El grupo Ametller Origen ha cerrado el ejercicio 2022 con una facturación consolidada de 453 millones de euros. Esta cifra supone un alza del 17% respecto al año anterior (387 millones) y consolida a la cadena como una de las de mayor crecimiento en el sector de la distribución alimentaria, donde ya controla una cuota de mercado del 3,1%.
Con una red de 128 tiendas en Catalunya que cuentan con un millón de clientes, Ametller Origen ha incrementado en un 4% el número de trabajadores, hasta sumar 3.491 personas. Fundada en el año 2001 por los hermanos Josep y Jordi Ametller, la empresa del Penedès destaca que en la venta de fruta y verdura ya ha logrado tener un “peso muy importante”, con una cuota de mercado en Catalunya que alcanza el 12%. En platos elaborados, la participación de mercado supera ya el 7%.
“Durante estos veinte años, hemos trabajado para ser un referente en producto fresco y acercar a la comunidad alimentos frescos de máxima calidad. Nos emociona seguir creciendo, porque es el mejor reconocimiento que podemos tener en el esfuerzo que hacemos cada día miles de ametllerencs“, ha explicado el consejero delegado y cofundador de Ametller Origen, Josep Ametller.
Según la empresa, está previsto que este mismo año empiecen las obras de la primera fase del Agroparc Penedès, un proyecto que quieren que esté en pleno funcionamiento en 2026 y que tiene un presupuesto de 180 millones de euros. La idea es poner en marcha en el municipio de Gelida (Alt Penedès) un complejo agroindustrial sostenible que producirá más energía de la que consumirá y que quiere ser una punta de lanza para contribuir a transformar el sector agrario gracias a un uso intensivo de la tecnología y la digitalización, lo hará más eficiente la producción alimenticia. “Queremos seguir alimentando de forma saludable y sostenible a las generaciones del futuro y, para conseguirlo, es clave impulsar un cambio en el sector”, subraya el consejero delegado. El reto de Ametller, que ha reducido en un 40% sus emisiones, es convertirse en una empresa neutra en emisiones de CO₂.
Basado en un modelo de integración vertical, el grupo familiar Ametller Origen se estructura en torno a tres grandes áreas de negocio: producción agrícola, elaboración y envasado de alimentos, y comercialización mediante la red de tiendas propias. En el primer ámbito, Ametller destaca la apuesta que ha realizado por las Terres de l’Ebre, donde ya tiene más de 200 hectáreas en las que cultiva diferentes tipos de vegetales y cítricos. Además de abrir una tienda en Amposta, la compañía ha adquirido recientemente una nave de 20.000 metros cuadrados en el polígono de Tortosa, con la que quiere impulsar el cultivo de la alcachofa en la zona. “Queremos desplegar este año el club de productores de alcachofa, para sumar esfuerzos con otros productores tanto a nivel de producción como de comercialización de este producto”, explica la empresa.
Investigación en nuevas variedades de tomate
Otro producto que centra los esfuerzos de Ametller Origen es el tomate, artículo crítico para los consumidores, que buscan calidad y máximo sabor. En este sentido, la empresa explica que, actualmente, está probando más de cien variedades distintas en tres campos de ensayo ubicados en Catalunya y Portugal. Además, el año pasado constituyó la startup Tip Top Tomatoes, una empresa de nueva creación donde controla el 75% del capital y especializada en la producción de semillas para desarrollar nuevas variedades de tomates. Debe tenerse en cuenta que el 40% de la producción de tomates de Ametller Origen se vende en su red de tiendas y el otro 60% se destina a la exportación y a terceras empresas.
En la división de obrador, el grupo elabora cada año 15 millones de productos como tortillas, cremas, sopas frías y yogures, que vende tanto en sus tiendas como en otras cadenas de supermercados. Ametller, que ha duplicado casi el número de tiendas en la última década, ha abierto recientemente nuevos establecimientos en Terrassa y Palafrugell y tiene previsto realizar cinco nuevas inauguraciones el próximo mes de junio.
