Asomarse a los retos del presente que condicionarán el futuro. FemCAT ha alcanzado sus 20 años de actividad mirando a las dos próximas décadas y abriendo interrogantes sobre la Catalunya de 2044. “La inestabilidad geopolítica, el gran movimiento migratorio y el desarrollo de la IA tendrán una clara repercusión”, ha asegurado el presidente de FemCAT, Oriol Guixà. En este contexto, el también presidente del grupo La Farga ha destacado la necesidad de garantizar la cohesión social: “Debería estar basada en la lengua, en la cultura y en nuestro espíritu de innovación”, ha proclamado en el XIII Fòrum FemCAT, bajo el título Catalan Legacies: Proyectemos la Catalunya de 2044.
En una jornada que ha reunido a más de 500 representantes del ámbito empresarial, económico, político y social en el Palau de la Música Catalana, Guixà ha apostado por potenciar la colaboración público-privada ante “la bajada de la productividad y la industrialización” de Catalunya. Además, ha puesto el foco también en su capital y en su rol como tal, y es que considera que Barcelona ha sabido generar su imagen internacional, pero no ejerciendo de capital catalana y proyectando a Catalunya en su conjunto. “Si lo consiguiéramos, tendría mucha potencia para proyectarnos hacia fuera”, ha agregado el presidente de FemCAT, que agrupa a 500 empresas que suman un volumen de facturación equivalente al 10% del PIB catalán. Guixà ha apostado por construir legado desde Catalunya de cara a 2044: “Queremos el mejor país del mundo”.
Para lograrlo, la directora del World Cities Culture Forum, Laia Gasch, ha reivindicado que la cohesión social es clave: “Si queremos tener el mejor país del mundo, tenemos que dar oportunidades y hacer visible la diversidad, y prepararnos para tener el mejor mosaico de colores del mundo”. Lo ha dicho en un contexto en el que uno de cada cuatro residentes en Barcelona es de origen extranjero. Es una diversidad que se percibe en la ciudad y su cotidianidad: “Se ve en espacios como el metro y el mercado, pero no en esta sala. ¿Representamos la diversidad de Catalunya?”, ha reflexionado Gasch, que ha invitado a mirar hacia las empresas y las instituciones y a trabajar para prepararlas para que reflejen la diversidad catalana real.
“La inclusión de minorías es clave para cubrir la falta de mano de obra y de talento”, además de para avanzar en la cohesión social, según Gasch. “Si queremos que Catalunya sea líder, tenemos que ver la diversidad del país como una riqueza para las empresas y los órganos de gobierno. El riesgo es quedarse atrás, con un crecimiento lento y una sociedad fragmentada”, ha advertido, y ha terminado interpelando a los empresarios: “Os animo a hacerlo: tenéis influencia, utilizadla para generar cambio”.
De esta forma, la diversidad de la sociedad catalana representa un reto, pero también una oportunidad. Así lo considera también el director del Centre d’Estudis Demogràfics, Albert Esteve. En una mesa redonda con Gasch moderada por la presidenta de la Societat Catalana d’Economia (IEC), Ada Ferrer, Esteve ha defendido que la cohesión puede lograrse de forma material y económica, pero también de forma más profunda, desde un punto de vista cultural.
Para ahondar en este ámbito, el CED ha analizado el grado de conocimiento del catalán en función de grupos de edad y de origen, a partir de información del INE. El cruce de datos concluye que, pese a que existe un gap de conocimiento del catalán entre los residentes en Catalunya nacidos en el extranjero de entre 40 y 49 años, éste se reduce y tiende a desaparecer en el caso de los más jóvenes. En concreto, los niños y jóvenes de entre 10 y 19 años nacidos en el extranjero hablan, leen y escriben en catalán en un 80% de los casos, y ahora “hay que trabajar para que dentro de 20, 30 o 40 años no quede ni rastro” de estas diferencias. En una sociedad formada por orígenes muy diversos tanto en procedencia como en su participación en el mercado laboral y en el background cultural, “la lengua puede ser una de las vías de cohesión que religue a la población”, ha concluido Esteve.
Bailar con la IA en pro de la competitividad
Además de reflexionar sobre la cohesión social y el abordaje de la inmigración, la jornada ha analizado el papel de la IA, que “ha llegado para quedarse y generará una gran transformación”, según el Jefe de Relaciones de Analistas de IA Generativa de Servicios Web de Amazon, Albert Esplugas, que ha defendido trabajar para “ser capaces de abrazar la IA y gestionar los miedos”. Y es que “el factor clave para la productividad es el factor humano y la IA, y sobre todo cómo trabajan en simbiosis”.
“Tendremos que aprender a bailar con la IA, siempre teniendo nosotros la batuta y el control”, ha añadido Esplugas, que ha pronosticado que en cinco años el 20% de los clientes de las empresas serán agentes automatizados que operarán de extremo a extremo sin ninguna interacción humana, los “clientes máquina”. En este contexto, Esplugas ha apostado por aplicar la IA en sectores estratégicos en los que ya despuntan Barcelona y Catalunya en general, como el ámbito de la salud y el turismo, y combinarlo con la atracción y retención del talento con medidas como la mejora de la remuneración.
Esta atracción y generación del talento se gestiona de una forma muy distinta en Estados Unidos, según el director general de Ficosa en Norteamérica, Joan Cañellas. Lo ha explicado en una mesa redonda con Esplugas moderada por la periodista Mar Galtés, en la que ha asegurado que “uno de los orígenes de la emprendeduría en América es la educación basada en la autoestima y en la creencia de que uno puede hacer lo que se proponga”. En un mercado laboral estadounidense marcado por largas jornadas y pocas vacaciones, Cañellas ha destacado la importancia de la alineación y colaboración que existe entre las universidades y la empresa, y del papel de la inversión. Desde el prisma americano, “Europa se percibe como un sobrerregulador”, aunque ha defendido impulsar la regulación que convenga en el ámbito de la Inteligencia Artificial.
También ha puesto el foco en la Inteligencia Artificial y en las oportunidades y amenazas que representa el abogado experto en Derechos Humanos Peter Sahlas. “Nuestros datos no se han ido compilando sólo para la publicidad, sino para alimentar a la IA”, ha avisado. El también presidente del consejo de la fundación Pierre Eliott Trudeau ha hecho además un repaso de los retos que encarna el contexto geopolítico actual, especialmente en la invasión de Rusia a Ucrania. Sahlas ha defendido buscar soluciones a los retos y amenazas actuales y que “Europa se mantenga unida y sea conscientes de los riesgos geopolíticos”.
La cita de FemCAT ha contado también con la participación del presidente del Parlament, Josep Rull, que ha abierto la jornada llamando a pensar “Catalunya en grande”, y con la del presidente de la Generalitat, Salvador Illa, que ha cerrado el encuentro empresarial. En la cita, que ha llenado el auditorio del Petit Palau, se ha hecho referencia en varias ocasiones a un concepto también clave para encarar las dos próximas décadas: la autoestima de Catalunya, que debe potenciarse junto al ecosistema empresarial buscando la cohesión social dentro de la diversidad.