El fabricante Hubmaster Storage and Handling Solutions hacía tiempo que tenía en mente instalarse en el DFactory Barcelona, centro de nueva economía e industria 4.0 impulsado por el Consorci de la Zona Franca de Barcelona (CZFB). Están en un proceso de crecimiento y expansión internacional, y querían que la mudanza les sirviese para tejer alianzas con otras empresas y generar sinergias, además de llegar a nuevos clientes. Consiguieron su hueco este mes de marzo.
“Es un espacio colaborativo y motivador, aporta valor al equipo”, sostiene su consejero delegado y cofundador, Mario Sánchez, “esta reubicación nos dará acceso a una red de emprendedores, inversores y expertos en la industria que pueden ayudarnos a acelerar nuestro crecimiento y llevar nuestras innovadoras soluciones de almacenamiento y manipulación a más clientes en todo el mundo”.
Fundada hace 15 años en Barcelona, la compañía tecnológica se dedica a la intralogística, especializándose en el diseño y la producción de sistemas para automatizar almacenes, es decir, robots para colocar y recoger palés más fácilmente. En el DFactory, han ubicado su equipo de desarrollo, formado por unos 20 trabajadores. El espacio colaborativo les servirá para testear nuevas soluciones y tecnologías, como la visión artificial, que permite crear sistemas de lectura de los objetos que hay que mover a partir de imágenes y no sensores.
De momento, Hubmaster aún no ha llegado a ningún acuerdo con las empresas y entidades en el DFactory, pero ya han empezado los contactos. Lo facilita los espacios de oficina y las salas de reuniones compartidas, así como los eventos y las charlas que se organizan en los espacios comunes. El edificio, con una superficie de 17.000 metros cuadrados repartidos en cuatro plantas, tiene como inquilinos a empresas como el Centre Tecnològic Leitat, HP, Oryon Universal, Alisys, Dow Chemical Ibérica o Simon. El CZFB ha invertido 30 millones de euros en su puesta en marcha y prevé una ampliación que sumará 72.500 metros cuadrados, añadiendo 70 millones de euros más. Cuando esté completamente ejecutado, se prevé que acoja a un centenar de empresas y 1.500 empleados.
Desde la Zona Franca, el fabricante de sistemas para automatizar almacenes gestiona clientes en países como Alemania, Francia, Austria, Reino Unido e Israel. Está empezando su expansión por Estados Unidos y también tiene proyectos en América Latina y Oriente Medio. Trabajan con sectores diversos, desde empresas de packaging y distribución hasta de alimentación y automoción. También varía la dimensión de las compañías con las que tratan, desde medianas hasta grandes multinacionales como Shell y Airbus, con campo por recorrer con las que tienen un tamaño menor y aún no se han planteado la automatización.
La empresa complementa el centro de desarrollo ubicado en el DFactory con la planta que tiene en Tarragona, donde se producen los robots que venden para automatizar almacenes, conocidos como transelevadores multipasillo. No todos se fabrican en Tarragona, subcontratando parte de la producción a empresas catalanas y de Europa del Este. En el centro operativo de Tarragona también se ofrece el servicio técnico a los clientes. En conjunto, la plantilla total se sitúa en los 35 trabajadores.
En el centro operativo de Tarragona, Hubmaster fabrica parte de la producción y ofrece el servicio técnico a los clientes
Según remarca Sánchez, la solución que ofrece Hubmaster se encuentra a medio camino entre los sistemas tradicionales de automatización, pensados para edificios nuevos, y los vehículos automáticos, para los que hay que dedicar muchos recursos, además de que necesitan una infraestructura muy puntera y mucho espacio. Los transelevadores multipasillo de la empresa barcelonesa se pueden encajar en edificios existentes, además de no suponer los costes que presentan los vehículos automáticos. “Para automatizar los almacenes, hay múltiples soluciones, cada una con sus ventajas e inconvenientes y diferentes niveles de coste, la nuestra es una solución diferenciada y con un retorno muy interesante”, defiende.
Hubmaster empezó en 2005 a desarrollar sus soluciones para almacenes. Constituida por un equipo barcelonés que se había conocido en Reino Unido y volvió a casa, se centró en un origen en una tecnología más básica, sin automatizar. Fue en 2015 cuando decidieron cambiar de rumbo, apostando por la automatización, momento a partir del cual ha crecido su actividad internacional. Antes de llegar al DFactory, tenían oficinas en el centro de Barcelona.
