nuevo Mirador barcelona hotel W
Una pareja en el nuevo mirador ubicado a los pies del hotel W, con el mar de fondo. © Blanca Blay/ACN

Barcelona gana un mirador a los pies del hotel W

La actuación, con un presupuesto de 1,5 millones de euros, permite conectar la playa de Sant Sebastià con el nuevo rompeolas

A pesar de que el hotel W Barcelona es un elemento omnipresente en el frente marítimo de la ciudad, una de sus fachadas quedaba hasta ahora oculta a cualquiera que pasease por sus alrededores. Bordeando la playa de Sant Sebastià, el paseante se topaba con el dique y tenía que dar la vuelta y pasar por delante del hotel para seguir la ruta y llegar hasta el nuevo rompeolas. Esa irrupción del camino se ha visto solventada con la construcción de unas escaleras y un paseo por encima de la escollera, lo que permite ver de frente la cara del hotel W que mira directamente al mar. 

La actuación ha ido a cargo de Nova Bocana Barcelona, la empresa concesionaria de esta zona del puerto, y ha supuesto una inversión de 1,5 millones de euros. Su director general, Javier Casado, ha puesto en valor que el flamante paseo permitirá hacer un nuevo homenaje a la obra del recientemente fallecido Ricardo Bofill y apreciarla desde una nueva óptica, con el descubrimiento de la fachada marítima, a la que el arquitecto barcelonés “le dedicó muchas ganas y esfuerzo”.

La pasarela se ha acompañado con un mirador desde el que contemplar todo el frente marítimo, desde el teleférico y la playa de la Barceloneta, pasando por la Torres Mapfre, hasta las Tres Xemeneies. “Hoy abrimos una nueva calle con vistas a Barcelona”, ha celebrado el presidente del puerto, Damià Calvet, en la inauguración del espacio. “Y desde donde también se podrá ver de manera privilegiada la Copa América“, ha añadido.

El arquitecto Carmelo Zappulla, afincado en Barcelona desde hace 20 años, ha sido el encargado de idear esta solución. “Es algo más que una escalera, es un lugar de conexión y una fachada para el paseo”, ha sostenido. Desde el despacho External Reference, Zappulla ha firmado múltiples diseños en la ciudad, especialmente en el sector de la restauración, como el Alkimia o la nueva Casa Moritz en Rambla Catalunya. Esta ha sido su primera incursión urbanística.

No ha sido una intervención fácil, ha remarcado Casado, teniendo en cuenta que el paseo se ha construido encima del dique. El proyecto se concreta en una escalera y una pasarela elevada de hormigón armado soportadas por una estructura de vigas y pilares. Se le añade una fachada visible desde el paseo revestida con plantas autóctonas y un sistema de iluminación. Todo ello se integra en el entorno, a la vez que se ha concebido para garantizar la máxima resistencia a los temporales. También se ha incluido un sistema para reciclar las aguas grises que genera el hotel W y utilizarlas para regar la vegetación que se ha incorporado en la nueva estructura. No se ha contemplado una alternativa para las personas en silla de ruedas o con otros problemas de movilidad, que tendrán que continuar dando la vuelta por delante el hotel. Se prevé valorar la instalación de un ascensor si hay la demanda suficiente, teniendo en cuenta que no hay espacio para construir una rampa.