, desde la prevención y el diagnóstico, pasando por el tratamiento, hasta el seguimiento, con el objetivo de coordinar de una manera más eficiente a todos los profesionales implicados. Además, permitirá un acceso más rápido a los nuevos tests y terapias que desarrollan sus investigadores, lo que mejorará la atención al paciente, pero también consolidará al centro como referente para la atracción y retención de talento nacional e internacional.
El foco se ha puesto tradicionalmente en el diagnóstico y el tramiento del cáncer, pero también se quiere hacer una mejor atención posterior, cuando la operación y la quimio ya están hechas, pero el paciente se tiene que recuperar psicológicamente y muchas veces se siente desamparado, para lo que se tendrá que trabajar más con la atención primaria para dar una cobertura integral. “Aumentar la supervivencia es importante, pero también curar mejor”, resume Prat, experto en cáncer de mama, donde se tiene que avanzar hacia una cirurgia más precisa y con menos efectos secundarios.
Con el nuevo esquema, cogerán protagonismo las asistentes clínicas, una figura de coordinación que mayoritariamente serán infermeras y que acompañarán y guiarán a los pacientes durante todo un proceso duro que lleva de un médico a otro, de una prueba a otra, y muchas veces les deja perdidos en un momento muy delicado y angustioso. El circuito desde la primera sospecha hasta los controles posteriores estará monotorizado en todo momento y se sabrá también en qué fase está el paciente, así como los pasos que vendrán después.
Los centros integrales de cáncer también tienen que dar una mejor respuesta al territorio. El Clínic se fija en el eje de la carretera C-17, con una población de referencia de 1,2 millones de personas, para lo que trabaja con los hospitales de Granollers (donde ya ofrece radiología), Mollet del Vallès, Sant Celoni, Vic y Campdevànol, una relación que tiene que ir a más en los próximos años para poder hacer llegar los últimos avances médicos a todos los ciudadanos.
A la espera del nuevo Clínic
El Clínic trabaja desde hace décadas en unir el trabajo de sus equipos de oncología, cirugía y radiología con la investigación que hace el Instituto de Investigaciones Biomédicas August Pi i Sunyer (IDIBAPS) y la formación que imparte la Universidad de Barcelona (UB), por lo que el nuevo Centro Integral de Cáncer es un paso más, una consolidación de esta manera de funcionar. Por el momento, limitada en las instalaciones actuales, anticuadas y encajonadas en el entramado del Eixample, con la mirada puesta en el futuro Clínic, que se ubicará en la parte alta de la Diagonal y permitirá avanzar a los modelos de campus médicos modernos.
El centro estará liderado por el doctor Aleix Prat, director del Instituto del Cáncer y Enfermedades de la Sangre del Clínic, el embrión para este nuevo modelo de funcionamiento que se puso en marcha a finales de 2023. Formado en Vall d’Hebron con el doctor Josep Baselga, previamente, había liderado el Servicio de Oncología Médica del Clínic (2014-2022). Prat trabajará con la doctora Meritxell Mollà, que se encargará de coordinar las actividades asistenciales, el doctor Álvaro Urbano-Ispizua, que se centrará en la formación, y el doctor Elías Campo, que será el responsable de la parte de investigación.

El cáncer representa entre el 20% y el 30% de la actividad del Clínic, referente en los cánceres hematológicos (leucemia, linfomas y mielomas), el cáncer de mamá y el cáncer de hígado, así como en las terapias celulares CAR-T, con ejemplos como la ARI-0001 para la leucemia aguda y la ARI-0002 para el mieloma múltiple, tomándole el nombre a Ari Benedé, una chica de 13 años enferma de leucemia que hizo todo lo posible para hacer llegar un tramiento que antes solo se hacía en Estados Unidos.
Con un presupuesto de 170,5 millones de euros (133,2 millones para la atención y 37,3 millones para la investigación), el Clínic Barcelona Comprehensive Cancer Center englobará a más de un millar de profesionales. El Instituto del Cáncer se queda con la mitad. El centro cuenta actualmente con 6.500 nuevos pacientes anuales, más de 140 camas de hospitalización, así como 25 grupos de investigación, responsables de más de 450 publicaciones científicas y casi 360 ensayos clínicos activos, y cinco cátedras de la UB dedicadas al cáncer.