La miel es un producto natural pero sujeto a muchas adulteraciones. ©yves Tennevin

Tecnología catalana para analizar la calidad y el origen de la miel

La empresa Sonicat Systems, con sede en L'Hospitalet, ha desarrollado un innovador microscopio digital con inteligencia artificial que determina el origen botánico y garantiza el correcto etiquetado de este producto, sujeto a altos índices de fraude

La empresa catalana Sonicat Systems, con sede en L’Hospitalet de Llobregat, ha desarrollado un microscopio digital con inteligencia artificial que analiza la miel, y de forma automática determina su origen botánico y valora su calidad. La tecnología se basa en un software pionero en el mundo que, a partir de una base de datos interna de más de 180.000 imágenes, cuantifica el perfil polínico de la miel sin prácticamente requerir la intervención humana y así garantizar el correcto etiquetado.

Sonicat Systems ha contado con el apoyo de Acció, mediante el programa Cupons d’Indústria 4.0, unas ayudas destinadas a la implantación de nuevas tecnologías en procesos industriales, ha explicado el Departament d’Empresa de la Generalitat.

“Según la normativa del sector, para que una miel pueda etiquetarse como monofloral, generalmente debe contener unas concentraciones mínimas determinadas de polen procedente de esa especie botánica”, recuerda la cofundadora y consejera delegada de la empresa, Irache Perales. “Con el sistema desarrollado por Sonicat Systems, llamado Honey.AI, el objetivo es que el apicultor, la empresa envasadora o la cooperativa que produce la miel pueda analizar el producto sin necesidad de enviarlo a un laboratorio externo, por lo que se ahorra tiempo y dinero”, explica Perales, informa ACN.

El sistema desarrollado por la compañía catalana se basa en un microscopio sencillo que han robotizado, al que también han incorporado una cámara, que se controla mediante una aplicación de escritorio. “Hemos entrenado un modelo de inteligencia artificial a partir de una base de datos con más de 180.000 fotografías de diferentes tipologías de miel de toda Europa y diversas especies polínicas para que el sistema las aprenda a clasificar”, señala la CEO de Sonicat Systems. El usuario sólo tiene que introducir un portaobjetos con una pequeña muestra de miel centrifugada en el microscopio, que lo analiza automáticamente y toma imágenes que después procesa y clasifica en la nube mediante el software que ha creado la empresa.

El sistema pronto podrá contar también con un dispensador automatizado que introduce en el microscopio hasta 24 muestras de miel, que se pueden ir analizando de forma autónoma a lo largo de un día. De esta forma, se determina la especie botánica de donde se ha extraído la miel para poder certificar la calidad del producto automáticamente. “No hay otro sistema igual en el mundo”, remarca Perales. “Las universidades han impulsado investigaciones para automatizar imágenes y existen programas para analizar alergenos del polen en el aire, pero estas tecnologías nunca se habían aplicado al análisis de la miel en el ámbito comercial, y con un dispositivo automatizado”, apunta la directora ejecutiva de Sonicat Systems.

Primer diseño con Eurecat y comercialización este 2023

La empresa ha colaborado en los últimos meses con el centro tecnológico Eurecat para desarrollar el primer diseño del dispensador automático Honey.AI y, actualmente, está realizando las primeras pruebas piloto de su microscopio con compañías clave del sector, como Granja San Francisco o Apisol. Ya disponen de un prototipo funcional y están finalizando el proceso para obtener el marcado CE. Sonicat Systems prevé empezar a comercializar su producto durante la primera mitad de este 2023 e iniciar la expansión internacional a partir del próximo año, con los mercados de Francia, Portugal, Italia y Alemania como primeros objetivos.