El cambio climático también afecta a las escuelas, con aulas poco preparadas para hacer frente a una subida de temperaturas sin precedentes y unos veranos cada vez más largos. Hasta ahora, los centros estaban preparados para un clima que no superaba los 30 grados en verano, con herramientas como la instalación de sistemas de ventilación cruzada y ventiladores portátiles o de techo, y la climatización de espacios comunes o la creación de refugios climáticos en los patios. Desgraciadamente, este umbral ha sido ampliamente superado en los últimos años y las medidas aplicadas hasta ahora han perdido eficacia.
Ante esta emergencia, el Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha el Pla Clima Escola Barcelona para aumentar la climatización en las escuelas y garantizar unas condiciones climatológicas óptimas en el aula, así como reducir el impacto energético de los centros. “Ante el cambio climático y la subida de temperaturas, tenemos que poder mitigar los efectos en las escuelas y volver a dar confortabilidad. Pero también tenemos que aplicar la transición energética en los centros para ser más sostenibles”, explica la gerente del Área de Cultura, Educación, Deportes y Ciclos de Vida del Ayuntamiento de Barcelona, Sara Jaurrieta. Una apuesta municipal para los centros que se enmarca en una visión global, no solo reforzando la educación ambiental en el aula para concienciar a los alumnos, sino también con una batería de medidas para combatir el cambio climático en la ciudad.
“Ante el cambio climático y la subida de temperaturas, tenemos que poder mitigar los efectos en las escuelas y volver a dar confortabilidad. Pero también tenemos que aplicar la transición energética”
Con un presupuesto de 100 millones de euros, completamente financiado con el impuesto turístico, el Pla Clima Escola Barcelona actuará de forma integral en un total de 170 centros públicos de la ciudad, con un coste estimado medio de 590.000 euros por centro. Las actuaciones se extenderán desde este 2024 hasta 2029, beneficiando la confortabilidad en el aula de más de 55.500 alumnos. Concretamente, el plan se llevará a cabo en 149 escuelas, dos escuelas de educación especial y tres institutos gestionados por el Consorcio de Educación de Barcelona. Además, se han incluido 16 institutos-escuela en el proyecto.
En primer lugar, el Pla Clima Escola Barcelona implicará la instalación de sistemas de renovación mecánica del aire, que funcionarán durante la noche y sacarán parte del calor, con el objetivo de garantizar un aire de calidad para los alumnos y el resto de usuarios. Por otro lado, se incorporarán sistemas térmicos domotizados. Estos sistemas eléctricos de aerotermia solo se pondrán en marcha a partir del umbral de los 26 grados en el interior en verano, mientras que el umbral estará en los 21 grados en el interior en invierno. Dotándolos de una activación gradual y automática, también se favorecerá el ahorro energético.
Las actuaciones del Pla Clima Escola Barcelona mejorarán el confort en el aula de más de 55.500 alumnos
Asimismo, las escuelas se dotarán de placas fotovoltaicas para favorecer la descarbonización. Se calcula que la superficie apta para instalar placas solares en las cubiertas de los centros es de un total de 181.000 metros cuadrados, con un potencial de producción anual previsto de 31,27 GWh/año, una cifra que supera las necesidades energéticas para enfriar los espacios durante los meses de calor y calentar los equipamientos en invierno. La instalación de placas solares no solo permitirá a las escuelas generar energía suficiente para el autoconsumo y mejorar el confort climático de los equipamientos, sino que también permitirá producir excedente energético para la comunidad, destinándolo a otras equipamientos municipales.
La electricidad producida por la energía solar alimentará a los nuevos sistemas de climatización de aerotermia, que sustituirán a las instalaciones de gas y mejorarán la eficiencia energética de los edificios. Según las previsiones del consistorio, en 2029 las 170 escuelas donde se actuará pasarán de emplear un 73% de gas y un 27% de consumo eléctrico a casi darle la vuelta a las cifras, con un 62% de consumo eléctrico y un 38% de gas. Este gas se consumirá principalmente en cocinas y calderas para calentar el agua de los vestuarios. En un futuro, se contempla estudiar también cómo ahorrar este tipo de consumo.
Diferentes fases de actuación
Este 2024 se actuará en un total de 24 escuelas donde solo habrá que realizar intervenciones mínimas. Concretamente serán Escola Drassanes, Escola Mediterrània (Ciutat Vella); Escola Fructuós Gelabert, Escola dels Encants, Escola Els Llorers, Escola Fort Pienc, Escola Mallorca (Eixample); Escola Anglesola (Les Corts); CEE Municipal Vil·la Joana (Sarrià- Sant Gervasi); Escola Josep Maria de Segarra, Escola L’Univers (Gràcia); CEE La Ginesta (Horta-Guinardó); Equipament antiga Escola Ramon i Cajal, Escola Can Fabra, Escola Eulàlia Bota, Escola Ignasi Iglésias, Escola La Maquinista (Sant Andreu); Escola Fluvià, Escola La Mar Bella, Escola L’Arc de Sant Martí, Escola Pere IV, Escola Provençals, Escola Sant Martí y La Llacuna del Poblenou (Sant Martí).
Este verano, aprovechando el parón vacacional, se actuará en un total de 24 escuelas
Después, hasta 2029, se harán obras en los 146 centros restantes según su urgencia. Los criterios para clasificar las escuelas serán la ubicación (más cerca de la montaña o del mar), la orientación (si reciben mucho sol), el entorno urbano (si están rodeadas de mucho tráfico) y el estado del edificio. Entre 2025 y 2026, se harán obras en 60 centros más y, entre 2027 y 2029, en los 86 restantes.
Para evitar al máximo posible que las obras interfieran las clases durante el periodo lectivo, el Pla Clima Escola Barcelona ha distribuido las tareas de forma que los inviernos y los veranos concentren, durante las vacaciones, la parte del proceso que podría causar más inconvenientes. El resto, aproximadamente entre ambas vacaciones, se aprovechará para realizar trabajos más sencillos con los alumnos en el interior, como, por ejemplo, desplegar las instalaciones interiores, montar la electrónica y ultimar detalles.
