Teixidors, el tejido que integra la sociedad

La empresa textil que diseña, fabrica y comercializa complementos para el hogar y el vestir es un ejemplo de sostenibilidad e integración social. Sus diseños están presentes en las tiendas más destacadas del mundo donde llega el alma de cada pieza hecha de manera artesanal desde Terrassa.

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uando Juan Ruiz –ingeniero textil– y Marta Ribas –asistenta social– aterrizaron en Terrassa en la década de los ochenta para alzar allí, en una ciudad con larga tradición en el sector textil, el proyecto Teixidors, lo hicieron con una visión clara, comprometida y honesta: dar oficio a personas con diversidad funcional e intelectual, utilizando el telar como herramienta terapéutica y como medio de integración social.

Desde 1983 hasta esta parte han pasado muchas cosas, pero la principal es que, su desarrollo y consolidación en el sector, se ha realizado manteniéndose fieles a los pilares fundacionales de sus orígenes, haciendo posible, a su vez, un proyecto equilibrado que combina una actividad terapéutica y una actividad económico-empresarial.

Teixidors tiene su única tienda física en Terrassa

En los talleres de Teixidors trabajan alrededor de 35 personas quienes, mediante los telares artesanales, tejen bufandas, chales, mantas, fundas de cojín, colchas de cama y un largo etcétera de productos destinados al hogar y el vestir. Y, desde hace un tiempo, también con series especiales para hoteles o el ámbito contract. Sobre sus materias primas, la calidad es excepcional: lana merino, cashmerelinosedayak… todos naturales y ecológicos y provienen de Europa.

Con un proceso de producción y acabados totalmente respetuosos con el medio ambiente, sus productos son aún más singulares. Visualmente, el rasgo “deliciosamente imperfecto” de los bordes de las piezas nos permiten comprender la autenticidad de las mismas; una condición que solo se logra cuando el telar es manual (y no industrial). Debido, también, a la veintena de telares de madera con los que trabajan, todas las piezas son únicas, por lo que la producción es limitada y de tiradas cortas. Tras cinco años en Teixidors, los trabajadores reciben un diploma del Consorci de Comerç, Artesania i Moda de Catalunya

En el 2006, Teixidors decidió abrirse al diseño y a la internacionalización, un paso que les ha llevado a participar en ferias internacionales como Maison & Objet París, ICFF New York o el Salone del Mobile de Milán.

“En el exterior y en un país como los Estados Unidos se valora el producto hecho en Europa y la marca `Barcelona´ tiene mucho poder”, explica Johanna Thörnblad, quien asumió la dirección de Teixidors en 2017

Ganadora de numerosos premios internacionales, sus productos  se pueden encontrar en Dopo Domani Berlín; Space Furniture en Singapur; Le Bon Marché de París; ABC Carpet de Nueva York o la tienda Tom Dixon de Londres, entre una larga lista de concept-stores en más de 30 países que incluyen Japón, Australia o Estados Unidos. Este último país, es su mercado internacional más fuerte.

“En el exterior y en un país como los Estados Unidos se valora el producto hecho en Europa y la marca ‘Barcelona’ tiene mucho poder. En un mercado como China, donde solo estamos entrando, un producto tejido en un telar manual es un producto único, imposible de replicar”, explica Johanna Thörnblad, quien asumió la dirección de Teixidors en 2017.

El Hotel Neri, Monument Hotel y Margot House, todos en Barcelona, han elegido trabajar con Teixidors

Para Thörnblad el mayor reto en este tiempo ha sido garantizar la sostenibilidad del proyecto, actualizando el producto en un mercado tan competitivo. Por ello, explica que las colaboraciones con artistas y diseñadores han sido clave ya que han permitido entender el valor del producto así como darle una identidad exclusiva a partir del diseño.

Tras colaboraciones con Cristian Zuzunaga o el estudio creativo Pensando en Blanco, este otoño llega una colección de plaids junto con la reconocida diseñadora británica Faye Toogood, quien ha trabajado para firmas como Hermès o Stella McCartney. “El diseño es una acción estratégica muy interesante para el futuro de Teixidors”, asegura Thörnblad.

DESARROLLO LOCAL, SOCIAL Y SOSTENIBLE

Sobre la relación con el cliente y el valor que este tipo de producto tiene en el mercado actual, Johanna Thörnblad explica que “no compartir el mensaje de inclusión social de Teixidors con el cliente es no compartir que este forma parte de un proyecto muy bonito y muy importante para una mejor sociedad. Estamos seguros que, cuando un cliente tiene la oportunidad de elegir entre un producto con un alto nivel de diseño y calidad, apuesta por un producto que ofrece este valor añadido”.

packaging Teixidors - The NBP
Detalle del packaging, Teixidors

En la entereza de la empresa trabaja también Núria Bitria, directora creativa de Teixidors, quien asevera que “entre los aspectos más interesantes de este proyecto se encuentra el hecho de poder comprobar que es posible desarrollar un producto que, por un lado, sintoniza con las tendencias de estilo internacionales y, por otro, mantiene su identidad defendiendo valores de desarrollo local, social y sostenible”.

Otra figura clave es Sofia Agerberth. La directora comercial entró en el proyecto en 2010 en un momento cuyo enfoque era la exportación y alcanzar mercados nuevos. De todo este recorrido, dice: “Ha sido un reto llegar hasta donde estamos posicionados actualmente en el mercado internacional. Potenciar el producto y llegar a trabajar con las tiendas más destacadas del mundo, ha sido muy interesante. Es fascinante comprobar que el producto Teixidors tiene su mercado entre clientes que buscan valores”.

Tres profesionales quienes, junto a Jaume Mas, director técnico de Teixidors, defienden con ahínco un proyecto que ya lleva 35 años de rodaje. Sobre lo que está por venir, la fuerza y el coraje es imbatible. Desde hace un año Teixidors forma parte de la Fundació Privada President Amat Roumens (FUPAR) de Terrassa. Junto al soporte de su dirección y del Ayuntamiento de Terrassa, durante 2019, la empresa realizará el traslado de su taller y oficinas a un edificio emblemático ligado a la historia textil de Terrassa. Un cambio positivo que llegará como un nuevo impulso para continuar trabajando, apostando y creciendo un proyecto que demuestra qué tan lejos podemos llegar cuando la propuesta es firme y el corazón nos lleva a tejer sociedades más inclusivas y justas.