Las mujeres han formado parte del sector de la automoción desde el primer día, aunque, como en tantos otros ámbitos, han sido invisibilizadas. Sacar a la luz y otorgar el reconocimiento que se merecen las pioneras del automóvil es, precisamente, el objetivo de la nueva exposición de CASA SEAT, inaugurada este miércoles y que se podrá visitar gratuitamente hasta el próximo 14 de octubre. En la muestra pueden conocerse los nombres de una treintena de mujeres que contribuyeron a que el coche se convirtiera en el invento que cambió el siglo XX, como atestigua la propia Emilia Pardo Bazán, que en un artículo de 1897 recogido en la exposición aseguraba que el coche “es una de las mejores conquistas de la civilización” porque su uso permitiría liberar a las mujeres de tener que viajar siempre acompañadas de “lacayos y palafreneros”.
Pardo Bazán está considerada como la mejor novelista española del siglo XIX y como una pionera en el activismo por los derechos de la mujer, pero también ha pasado a la historia por algo mucho más desconocido: fue la primera mujer española en conducir un coche. Es, precisamente, en este tipo de anécdotas y curiosidades en las que se centra la exposición, dando a conocer, por ejemplo, el nombre de las primeras mujeres que dieron la vuelta al mundo en coche o la identidad de las primeras mujeres en trabajar como taxistas: Wilma Russey, que obtuvo la primera licencia en Nueva York en 1915; o Piedad Álvarez, que fue la primera taxista española. También es especialmente interesante conocer como varios inventos y avances técnicos en la industria de la automoción, como los intermitentes, el espejo retrovisor y los limpiaparabrisas, tienen una autoría femenina.
“Pioneras, es un homenaje a las mujeres que han hecho historia en el sector del automóvil y que son muy poco reconocidas”, destaca la nueva directora de CASA SEAT, Cristina Vall-Llosada, que subraya también la importancia y el peso que esta industria ha tenido en Barcelona, ciudad que el próximo año celebrará el 135 aniversario de la fabricación del primer coche en España. Durante la inauguración de la exposición, Vall-Llosada ha agradecido también al presidente del Palau de la Música, Joaquim Uriach, que haya cedido a la muestra uno de los cuadros de su colección, Dona del volant, del pintor Ramón Casas, gran aficionado al mundo del motor.
Claudia Grego, cocreadora de Pioneras, junto a Jose Mata, explica que “la gran sorpresa” que se han llevado tras los largos meses de documentación y preparación de la exposición es que “las mujeres se incorporaron al mundo del automóvil simultáneamente a los hombres”, aunque sus nombres han sido olvidados. Han querido poner también el énfasis en el impacto social que tuvo la irrupción del coche, que era sinónimo de modernidad y que, rápidamente, se convirtió en una palanca para la emancipación de la mujer, si bien a comienzos del siglo XX esta disrupción tecnológica sólo era accesible para las clases más pudientes de la sociedad. “El automóvil cambió la visión de la sociedad, ya que ofrecía capacidad de desplazamiento y permitía situar a las mujeres fuera del hogar; fue una transformación muy poderosa para la época”, explica Grego, recordando nombres de pioneras como Bertha Benz, Clärence Stinnes, Alice H. Rumsey o Camille du Gast.
La muestra se divide en cuatro ámbitos: Aventureras, Inventoras, Conductoras y El esfuerzo de la guerra. Esta última sección es de gran relevancia, ya que la primera y la segunda Guerra Mundial propiciaron que al volante de un coche ya no estuvieran únicamente actrices y mujeres adineradas de apellidos reconocidos, sino también mujeres anónimas que conducían ambulancias o trabajaban en las fábricas mientras los hombres se marchaban a los campos de batalla. Se muestran así fotos de las voluntarias de la ONG The First Aid Nursing Yeomanry (Fany), de mujeres reparando un motor o cambiando una rueda, y también imágenes de conductoras de la CNT durante la Guerra Civil española.
Aunque en esta sección las protagonistas son anónimas, hay un par de excepciones: vemos a la premio Nobel Marie Curie al volante de uno de los automóviles que convirtió en ambulancias y en unidades de rayos X portátiles para mejorar la asistencia de los soldados heridos en el frente. Según está documentado, Curie aprendió a conducir y tomó lecciones de mecánica para contribuir a salvar vidas. Otro rostro conocido de este periodo bélico es una fotografía de 1945 de la entonces princesa Isabel, futura reina de Inglaterra, que se unió al Auxiliary Territorial Service (ATS), la división femenina del ejército británico, y que también realizó una formación sobre mecánica, lo que hizo que la prensa de la época le atribuyera el nombre de Princess Auto Mechanic.
La exposición cuenta con medio centenar de fotografías y otros documentos como extractos de películas, artículos de prensa e imágenes de algunas de las primeras patentes de automoción creadas por mujeres. También se dedica un espacio a rendir homenaje a las denominadas Damiselas del Diseño, un grupo de mujeres precursoras del diseño industrial que fueron contratadas por General Motors en los años 50 y que marcaron un avance tanto en el diseño interior de los vehículos, como en materia de seguridad, ya que incorporaron los cinturones retráctiles o los indicativos de “puerta abierta”.
Actividades paralelas
Pioneras puede visitarse libremente, pero CASA SEAT también ofrece visitas guiadas, con reserva previa. Otra forma de profundizar y conocer mejor la historia de las mujeres y el mundo de la automoción es participar en alguna de las actividades paralelas que ha programado la muestra durante las próximas semanas. El sábado 16, se proyectará en el auditorio de CASA SEAT la película Sufragistas, que cuenta la historia de las sufragistas inglesas en los inicios de la Primera Guerra Mundial. El día 18, la historiadora del arte Cristina Manresa y el escritor Ernesto Mallo visitarán CASA SEAT para conversar sobre los vehículos que enamoraron y obsesionaron a distintas estrellas y personajes famosos desde 1930 hasta la actualidad. En la sesión Celebrities y coches: una historia sobre ruedas, los asistentes descubrirán los coches que fascinaron a estrellas como Clark Gable, Marilyn Monroe, Jennifer López o Charlize Theron.
En paralelo, teniendo en cuenta que muchos de los sistemas de seguridad que incorporan los vehículos actuales fueron ideados por mujeres, el 19 de septiembre el encuentro de CARNET Insights se centrará en las nuevas tecnologías y tendencias en seguridad vial. Javier Luzón, Head of Vehicle Safety de SEAT; Nuria Pérez, responsable del departamento de Atención a víctimas por tráfico de Aesleme, y Jesús Monclús, director del área de Prevención y Seguridad Vial en la Fundación Mapfre, responderán a las principales cuestiones sobre el futuro de la seguridad vial.
Finalmente, el 7 de octubre, en colaboración con el colectivo Young IT Girls, que impulsa que se rompan los estereotipos de género en los ámbitos técnicos y científicos, CASA SEAT ofrecerá dos sesiones de un taller que invitará a las asistentes a diseñar las soluciones de movilidad del futuro y en el que aprenderán a programar robots con Scratch.
Mujeres Pioneras
Entre las muchas biografías que se sacan a la luz en la exposición destaca la de Bertha Benz, esposa del inventor del primer motor de combustión interna. Acompañada por sus dos hijos, en 1888, Bertha realizó un viaje de cien kilómetros para dar a conocer un invento que desde el primer minuto identificó que iba a ser revolucionario. A ella se atribuye también la invención de las pastillas de freno, ya que durante el largo viaje tuvo que hacer frente a diversos desafíos, como la reparación de los frágiles frenos de madera, lo que le llevó a emplear para reducir su desgaste tiras de cuero y suelas de sus zapatos.
Otra protagonista destacada es Florence Lawrence, considerada como la primera gran estrella cinematográfica de la historia y gran apasionada de los coches, hasta el punto que fue la inventora de un artefacto para indicar el cambio de dirección y la frenada, precursor de los actuales intermitentes y luces de freno. La también actriz Anita King fue la primera mujer que cruzó Estados Unidos de costa a costa en coche y sola. Lo hizo en 1915 y con el apoyo del fundador de Paramount Pictures. Su viaje entre Hollywood y Nueva York duró 49 días, toda una hazaña para la época. Unos años antes, en 1909, también había viajado de costa a costa con un Maxwell de 30 caballos Alice Huyler Ramsey, acompañada de sus dos cuñadas y una amiga. De los 5.767 kilómetros recorridos entre Nueva York y San Francisco, solo 244 estaban asfaltados.
La figura de Harriet White Fisher también ocupa un lugar destacado en la exposición al ser la primera mujer que recorrió el mundo en un Locomobile de 40 caballos en 1909, visitando países como Estados Unidos, Inglaterra, Italia, Egipto, India y Japón. Esta vivencia se plasmó en un libro publicado en 1911, A Woman’s World Tour in a Motor.
En el capítulo de las inventoras, la muestra rinde homenaje a Dorothy Levitt, una piloto británica considerada la inventora del espejo retrovisor; así mismo, a la doctora June McCarroll se atribuye haber tenido la idea de pintar líneas separadoras en la calzada para separar los carriles de la calzada y prevenir los accidentes. Margaret Wilcox inventó un sistema de calefacción para mejorar la comodidad de los conductores en época de frío; y Mary Anderson pasará a la historia por haber patentado en 1903 el primer limpiaparabrisas, según consta en la Oficina de Patentes y Marcas de EEUU con el número 743.801.
Finalmente, los aficionados a las competiciones automovilísticas encontrarán también en la exposición múltiples referencias a las primeras mujeres piloto. Destaca Key Petre, apodada la reina de Brooklands, por sus hazañas en el circuito de Surrey. Otro ejemplo es el de las hermanas Violette y Evelyn Cordery, que en este mismo circuito, en 1929, recorrieron 48.000 kilómetros en 20 días y 20 horas sin detenerse. Finalmente, se recuerda también a Gwenda Steward, que triunfó también como piloto a comienzos de los años 20 del siglo pasado, cosechando diversos récords de velocidad.